¿Qué son las Zonas Azules y cómo afectan a la salud?
Se cree que se encuentra la clave para tener una vida longeva en estas cinco regiones del mundo
El secreto para tener una vida longeva no se encuentra en un elixir o fuente de la juventud. Más bien se dice que se encuentra en las Zonas Azules.
Las Zonas Azules son las cinco regiones del mundo en las que se sabe que la gente tiene una vida larga y saludable. Estas zonas son Okinawa (Japón), Cerdeña (Italia), Nicoya (Costa Rica), Ikaria (Grecia) y Loma Linda (California). Aquí, los alimentos que la gente ingiere no son solo parte de una dieta: constituyen una verdadera forma de vida.
El término Zona Azul fue popularizado por Dan Buettner, un periodista de National Geographic que viajó por el mundo estudiando las culturas de estas prósperas comunidades. En una clase magistral impartida en 2020 por la Cumbre Mundial del Bienestar, Buettner compartió los fundamentos de vivir en una Zona Azul: “La gran epifanía de todas estas Zonas Azules es que la salud duradera rara vez se persigue con éxito; se produce”.
Ahora bien, no todo el mundo puede hacer las maletas y marcharse a Italia, pero hay muchas formas de adaptar la rutina diaria al estilo de vida de la Zona Azul. Esto es lo que podemos aprender de estas regiones:
Fibra, fibra, fibra
Los alimentos ricos en fibra ocupan un lugar destacado en las dietas de quienes viven en la Zona Azul. Los frijoles y los cereales integrales, como el arroz integral y la quinoa, son ingredientes ricos en fibra que pueden alargar la vida. Las frutas, las verduras y las legumbres también son fuentes naturales de fibra.
La fibra desempeña un papel fundamental en la promoción de la salud intestinal, el control del peso y la reducción de los niveles de colesterol. Las investigaciones demuestran que los niños y los adultos necesitan al menos entre 20 y 30 gramos de fibra al día, pero la mayoría de los estadounidenses solo consumen unos 15 gramos al día.
Tanto si se trata de garbanzos en el hummus griego como de frijoles negros en la sopa costarricense, aumentar la ingesta de fibra es clave para vivir más tiempo.
Muévete con naturalidad
No es necesario hacer ejercicio en el gimnasio cinco veces por semana para aumentar la longevidad. De hecho, los residentes de las zonas azules apenas hacen ejercicio, ya que la mayoría de las veces lo hacen a través de actividades que realizan a lo largo del día, como caminar o trabajar en el jardín. Incorporar 20 minutos de movimiento en tu rutina diaria es solo una forma de vivir el estilo de vida de la Zona Azul.
Mantener una perspectiva positiva
De media, los estadounidenses pasan entre cinco y seis horas al día con sus teléfonos, desde que se levantan hasta que se acuestan. En su lugar, empieza tu rutina diaria con una meditación positiva, o separa la jornada laboral con mini descansos para el estrés. En las Zonas Azules, los residentes se deshacen del estrés participando en rituales diarios sagrados, como recordar a sus antepasados en Okinawa o hacer siestas en Costa Rica. O hacer como los sardos: la hora feliz.
Conectar con otros
Crear un círculo social es uno de los principales pilares de la vida en la Zona Azul. En la era de las llamadas de Zoom y del trabajo desde casa, conectar con los que nos rodean ha resultado un poco más difícil que en años anteriores. Aunque solo sea un grupo pequeño, relacionarte con otras personas que te mantienen activo, que llevan una dieta similar rica en fibra y que se preocupan por ti en un mal día puede ayudarte a vivir hasta los 100 años.