Melania Trump no cumpliría con su rol de primera dama si el republicano gana las elecciones
La exmodelo planea dividir su tiempo entre Washington D. C. y Nueva York, ciudad donde el hijo de la pareja asistirá a la Universidad de Nueva York durante el otoño
Según informan, si Trump gana las elecciones presidenciales, su esposa Melania no se dedicaría exclusivamente a desempeñar sus funciones como primera dama.
Una fuente cercana a la familia explicó al medio Page Six que la exmodelo eslovena y el magnate han llegado un acuerdo en el que determinaron que, si él gana la presidencia en noviembre, ella no cumplirá con sus obligaciones de primera dama las 24 horas del día, los siete días de la semana.
En definitiva, según el informante, Melania cree que puede ser madre y primera dama a la vez.
“No quiere tener una agenda repleta de actos en la Casa Blanca, pero hace hincapié en que sí puede ser madre y primera dama al mismo tiempo”, explicó.
Y luego, se refirió al vínculo entre Barron y Trump y expresó: “Donald tiene una buena relación con Barron, pero no puede pasar tanto tiempo con él si se convierte en el presidente y en el jefe del mundo liberal. Llegó a un acuerdo, y sabe que las madres y los padres de todo el país entenderán la devoción que tiene Melania por su hijo”.
“Donald confía en Melania para criar a Barron de la misma manera que confió en Ivana para criar a sus otros hijos. Siente que esa dinámica funcionó para Ivanka, Eric y Don Jr.”, finalizó.
En lugar de cumplir con sus funciones a tiempo completo como esposa del presidente, Melania dividiría su tiempo entre Washington D. C. y Nueva York, ciudad donde el hijo de la pareja asistirá a la Universidad de Nueva York durante el otoño.
“Es una madre muy comprometida, y ya está planeando pasar parte del mes, y seguramente de cada semana, en Nueva York”, explicó también la fuente.
Asimismo, sostuvo que Melania se siente segura tanto en Nueva York como en la Torre Trump.
“Es el hogar de Barron, por eso quiere que vaya a la universidad allí. Al estar cerca de él, puede brindarle apoyo emocional y físico. De hecho, todos recuerdan cómo retrasó la mudanza a Washington D C porque quería que él terminara la escuela primero”, aseguró.
Después de que Trump ganó las elecciones presidenciales de 2016 y comenzó el mandato en enero de 2017, Melania retrasó cinco meses su mudanza a la Casa Blanca con Barron para que su hijo pueda terminar el año escolar sin interrupciones.
Pero, a pesar de que la exmodelo se siente bien en Nueva York, está preocupada por el escrutinio al que se enfrentará su hijo de 18 años si su padre llegase a ocupar el liderazgo del país nuevamente.
Al respecto, el informante sostuvo: “Barron nunca se ha manejado solo, y Melania quiere estar cerca de él por el estrés que supone el primer año de universidad y también por la posibilidad de ser el hijo del próximo presidente en una ciudad mayormente demócrata. Asimismo, está preocupada por cómo reaccionarán en su escuela ante la presencia del personal de seguridad que cuida a Barron”. También expresó que la mujer es una madre muy sobreprotectora.
“Melania se opuso a la idea de que Barron fuera el representante del Partido Republicano en la [Convención Nacional Republicana] de Florida”, contó.
En mayo, se anunció que Barron, junto con sus hermanos mayores, sería el delegado del Estado de Florida en la convención nacional del Partido Republicano para nominar oficialmente a su padre como candidato presidencial republicano.
Sin embargo, días después, desde la oficina de Melania emitieron un comunicado en el que aseguraron que el joven no asistiría a la convención.
En el aviso, aclararon que Barron se sentía honrado por haber sido elegido para representar a Florida, pero que no podría asistir debido a compromisos previos.
De haber participado, habría sido la primera vez que el miembro más joven de la familia Trump se involucraba directamente en política.
A principios de esta semana, varios “melaniólogos”, palabra que se utiliza para nombrar a quienes se dedican a analizar la vida de la ex primera dama, señalaron en diálogo con Axios que no hay muchas probabilidades de que Melania regrese a Washington D C si su marido gana la presidencia.
“Melania hace lo que quiere”, manifestó Mary Jordan, editora adjunta del Washington Post y autora de la biografía no autorizada de Melania The Art of Her Deal (2020). Más aún, agregó que la esposa del expresidente se diferencia de cualquier otra primera dama, ya que ella considera que no es directamente elegida para el cargo ni tampoco le pagan por hacerlo, por lo que no se siente obligada a cumplir con dichas tareas.
Desde que dejaron de residir en la Casa Blanca en 2021, Melania ha mantenido un perfil bajo y ha optado por no participar en eventos o actos de campaña junto con su marido. De hecho, tampoco estuvo presente en las audiencias del juicio por soborno que enfrentó el magnate.
Cuando la conductora de Fox News Laura Ingraham le preguntó por la ausencia de su esposa en febrero, Trump le respondió que “[Melania] es una persona reservada” y que está enfocada en su familia.
“Muchas primeras damas son mediáticas, quieren estar en todas partes y se enojan con sus maridos si no las presentan públicamente. Si yo no presentara a Melania, se sentiría feliz. Simplemente, es una persona diferente”, comentó el exmandatario.
Traducción de María Luz Avila