Informan que Trump se burló de Harris ante un grupo de donantes multimillonarios

Según consta, durante una reciente recaudación de fondos, Donald Trump insultó a Kamala Harris mientras le hablaba a los donantes multimillonarios republicanos allí presentes.

A medida que la contienda electoral llega a su fin, el expresidente se siente cada vez más frustrado por la distancia que lo separa de Harris con respecto a la recaudación de fondos.

Según The New York Times, Trump se descargó durante una reciente reunión en Manhattan en la que se encontraban donantes del partido republicano de alto perfil, entre ellos Paul Singer, Joe y Todd Ricketts, la exsecretaria de Educación Betsy DeVos y otros. El periódico citó a varias fuentes, quienes describieron al expresidente despotricando y quejándose de que sus donantes no estaban apoyando lo suficiente su tercera candidatura a la presidencia.

Durante su discurso, los ataques personales contra Harris se volvieron cada vez más intensos. El exmandatario la llamó “retrasada”; sin embargo, no es la primera vez que insulta a la candidata demócrata. De hecho, durante un acto de campaña a finales de septiembre la calificó de “deficiente mental”.

También volvió a atacar a los judíos estadounidenses que apoyan a Harris.

A lo largo de la campaña electoral, Trump ha realizado varios comentarios casi antisemitas contra los judíos estadounidenses que respaldan al partido demócrata y a su oponente, mientras que, en cambio, argumentaba que deberían apoyar más a Israel.

“Cualquiera que sea judío y ame esa religión, así como a Israel, es un tonto si vota a un demócrata”, aseguró al respecto Trump el mes pasado, y agregó: “Deberían hacerse ver el cerebro”.

Asimismo, el expresidente ha atacado en reiteradas ocasiones a los demócratas por declaraciones de apoyo a la crisis humanitaria relacionada con el accionar de Israel en Gaza y por otras críticas al gobierno israelí. Además, ha utilizado la palabra “palestino” como insulto, y lo catalogó de esa manera al líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer, el judío de mayor rango en la política estadounidense actual, luego de que el político brindara un discurso durante el que pidió un llamado a elecciones en Israel.

Como si fuera poco, Trump también ha expresado su malestar por la falta de apoyo de las mujeres, un hecho que quizás no sorprenda, dado que su compañero de fórmula, J. D. Vance, durante su candidatura para el Senado 2021-2022, se alineó con una corriente de pensamiento conservadora que sostiene que, en una sociedad ideal, las mujeres deberían dedicarse exclusivamente a la crianza de sus hijos.

Los ataques del expresidente se producen en un contexto en el que la contienda electoral llega a su fin, al mismo tiempo que Harris mantiene una enorme ventaja en la recaudación de fondos, lo cual sea probablemente insuperable antes del día de la votación.

El candidato republicano se ha quedado atrás desde que Harris reemplazó a Biden a mediados de julio, pero eso es solo la mitad de la historia. En los informes más recientes de la Comisión Federal de Elecciones, el equipo de Harris recibió más dinero que el de Trump y el Comité Nacional Republicano juntos. Incluso en agosto, su recaudación fue cuatro veces superior a la del expresidente.

De todas maneras, Trump no se rendirá. Los datos de las encuestas muestran que la diferencia entre los candidatos es muy pequeña. El expresidente lidera en algunos estados péndulo, como Wisconsin y Michigan, y parte de los “estados azules” (los que siempre han votado al partido demócrata), cuya caída ante los republicanos en 2016 precipitó la derrota de Hillary Clinton ese año. La vicepresidenta, por su parte, se mantiene primera en los sondeos nacionales por algunas centésimas.

En las últimas semanas, los republicanos se mantuvieron optimistas gracias al gran desempeño de Vance, el compañero de fórmula de Trump, en el debate vicepresidencial celebrado en Nueva York. Además, según las encuestas, el expresidente parece estar logrando mejores resultados entre los votantes afroamericanos y latinos en comparación con republicanos de ciclos electorales anteriores, lo que, de confirmarse en noviembre, representaría un duro revés para la estrategia del equipo de Harris. Sin embargo, la vicepresidenta continúa liderando en ambos grupos demográficos, en comparación con los números de Joe Biden de principios de año.

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Traducción de María Luz Avila