Carmelo dice: 'Sé lo que le di al basquetbol' en noche de lágrimas y recuerdos en Salón de la Fama

Carmelo Anthony aprendió lecciones difíciles al crecer jugando baloncesto en los parques de Brooklyn y Baltimore.
Posteriormente, se convirtió en uno de los anotadores más puros del deporte y uno de los basquetbolistas más condecorados de todos los tiempos.
Al subir al escenario para su inducción en el Salón de la Fama del Baloncesto Naismith Memorial el sábado, entre cánticos de "¡Melo! ¡Melo!", Anthony tomó su lugar junto a los inmortales de este deporte.
"Perdón por mi lenguaje, pero maldición", dijo Anthony, con lágrimas en los ojos. "Esta noche no sólo entro al Salón de la Fama, llevo los ecos de cada voz que alguna vez me dijo que no podía... Tuve que construir un nuevo camino. Tuve que escribir un nuevo final."
Anthony formó parte de un quinteto de jugadores que fueron exaltados al Salón el sábado como individuos, uniéndose a Dwight Howard, Sue Bird, Maya Moore y Sylvia Fowles. Juntos, los nuevos miembros formaron parte de 11 equipos campeones de la WNBA o la NBA, capturaron 15 medallas olímpicas de oro, hicieron 37 apariciones en los equipos ideales de la liga masculina o femenina y fueron nombrados al Juego de Estrellas 45 veces en sus carreras.
"Nunca obtuve un anillo de la NBA. ... Pero sé lo que le di al deporte", expresó Anthony.
Anthony y Howard fueron doblemente consagrados como miembros del equipo de baloncesto masculino olímpico de 2008 que se conoció como el "Equipo de la Redención", después de ganar el oro en los Juegos de Beijing ese verano tras capturar apenas un bronce en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004 y el campeonato mundial de la FIBA 2006.
Howard y Anthony se unieron a los miembros del equipo de 2008 Jason Kidd, Dwyane Wade, Chris Bosh y el fallecido Kobe Bryant, quienes ya habían sido consagrados como individuos.
La generación de este año se completó con el entrenador de los Bulls de Chicago y dos veces campeón de la NCAA, Billy Donovan: el socio gerente general de Heat de Miami, Micky Arison, y el veterano árbitro de la NBA, Danny Crawford.
La inclusión de Bird, Moore y Fowles marcó la primera vez que tres jugadoras de la WNBA ingresan al Salón de la Fama en el mismo año.
Bird dijo que estar en el escenario el sábado le hizo apreciar el viaje que había hecho desde Syosset, Nueva York, prediciendo en su anuario de secundaria que algún día se convertiría en jugadora profesional de fútbol o baloncesto.
"No había un lugar lógico para una niña como yo", comentó.
El sábado también fue una muestra de lo interconectado que estaba ese trío de mujeres. Bird y Moore con dos títulos de la NCAA cada una en Connecticut. Fowles también fue fundamental en los dos últimos de los cuatro campeonatos de la WNBA de Moore con las Lynx de Minnesota.
Las tres jugaron juntas y ganaron medallas de oro para Estados Unidos en la selección olímpica.
Todos los miembros del Equipo de la Redención estuvieron presentes, con la excepción de Kobe Bryant, quien falleció en 2020.
LeBron James, quien tenía 23 años en 2008, dijo que el tono para ese equipo fue establecido por el gran jugador de los Lakers.
"Solo queríamos llegar a su nivel y hacerlo sentir orgulloso", dijo James.
El entrenador Mike Krzyzewski comentó que la misión de ese equipo fue clara desde el momento en que se conformó lleno de estrellas.
"Nuestra meta era ganar la medalla de oro, pero también ganar el respeto de nuestro país nuevamente", manifestó Krzyzewski.
Moore cree que su carrera en el baloncesto, repleta de campeonatos universitarios y de la WNBA, así como de trofeos a la Jugadora Más Valiosa, fue simplemente un preludio a su llamado posterior al baloncesto: construir lo que ella llamó "comunidades campeonas".
"Ahora que estoy en el Salón, creo que me he convertido en la Tía Maya", dijo.
Moore se retiró antes de la temporada 2019 de la WNBA para centrarse en cuestiones de justicia social y ayudar a revocar la condena injusta de su ahora esposo, Jonathan Irons.
Dedicó su discurso a instar a la generación actual a usar sus plataformas para promover el cambio en sus propias comunidades.
"Descubran qué los motiva cada día que se levantan de la cama", dijo Moore. "Quiero desafiar a los que vienen, cada día a buscar la alegría y la conexión."
Howard, uno de los cuatro jugadores con tres premios al Jugador Defensivo del Año, se hizo conocido por la forma juguetona en que se expresaba en la cancha. Mostró todos esos atributos durante un discurso que honró los sacrificios de sus padres, especialmente cómo su madre soportó siete abortos espontáneos antes de un octavo intento, en que nació él.
"Mi madre perdió siete hijos y Dios me permitió traer luz a su vida", dijo. "Estoy honrado de estar frente a ustedes como uno de los mejores jugadores de baloncesto de todos los tiempos."
Howard fue inducido por Dominique Wilkins, Shaquille O’Neal, Patrick Ewing y Robert Parish. También reconoció a otros grandes centros, incluidos Bill Russell, Kareem Abdul-Jabbar y Dikembe Mutombo. El sábado marcó el 50mo aniversario de la consagración de Russell.
Su discurso incluyó bromas juguetonas sobre su "rivalidad de Superman" con Shaquille O’Neal e incluyó una imitación de Stan Van Gundy, su exentrenador en el Magic de Orlando.
Pero concluyó sus comentarios con un mensaje para sus hijos, instándolos a perseguir sus sueños.
"Solo mueres una vez, pero vives todos los días", dijo Howard.
Arison agradeció a los exjugadores del Heat presentes, incluidos James, Chris Bosh, Udonis Haslem y Alonzo Mourning por sus contribuciones a lo que se ha conocido como la "Cultura Heat" durante su gestión del equipo.
Hizo también bromas, mirando hacia James cuando recordó los equipos campeones liderados por el astro, Dwyane Wade y Bosh. Se refirió a la ahora infame predicción de James sobre el éxito del trío.
"En 2010, con Dwyane, LeBron y Chris Bosh sabíamos que podíamos ganar. No uno, no dos... Supongo que fueron sólo dos", dijo Arison.
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