Elon Musk se disculpa con Trump y admite que sus publicaciones “fueron demasiado lejos”
El magnate tecnológico intenta calmar tensiones con Trump tras su reciente enfrentamiento público
Elon Musk usó X (antes Twitter) para disculparse por sus ataques recientes al presidente Donald Trump. Menos de una semana después del cruce, Musk reconoció que “algunas” de sus publicaciones cruzaron la línea.
“Lamento algunas de mis publicaciones sobre el presidente Donald Trump la semana pasada. Fueron demasiado lejos”, escribió en su propia red social durante la madrugada del miércoles.
La disculpa llegó seis días después de que Trump dijera sentirse “muy decepcionado” con Musk, su exasesor y donante, por haber criticado el “gran y hermoso proyecto de ley” que impulsa en el Senado. El cruce escaló rápidamente: Musk lanzó ataques personales, y Trump respondió desde su red social, Truth Social.
El mismo día que Musk ofreció una disculpa pública, Trump se mostró abierto a una reconciliación. En una entrevista pregrabada para un pódcast, afirmó:
“No le guardo rencor”. La conversación, grabada el lunes, incluyó una referencia directa al conflicto: “La verdad, no me lo esperaba. Atacó un proyecto de ley extraordinario… Creo que se siente muy mal por haber dicho eso”.
El mandato de 130 días de Elon Musk al frente del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), cuya misión era reducir el gasto público, llegó a su fin el pasado 30 de mayo. Sin embargo, pocos días después, el empresario lanzó duras críticas contra el paquete fiscal y de gasto promovido por Donald Trump. Afirmó que ese plan aumentaría de forma alarmante la deuda nacional y lo calificó como una “abominación repugnante”.
“No lo soporto más. Este proyecto de ley del Congreso está lleno de despilfarro escandaloso. Es una abominación repugnante”, escribió en X. “Qué vergüenza para quienes votaron a favor. Saben que hicieron mal. Lo saben”.
Al día siguiente, Musk intensificó su postura con un mensaje contundente: “¡ELIMINEN EL PROYECTO DE LEY!”. También pidió a sus millones de seguidores que contacten a sus representantes y senadores para recordarles que “¡quebrar a Estados Unidos NO está bien!”.
En los pasillos del poder, trascendió que el presidente ya no disimulaba su creciente irritación ante la intromisión de Musk, sin entender del todo a qué se debía tanta animosidad. Finalmente, no se contuvo y lo dejó claro durante la visita del canciller alemán Friedrich Merz a la Casa Blanca, el pasado jueves.
“Estoy muy decepcionado, porque Elon entendía el funcionamiento interno de este proyecto de ley mejor que casi cualquiera en esta sala, mejor que ustedes”, declaró Trump desde el Despacho Oval. “Lo sabía todo. No tenía ninguna objeción. Y de repente, todo se convirtió en un problema”.
Trump también aseguró que, durante las elecciones presidenciales, habría podido ganar el disputado estado de Pensilvania sin contar con la ayuda de Elon Musk.
“Sin mí, Trump habría perdido las elecciones, los demócratas controlarían la Cámara y los republicanos estarían 51-49 en el Senado”, replicó Musk en X. “Qué ingratitud”, añadió en otra publicación.
Trump afirmó que la empresa de Musk se encontraba en declive y, a través de Truth Social, lo acusó de haberse “vuelto loco”. Además, lanzó una amenaza directa: podría retirarle los lucrativos contratos que mantiene con el gobierno.
Musk respondió en X con una amenaza: desmantelar la nave espacial Dragon de SpaceX, utilizada para transportar astronautas hacia y desde la Estación Espacial Internacional. Pero lo más impactante fue su siguiente afirmación: aseguró que Trump aparece mencionado en archivos clasificados del gobierno relacionados con el fallecido pedófilo Jeffrey Epstein y sostuvo que esa sería la verdadera razón por la que dichos documentos no han salido a la luz.
Musk también compartió una fotografía en la que aparecen Trump y Epstein juntos, además de un video de 1992 donde se los ve conversando durante una fiesta en la residencia del presidente en Nueva York.
Al día siguiente, asesores del Ala Oeste señalaron que ambos estaban considerando una llamada telefónica para limar asperezas. Sin embargo, Trump sorprendió al declarar ante la prensa que no tenía ningún interés en hablar con quien, apenas unos meses atrás, había donado al menos 288 millones de dólares a su campaña electoral. Con ese comentario, dejó en el aire una relación que alguna vez fue cercana.
El exasesor de Trump, Steve Bannon, exigió la deportación de Musk y que se lo investigara por un supuesto consumo de drogas. Mientras tanto, los programas satíricos nocturnos aprovecharon el escándalo e internet se desbordó con especulaciones y opiniones de todo tipo.
Sin embargo, la atención pública pronto se desvió con el estallido de protestas en Los Ángeles contra las políticas del presidente en materia de inmigración ilegal. Activistas se enfrentaron a agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas y, de forma polémica, el presidente ordenó el despliegue de la Guardia Nacional para apoyar a las fuerzas locales en el mantenimiento del orden.
Traducción de Leticia Zampedri