Emprenden intensa búsqueda de sobrevivientes tras colapso del puente en Baltimore
Los servicios de emergencia hablan de un “incidente en curso con múltiples víctimas”, y se cree que hay más de siete personas perdidas en el agua
En Baltimore se está llevando a cabo una búsqueda frenética de sobrevivientes después de que un enorme buque carguero se estrellara contra el puente Francis Scott Key, lo que provocó que se desplomara sobre el agua en cuestión de segundos.
Varios trabajadores y vehículos transitaban por el lugar cuando el buque Dali se estrelló contra uno de sus pilares cerca de la 1:30 a. m., hora del este.
De acuerdo con un informe público de la Agencia de Ciberseguridad y Seguridad de Infraestructura, citado por ABC News, parece ser que el barco “perdió propulsión” al salir del puerto, por lo que la tripulación alertó a las autoridades de Maryland sobre la situación.
El personal advirtió al Departamento de Transporte de Maryland que “podría producirse una colisión con el puente”, según el informe. “El barco chocó contra la infraestructura, lo que provocó un colapso total”, se especificaba después.
Imágenes estremecedoras mostraron cómo el puente se desplomó sobre las aguas heladas.
En una conferencia de prensa a las 6:15 a. m. hora del este, la policía de Baltimore informó que, cinco horas después del incidente, solo dos personas habían sido rescatadas del río.
Una de esas víctimas se encuentra en grave estado y fue trasladada de urgencia a una unidad de traumatología.
La segunda persona no resultó herida y se negó a recibir asistencia médica, según los agentes.
En estos momentos, varios organismos se encuentran en una carrera contrarreloj para rescatar al menos a siete individuos que se cree que están en el agua, con temperaturas que rondaban los -1 °C cuando sucedió el derrumbe.
Por añadidura, el número de personas desaparecidas podría incrementarse, puesto que el sonar ha detectado varios vehículos sumergidos en el río, y, además, las autoridades aseguraron que había trabajadores en el puente al momento del incidente.
En la rueda de prensa, James Wallace, jefe del departamento de bomberos de la ciudad de Baltimore, declaró que se trataba de un “incidente de gran magnitud con una extensa área de búsqueda”.
Además de las bajas temperaturas, los equipos de rescate también se enfrentan a la oscuridad y a un gran cúmulo de escombros en su intento de localizar a las víctimas que habrían permanecido en el agua durante un largo periodo de tiempo.
Asimismo, el gobernador de Maryland, Wes Moore, declaró el estado de emergencia y anunció la colaboración con un equipo interinstitucional para coordinar un despliegue de recursos federales.
Por su parte, el director de comunicaciones del departamento de bomberos, Kevin Cartwright, sostuvo que estaban lidiando con un “incidente en curso con múltiples víctimas”.
En tanto, en el sitio web de seguimiento de vuelos FlightRadar24, se podía ver a la policía estatal de Maryland rodeando la zona del accidente en helicóptero.
Cartwright también explicó que, en estos momentos, se está llevando a cabo una operación de rescate conjunta entre varias instituciones, con miembros de equipos de buceo que trabajan en el río para intentar encontrar a las personas que se presume aún están bajo el agua.
De igual manera, la Guardia Costera estadounidense puso a disposición embarcaciones pequeñas y helicópteros para colaborar con las labores de búsqueda.
No obstante, las temperaturas bajo cero están “complicando” el panorama.
“La sensación térmica es de al menos -1° C donde estoy yo. Podría ser menos. Y estoy seguro de que la temperatura del agua es aún más fría, lo puede poner en riesgo a los buzos”, señaló Cartwright a la CNN.
Según informaron, el carguero que protagonizó el incidente es un buque denominado Dali, que está registrado en Singapur. La embarcación acababa de salir del puerto de Baltimore y se dirigía hacia la capital de Sri Lanka, Colombo, donde se suponía que debía llegar a finales de abril.
De acuerdo a lo comunicado por la empresa, todos los miembros de la tripulación, incluidos dos capitanes, están ilesos.
Las autoridades declararon que no hay indicios de que el incidente haya sido parte de un acto terrorista.
“No hay ninguna sospecha de que sea un acto terrorista o de que se haya actuado a propósito”, aseguró el jefe Richard Worley.
Desde la Casa Blanca, anunciaron que están “controlando” la situación.
En la misma línea, el secretario de transporte de los Estados Unidos, Pete Buttigieg, declaró en X que dialogó con el alcalde Scott y el gobernador Moore para ofrecerles su apoyo.
Por último, concluyó que las labores de rescate siguen en curso.