¿Distancia social por el covid-19 o juego de poder? Por qué Putin se mantiene alejado de los líderes mundiales
La enorme mesa que separa a Vladimir Putin y Emmanuel Macron en las conversaciones sobre Ucrania se ha vuelto viral
La expectativa sobre la reunión del lunes entre Emmanuel Macron y Vladimir Putin se centró en cómo podrían ambos líderes salvar el abismo político provocado por la crisis sobre Ucrania. Sin embargo, fue la distancia física entre los líderes lo que dominó el discurso en línea después de que comenzaron las conversaciones.
El presidente de Rusia sentó a su homólogo francés a más de 10 pies (3 metros) de distancia de él en el otro extremo de una mesa larga y ovalada en el Kremlin, lo que provocó risas y memes en las redes sociales, y los usuarios se debatieron si la disposición de los asientos era una precaución debido al covid.19 o un deliberado juego de poder deliberado.
En las últimas semanas, Putin también recibió al primer ministro de Hungría, Viktor Orban, su aliado más cercano de la Unión Europea, y al presidente iraní, Ebrahim Raisi, y en ambos casos mantuvo la distancia con sus homólogos en los extremos opuestos de la mesa extravagantemente grande.
El Dr. Ben Noble, profesor asociado de política rusa en el University College London, cree que el Kremlin teme la posibilidad de que Putin contraiga a covid-19, principalmente debido a las consecuencias políticas si el hombre de 69 años enferma gravemente o muere.
“Dada la importancia central de Putin para el funcionamiento del sistema actual, que a menudo se basa más en relaciones informales que en instituciones formales, su enfermedad representa una amenaza existencial para su funcionamiento continuo”, comentó el Dr. Noble para The Independent.
“Una cuestión de salud personal, por lo tanto, se convierte en una cuestión de seguridad nacional, en especial dada la incertidumbre sobre quién se haría cargo en la realidad si él se enferma gravemente”, dijo el Dr. Noble.
No es una exageración decir que el presidente ruso era más cuidadoso con el covid-19 que muchos líderes mundiales en las primeras etapas de la pandemia, pues implementó medidas estrictas en un momento en que el primer ministro británico, Boris Johnson, fue hospitalizado debido al virus tras jactarse de haberle dado la mano a los pacientes de un hospital.
A principios de 2020, cualquiera que viera a Putin en persona tenía que presentar una prueba de covid-19 negativa. Unos meses después, las personas que visitaban su residencia en las afueras de Moscú o se reunían con él en el Kremlin tenían que pasar por un túnel especial de desinfección.
En ese momento, el presidente trabajaba principalmente desde casa en lugar de en el Kremlin, y se unía a las reuniones de videoconferencia desde una habitación que sus críticos llamaron un búnker.
Más tarde, el Kremlin impuso una cuarentena obligatoria de dos semanas para las personas que tenían previsto reunirse cara a cara con Putin, según un informe de septiembre de 2020 del medio de noticias de investigación Proekt, que el año pasado fue prohibido por el gobierno.
Cuando se vio al presidente toser con frecuencia durante una reunión del gobierno, el año pasado, aseguró a los funcionarios que estaba bien y que le hacían pruebas de covid-19 todos los días.
A pesar de tales precauciones, otros analistas no creen que Putin esté demasiado preocupado por el coronavirus: señalan fotografías de reuniones recientes en el Kremlin que lo muestran sentado muy cerca con funcionarios rusos y destacan el reciente viaje del presidente a Beijing para los Juegos Olímpicos de Invierno, en el que no usó cubrebocas.
Olga Khvostunova, directora del Instituto de Rusia Moderna, un grupo de expertos con sede en EE.UU., dijo que la distancia deliberada establecida entre Putin y Macron en la reunión del lunes respondió más al control que al coronavirus.
“Es para incomodar a Macron, para mostrar quién manda en estas situaciones”, declaró para The Independent.
“ Se trata de desconcertar al oponente... los líderes de un país no están acostumbrados a que los traten de esta manera, por lo que a menudo es bastante efectivo... y, al mismo tiempo, señalar a los partidarios que Putin tiene la ventaja. Es lo que los rusos llaman un ‘troleo sutil’ (trolling tonkiy)”.
El Dr. Noble, sin embargo, cree que el líder ruso pudo haber mantenido su distancia de los líderes extranjeros en estas reuniones recientes porque sabe relativamente poco sobre sus precauciones con respecto al covid-19 en comparación con las medidas que se han impuesto a los funcionarios en Rusia.
En última instancia, el académico dijo que no creía que se tratara de una cosa o de la otra, y enfatizó que “el Kremlin puede tener en cuenta el coronavirus, al mismo tiempo que usa la mesa para proyectar poder”.
Dado que las conversaciones entre Putin y Macron no lograron un gran avance en medio de los crecientes temores sobre una posible invasión rusa de Ucrania, tal vez no fue sorprendente que los usuarios de las redes sociales aprovecharan la mesa para entretenerse, y generaran innumerables bromas y memes.
El Photoshop se utilizó con gran eficacia, y los usuarios de Twitter convirtieron la mesa en una cancha de bádminton y en un subibaja.
“¿Se convirtió esto en una pelea a gritos, un poco por defecto?”, dice un tuit del sitio web de celebridades y entretenimiento TMZ.
Algunas publicaciones fueron divertidas: “Macron, ¿puedes pasarme la sal?”.
Mientras que otros fueron más mordaces y políticos: “Hay más espacio entre Macron y Putin que entre las tropas rusas y las fronteras ucranianas”, tuiteó el periodista Sébastien Gobert.