Juez ordena reincorporar intérpretes de lenguaje de señas en la Casa Blanca a pesar de objeciones de Trump
El presidente de EE. UU. dejó “inexplicablemente” de proporcionar intérpretes de lengua de señas en las reuniones informativas oficiales, según la Asociación Nacional de Sordos del país
Un juez federal de EE. UU. ha ordenado al Gobierno de Trump que vuelva a incluir intérpretes de ASL (lengua de señas estadounidense) en las sesiones informativas de la Casa Blanca después de que el equipo del presidente admitiera que no le gustaba “compartir tribuna”.
La NAD (Asociación Nacional de Sordos de EE. UU.) demandó en mayo al presidente Donald Trump, a la jefa de gabinete de la Casa Blanca, Susie Wiles, y a la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, alegando que el hecho de que la Administración no proporcione intérpretes de ASL en las ruedas de prensa viola la Ley de Rehabilitación de 1973. La ley federal prohíbe la discriminación llevada a cabo por una “agencia ejecutiva”.
Desde enero de 2021, cuando Joe Biden asumió la presidencia, la Casa Blanca ha proporcionado intérpretes de ASL en todas las conferencias, haciéndolos visibles en los canales oficiales.
Pero después de que Trump volviera al cargo este año, la Casa Blanca “inexplicablemente” dejó de usar intérpretes de ASL, según escribió el equipo legal de la organización sin fines de lucro en el documento de la queja.
El martes, el juez de distrito Amir H. Ali concedió una medida cautelar, en la cual se ordena que la Casa Blanca comience “inmediatamente” a proporcionar una “transmisión simultánea y accesible al público” con intérpretes de ASL en las sesiones informativas de Trump y Leavitt.

The Independent se ha puesto en contacto con la Casa Blanca y la Asociación Nacional de Sordos para recabar sus comentarios.
Los abogados de Trump habían argumentado previamente que era demasiado pedir que el presidente compartiera escenario con intérpretes.
“Exigir al presidente que comparta su plataforma con intérpretes de ASL cada vez que él o su secretaria de Prensa se comunican con la nación es una gran invasión de sus prerrogativas centrales”, escribieron sus abogados en una presentación judicial de junio.
El presidente tiene autoridad para “configurar la imagen y los mensajes de su Administración como considere oportuno”, añadieron.
El juez calificó el argumento de Trump de “desconcertante”, diciendo que su equipo legal no dejó claro lo que querían decir con “gran invasión” y en su lugar proporcionó “solo lenguaje codificado sobre querer presentar su 'mensaje e imagen de una manera particular'”.

El juez Ali también cuestionó las objeciones de Trump. La interpretación ASL no requiere que un orador “comparta su plataforma” con nadie, dijo el juez, y añadió que el Gobierno “[podía] implementar fácilmente la interpretación ASL a distancia sin un intérprete presente en la misma sala que el orador”.
Ali señaló que la Administración estaba “violando, probablemente” la Ley de Rehabilitación de 1973 al no proporcionar intérpretes de ASL.
“Dada la naturaleza de la programación en cuestión —sesiones informativas programadas periódicamente sobre temas críticos relacionados con los mercados, la medicina, los ejércitos y miles de otras cuestiones—, el tribunal considera que negar a los estadounidenses sordos el acceso a ella y su disfrute supone un perjuicio claro, presente e inminente”, escribió Ali en la orden del martes.
La Administración debe presentar un informe de actualización el 7 de noviembre para demostrar el cumplimiento de la orden.

La Asociación Nacional de Sordos demandó al primer Gobierno de Trump en agosto de 2020 cuando Trump no proporcionó intérpretes de ASL al dar actualizaciones sobre el covid-19. El juez de ese caso también ordenó una medida cautelar que obligaba a la Casa Blanca a proporcionar intérpretes en todas las sesiones informativas sobre la pandemia.
Cuando Biden asumió el cargo, ambas partes acordaron llegar a un convenio. La Administración Biden publicó entonces una nueva política —“Servicios de comunicación para personas sordas o con dificultades auditivas en las sesiones informativas presidenciales”— que establecía que se proporcionarían intérpretes cualificados en las comunicaciones oficiales del presidente, el vicepresidente y otros funcionarios clave del Gobierno.
“Los estadounidenses sordos o con dificultades auditivas tienen derecho a acceder a la información de la Casa Blanca como cualquier otra persona. Negarles intérpretes de ASL es una violación directa de ese derecho, y la NAD seguirá luchando por su plena inclusión en el proceso democrático”, declaró en un comunicado Bobbie Beth Scoggins, directora ejecutiva Interina de la NAD. Agregó “Dicha información debe facilitarse no solo mediante subtítulos, sino también en lengua de señas estadounidense”.
En este sentido, en su primer día de regreso a la Casa Blanca este año, Trump ordenó poner fin a los programas de diversidad, equidad, inclusión y accesibilidad, calificándolos de “radicales y despilfarradores”.
Traducción de Sara Pignatiello






