Aristócrata Constance Marten y su novio exconvicto por violación reciben 28 años por la muerte de su hija
Los padres fueron declarados culpables de homicidio por negligencia grave de Victoria, que pereció en una tienda de campaña después de que se dieran imprudentemente a la fuga en invierno
La aristócrata Constance Marten fue sentenciada a 14 años de prisión por matar a su hija pequeña a estar fugitiva.
Su pareja, Mark Gordon, un violador convicto que pasó 22 años en una prisión de Florida, también deberá cumplir 14 años después de que los padres fueran declarados culpables de homicidio por negligencia grave de la niña, llamada Victoria. Gordon recibió otros cuatro años de licencia prorrogada.
La recién nacida pereció en una endeble tienda de campaña en el sur de Inglaterra, en medio de un frío glacial, mientras sus padres se escondían fuera del sistema para evitar que fuera retirada de su custodia como sus otros cuatro hijos.
Marten, de 38 años, llevaba el cabello largo y oscuro recogido en trenzas e iba elegantemente vestida con un pañuelo verde azulado y un bolso de mano mientras se sentaba en el banquillo de los acusados junto a Gordon, de 51 años, vestido de traje. La pareja, que se sentó a solo tres metros de distancia para escuchar la sentencia, fue reprendida repetidamente por intentar pasarse notas mientras estaban sentados flanqueados por agentes del banquillo de los acusados.

En la sentencia dictada por el juez Mark Lucraft, afirmó que ni Marten ni Gordon “se preocuparon mucho o nada por el bienestar” de su bebé, y añadió que su atención se centró por completo en ellos mismos.
En su opinión, la pareja no mostró “ninguna expresión genuina de remordimiento” por la muerte de su hijo y “trató de culpar a todos los demás” de lo ocurrido. Marten negó con la cabeza mientras el juez relataba estas conclusiones.
Añadió que, a pesar de las afirmaciones de Marten y Gordon de que vistieron a la pequeña Victoria con una chaqueta de esquí y la mantuvieron en un cabestrillo, las grabaciones de las cámaras de seguridad muestran que no fue así y que, de hecho, iba vestida con un mameluco delgado inadecuado para las frías condiciones. El juez aceptó el argumento de la fiscalía de que la bebé Victoria murió de hipotermia tras haber estado expuesta a un “importante estrés por frío”.
La pareja también fue declarada culpable de obstrucción de de justicia después de que escondieran sus restos en descomposición bajo un montón de tierra y basura en una bolsa reutilizable de supermercado, la cual abandonaron en un cobertizo de huertos en desuso.
Marten y Gordon fueron declarados culpables de crueldad infantil, obstrucción de justicia y ocultar el nacimiento de un niño tras un juicio de cuatro meses celebrado el verano pasado.
En julio fueron condenados de nuevo por el asesinato de Victoria, después de que el jurado tardara solo 14 horas y 32 minutos en emitir un veredicto unánime de culpabilidad.
Marten, que gritó “es una estafa” desde el banquillo de los acusados cuando se dictó el veredicto de homicidio involuntario, ya presentó un recurso de apelación contra su condena.

La madre de Marten, Virginie de Selliers, que asistió a la sentencia, hizo una declaración a través del abogado de su hija, Tom Godfrey, en la que afirmaba estar “horrorizada” por la forma en que se había calificado a su hija en el tribunal y en los medios de comunicación, y que no reflejaba el recuerdo que tiene de su hija.
Exprsó: “Lo que sí sé es que demostró una gran determinación al luchar por sus hijos y por su hija, Victoria.
“Espero sinceramente que, al considerar su futuro, no se pasen por alto su valentía y lealtad y su profundo sentido de la equidad”.
Marten había cortado los lazos con su acaudalada familia tras enamorarse de Gordon, que nació en Birmingham y fue deportado a Gran Bretaña tras cumplir 22 años en un centro penitenciario de Florida por una brutal violación a punta de navaja cometida cuando solo tenía 14 años.
En los dos juicios se describió cómo la pareja ocultó cuidadosamente el embarazo de Marten —de Victoria, su quinta hija— antes de darse a la fuga para evitar que las autoridades les quitaran la custodia.
Un tribunal de familia les había retirado a sus cuatro primeros hijos, una decisión que, según los padres, fue un error judicial provocado por un sistema de servicios sociales “corrupto”.
Dio a luz en secreto en una casa de vacaciones antes de recorrer frenéticamente el país con Victoria escondida en el abrigo de Marten (al principio por carretera y más tarde en taxis pagados con dinero de su fondo fiduciario) después de que su coche se incendiara en una carretera.

Decidieron estar “desconectados del sistema” en las colinas South Downs, al sur de Inglaterra, con poco más que unos sacos de dormir y una tienda de campaña barata, en medio de una persecución nacional después de que la policía encontrara restos de placenta en su coche calcinado.
Pero Victoria murió después de que Marten se quedara dormido con ella dentro de su chaqueta mientras se refugiaban en la tienda de campaña en enero de 2023.
Marten, experiodista y aspirante a actriz, fue finalmente arrestada junto con Gordon en Brighton el 27 de febrero de 2023, tras 53 días prófugos.
Según la fiscalía, la conducta “imprudente, totalmente egoísta e insensible” de los padres provocó la muerte “totalmente evitable” de la niña, a la que privaron de calor, cobijo y alimentos durante su corta vida.
También afirmaron que los padres ocultaron a la niña, tanto cuando estaba viva como después de muerta, en una bolsa de supermercado para mantenerla escondida mientras huían, algo que Marten negó.

Unas imágenes estremecedoras mostraron al tribunal el momento en que los agentes sacaron de la bolsa una lata de cerveza, trozos de periódico, pañales, una lata de Coca-Cola y un viejo paquete de sándwiches de huevo y mayonesa, antes de meter la mano y encontrar los restos de la bebé bajo una capa de tierra y hojas.
Sin embargo, los padres, que negaron el homicidio involuntario, insistieron en que su muerte fue un trágico accidente y que no se les debía culpar a ellos.
En un testimonio entre lágrimas, la madre dijo al jurado que “solo amaba” a su bebé, que merecía estar con sus padres: “Le di lo mejor que cualquier madre le daría”.
Después de su muerte, manifestó que sentía “incredulidad, conmoción” y un “intenso dolor”, y reveló que la pareja había llegado a pensar en el suicidio al sentir pánico sobre qué hacer después.
“La quería tanto que no pensaba en mí”, sostuvo. “Di a luz, pero ni siquiera tuve tiempo de descansar. Me metí directamente en un coche y estuve recorriendo el país en diferentes hoteles. No me permití descansar, me descuidé y por eso me dormí en esa tienda”.
Traducción de Michelle Padilla