Correos electrónicos revelan esfuerzos de Trump para subvertir la certificación del Colegio Electoral
Los correos electrónicos revisados por The New York Times muestran un esfuerzo frenético para organizar a los electores “falsos”
Los asesores de Donald Trump que participaron en el plan del expresidente para anular las elecciones de 2020 parecieron reconocer que su plan era legalmente dudoso, según los correos electrónicos revelados por The New York Times.
El Times dijo que había revisado y autenticado decenas de correos electrónicos que muestran un esfuerzo frenético por parte de los asistentes de Trump y una camarilla de abogados y partidarios fuera de la Casa Blanca para enviar electores falsos a la certificación del Colegio Electoral de las elecciones de 2020.
Los correos electrónicos se refieren con frecuencia a electores “falsos”, y los implicados parecían ser conscientes de que sus esfuerzos no tenían ningún valor legal, informó el Times.
“Simplemente estaríamos enviando votos electorales ‘falsos’ a Pence para que ‘alguien’ en el Congreso pueda hacer una objeción cuando comiencen a contar los votos”, escribió Jack Wilenchik, un abogado que ayudó a organizar a los electores pro-Trump en Arizona, en un correo electrónico enviado el 8 de diciembre de 2020, según el Times. El correo electrónico fue enviado a Boris Epshteyn, un asesor estratégico de la campaña de Trump.
Añadió en un correo electrónico posterior que “‘votos alternativos’ es probablemente un término mejor que ‘votos falsos’”.
Wilenchik también describió un plan de otro abogado que trabaja con la campaña, Kenneth Chesebro, para enviar electores falsos para Trump, señalando que el plan no era legalmente sólido.
“Su idea es básicamente que todos nosotros (GA, WI, AZ, PA, etc.) hagamos que nuestros electores envíen sus votos (a pesar de que los votos no son legales conforme a la ley federal, porque no están firmados por el Gobernador, para que los miembros del Congreso puedan deliberar sobre si deben ser contados el 6 de enero”, escribió Wilenchik en el correo electrónico a Epshteyn.
El Times informó de que Epshteyn era “un punto de contacto habitual” para John Eastman, el abogado que ideó el plan para enviar falsos electores al Congreso el 6 de enero de 2021. Otros implicados en los esfuerzos fueron los abogados Jenna Ellis y Bruce Marks, y Gary Michael Brown, que fue subdirector de las operaciones del día de las elecciones de la campaña de Trump.
Los correos electrónicos muestran las líneas generales de un plan cambiante para anular la voluntad de los votantes en los estados disputados que perdió Trump. Aunque el esfuerzo finalmente no tuvo éxito, la repetición de afirmaciones falsas sobre el fraude electoral por parte de Trump y su campaña estimularía a los partidarios del entonces presidente a atacar el Capitolio estadounidense el 6 de enero.
Un comité de la Cámara de Representantes que investiga las causas del ataque ha solicitado una gran cantidad de comunicaciones entre los asesores de Trump y los principales participantes en el plan para anular las elecciones.
Trump y algunos de sus aliados se enfrentan a una serie de investigaciones relacionadas con sus esfuerzos para anular las elecciones de 2020.
A principios de este mes, un gran jurado especial que investiga la posible interferencia criminal en los resultados de las elecciones presidenciales de 2020 en Georgia citó a personajes clave del equipo legal que asesoró a Trump después de la votación. Entre este grupo estaban el abogado personal de Trump, Rudy Giuliani, John Eastman, Cleta Mitchell, Kenneth Chesebro y Jenna Ellis. El senador Lindsey Graham, aliado de Trump, también estaba incluido.
Los archivos judiciales alegan “un plan coordinado en varios estados por la campaña de Trump para influir en los resultados de las elecciones de noviembre de 2020 en Georgia y en otros lugares”. Un gran jurado de 23 personas se constituyó en mayo y ya ha escuchado a numerosos testigos.
El Departamento de Justicia ha estado investigando los esfuerzos de gran alcance de los aliados del expresidente Trump para revertir los resultados de las elecciones presidenciales de 2020, incluso mediante la creación de listas de electores falsos en los estados disputados con la intención de subvertir el conteo de votos.
El fiscal general Merrick Garland dijo a los periodistas la semana pasada que “ninguna persona está por encima de la ley” y describió la investigación sobre el ataque al Capitolio como la más importante y de mayor alcance en la historia del Departamento de Justicia.
— Con información de Associated Press.