“Don perezoso”: captan a Trump con los ojos cerrados durante el discurso del Dr. Oz en la Oficina Oval
El Presidente de Estados Unidos fotografiado dormitando durante el anuncio de la reducción de precios de los medicamentos para adelgazar, que combaten la obesidad y ayudan a conciliar el sueño
El gobernador de California, Gavin Newsom, volvió a calificar a Donald Trump de "don perezoso", esta vez después de que el presidente pareciera dormitar durante una reunión en el Despacho Oval sobre cómo combatir la obesidad para mejorar el sueño.
A Trump, de 79 años, se lo vio con los ojos cerrados en varios momentos del acto televisado, en el que su Gobierno anunció precios más bajos de los medicamentos para adelgazar destinados a los beneficiarios de Medicare y Medicaid.
“La gente puede volver a dormir, porque puede respirar cuando se acuesta”, dijo el Dr. Mehmet Oz, administrador de los Centros de Servicios de Medicare y Medicaid.
Mientras tanto, el presidente fue fotografiado reclinado en su silla con los ojos cerrados, lo que llevó a Newsom a publicar “¡Volvió don perezoso!”
Durante el acto, un hombre que se encontraba detrás de Trump tropezó y se desmayó.
Newsom describió anteriormente al presidente como “don perezoso”, después de que el comandante en jefe pareciera quedarse dormido el mes pasado durante una “mesa redonda Antifa” ampliamente criticada.
La burla de Newsom es un guiño al apodo que el propio Trump puso a “somnoliento Joe” Biden, que tenía 81 años cuando abandonó la carrera presidencial de 2024, y 82 cuando terminó su mandato. Trump se convirtió en el presidente de mayor edad en jurar el cargo, con 78 años y 7 meses, y también cumplirá 82 al terminar este mandato.

Trump, que es famoso por afirmar que se las arregla durmiendo muy poco y no tiene reparos en ponerse en contacto con el personal a todas horas, también fue captado aparentemente dormitando en varias ocasiones.
Además del episodio de Antifa del mes pasado, el presidente fue visto descansando los ojos durante un evento sobre energía e innovación en julio, durante el interrogatorio a su exabogado, Michael Cohen, el año pasado, y de nuevo cuando su juicio por el “dinero del silencio”, que involucra a Stormy Daniels, se puso en marcha un mes antes.
La representante de Colorado Lauren Boebert incluso salió en defensa del presidente, sugiriendo que estaba rezando, no durmiendo, cuando cerró los ojos durante su juicio el año pasado. “Pero si está durmiendo, desde luego está muy lindo mientras duerme”, dijo, y añadió: “Aunque quizá sea un entrañable momento de oración”.

Anteriormente, Trump ya se había mostrado reacio a dormir mucho y había dicho a sus partidarios durante la campaña: “No duermo mucho. Me gusta hacerlo tres horas, cuatro horas, doy vueltas, hago bip-bip, quiero saber qué pasa”.
La fiscal general Pam Bondi dijo recientemente que ningún miembro del equipo de la Casa Blanca “puede seguirle el ritmo”. Agregó: “No sé cómo lo hace. Ninguno de nosotros sabe cuándo duerme. Trabaja todo el tiempo, y es algo constante para él”.
El mes pasado, Trump se sometió a una resonancia magnética. “El resultado dio perfecto”, declaró a los periodistas.
Traducción de Olivia Gorsin





