Stay up to date with notifications from The Independent

Notifications can be managed in browser preferences.

Murió Sophie Kinsella, la escritora que conquistó a millones con ‘Confesiones de una compradora compulsiva’

La autora superventas era conocida sobre todo por su serie ‘Loca por las compras’, que fue adaptada a una exitosa película protagonizada por Isla Fisher

Katie Rosseinsky
Miércoles, 10 de diciembre de 2025 10:30 EST
La autora Sophie Kinsella revela que un tumor cerebral le impidió sostener un lápiz
Read in English

La escritora Sophie Kinsella, autora de la exitosa serie de novelas Loca por las compras, falleció a los 55 años, según informó su familia.

Kinsella fue diagnosticada en 2022 con glioblastoma, un tipo agresivo de cáncer cerebral, y ella misma hizo pública la enfermedad el año pasado.

La noticia fue comunicada a través de su cuenta oficial de Instagram: “Con enorme tristeza anunciamos la partida, esta mañana, de nuestra querida Sophie (también conocida como Maddy o Mummy). Murió en paz, y sus últimos días estuvieron rodeados de todo lo que más amaba: su familia, la música, el calor del hogar, el espíritu navideño y la alegría”.

Los libros de Sophie Kinsella han vendido cerca de 45 millones de ejemplares en más de 60 países
Los libros de Sophie Kinsella han vendido cerca de 45 millones de ejemplares en más de 60 países (Getty)

“No podemos imaginar cómo será la vida sin su luz y su amor por vivir. A pesar de la enfermedad, que enfrentó con un coraje indescriptible, Sophie se sentía profundamente afortunada: por contar con una familia y amistades maravillosas, y por el éxito extraordinario de su carrera literaria. Nunca daba nada por sentado y siempre agradecía el cariño que recibía. La extrañaremos tanto que nos duele el alma”.

Sus libros han vendido cerca de 45 millones de ejemplares en más de 60 países, han sido traducidos a más de 40 idiomas y adaptados para el cine y el teatro.

Nacida como Madeleine Sophie Townley en 1969, Kinsella creció en Londres y, más adelante, estudió política, filosofía y economía en el New College de Oxford. Tras graduarse, comenzó su carrera como periodista financiera. Tiempo después, inspirada por autoras como Mary Wesley y Joanna Trollope, escribió su primera novela, The Tennis Party, en pocos meses, cuando tenía solo 24 años. Para entender cómo estructurar una historia, reveló años más tarde en una entrevista con Woman & Home que tomó una novela de Jilly Cooper y la desarmó capítulo por capítulo, con el objetivo de analizar su construcción narrativa.

Más adelante, reconoció que estaba decidida a ser tomada en serio como una “autora de verdad”, por lo que decidió enfocarse en temas más oscuros y en personajes cuyas vivencias eran muy distintas a las suyas.

Fruto de esa etapa, en 1995 publicó su primera novela bajo su nombre de casada, Madeleine Wickham. Se había casado en 1991 con Harry Wickham, un profesor al que conoció la primera noche como estudiante en Oxford.

Durante los años siguientes, publicó seis títulos más bajo ese nombre, a razón de uno por año hasta 2001. No obstante, hacia finales de sus veintes, comenzó a trabajar en una nueva novela que marcaría un giro decisivo en el rumbo de su carrera literaria.

“Pensé: bueno, sin ponerme a la defensiva, voy a escribir un libro ligero sobre cosas que conozco, y voy a hacerlo gracioso y absurdo”, contó a The Guardian. “Y si fracasa, no pasa nada”.

Ese libro fue Confesiones de una compradora compulsiva, donde narró la historia de Becky Bloomwood, una joven periodista financiera desastrosa con el dinero, más propensa a la emoción instantánea de comprar zapatos con tarjeta que a la prudencia de ahorrar con sensatez. Este giro hacia un género más ligero y humorístico también implicó un cambio de identidad literaria: combinó su segundo nombre con el apellido de soltera de su madre, y así nació Sophie Kinsella.

Kinsella inició su carrera como periodista financiera antes de conseguir un contrato editorial a comienzos de sus veintes
Kinsella inició su carrera como periodista financiera antes de conseguir un contrato editorial a comienzos de sus veintes (Getty)

Después de enviar el manuscrito a sus editores bajo esta nueva identidad, el primer libro de la saga Loca por las compras debutó en el año 2000. El éxito fue inmediato, y en los dos años siguientes publicó dos secuelas. Con el tiempo, Kinsella terminaría escribiendo un total de diez novelas de la serie, siguiendo a Becky a lo largo del matrimonio, la maternidad y sus múltiples desventuras con las compras. En 2009, Confesiones de una compradora compulsiva, la adaptación cinematográfica de los dos primeros libros, llegó a la pantalla grande, con Isla Fisher en el papel de Becky y Hugh Dancy como su interés romántico, Luke.

Kinsella también escribió una docena de novelas independientes, desde No te lo vas a creer (2003) hasta Amor y otros desastres (2023), y en 2015 incursionó en la ficción juvenil con Buscando a Audrey. Aunque su obra fue frecuentemente etiquetada como “chick lit” —un término popular para referirse a novelas ligeras protagonizadas por mujeres jóvenes—, Kinsella prefería que se la reconociera como ficción contemporánea, o incluso como “wit lit”, una expresión que alude a historias con humor e ingenio, reivindicando así la comicidad como sello distintivo de su estilo.

En 2018, Kinsella confesó al Daily Mail que el término “chick lit” le provocaba un pequeño pinchazo, no de enojo, sino de resignación. “Otra vez esto…”, pensaba cada vez que lo oía. Nunca le dijeron abiertamente que sus libros eran inferiores, pero cuando alguien comentaba que eran “lecturas de playa”, ella respondía con una sonrisa: “Sí, perfecto para mí. ¡Léalos en la playa!”

En abril del año pasado, compartió con sus lectores que le habían diagnosticado glioblastoma a finales de 2022. A través de un comunicado en redes sociales, explicó que había tardado en hacerlo público porque quería proteger a sus hijos, darles tiempo para procesar la noticia en privado y adaptarse a lo que llamó su “nueva normalidad”.

Contó a sus seguidores que estaba recibiendo tratamiento en un hospital de Londres, y aprovechó para agradecer el apoyo de su familia, sus amigos y “los maravillosos médicos y enfermeras que me han atendido”.

Le sobreviven su esposo, Henry, y sus cinco hijos.

Traducción de Leticia Zampedri

Thank you for registering

Please refresh the page or navigate to another page on the site to be automatically logged inPlease refresh your browser to be logged in