Trump publica diatriba sobre la acusación de violación de E. Jean Carroll: “¿No gritó? ESTAFA”
El juez reprobó los comentarios del expresidente como “totalmente inapropiados”
Donald Trump trató furiosamente de arrojar dudas sobre las acusaciones de violación de E. Jean Carroll en su contra al abordar el asunto por primera vez en público desde que comenzó el juicio civil por difamación.
El expresidente acudió a Truth Social el miércoles por la mañana antes del primer día de testimonios en el caso explosivo en el que se enfrenta a Carroll, quien acusó a Trump de violarla en el vestidor de una tienda departamental Bergdorf Goodman en la década de 1990.
En un par de publicaciones, calificó el caso de “una cacería de brujas” y despotricó una serie de suposiciones para intentar avergonzar a la víctima por haber hecho las acusaciones.
“El caso de E. Jean Carroll, señora Goodman, es una estafa inventada”, escribió Trump. “Su abogado es un agente político, financiado por un gran donante político que dijeron que no existía, pero al final fue probado que mentían al respecto”.
“Fijense la entrevista de ella en CNN antes y después de la pausa comercial: parece una persona diferente. Ella dijo que había un vestido, usando las viejas “mañas” de Monica Lewinsky, que luego no quiso entregar. Se debe permitir que el vestido sea parte del caso. Es una historia fraudulenta y falsa; ¡una caza de brujas!”.
En la segunda publicación, Trump volvió a afirmar que a Carroll y sus abogados “les descubrieron la mentira. El caso de la señora Goodman está financiado por un gran donante político que intentaron ocultar”.
“¿Alguien cree que yo llevaría a una señora de entonces casi 60 años que no conocía, desde la puerta principal de una tienda departamental muy concurrida, (siendo yo muy conocido, ¡por ponerlo de forma sutil!), en un vestidor diminuto, y… ella”, escribió. “¿No gritó? ¿No hay testigos? ¿Nadie lo vio? ¿Nunca hizo una denuncia policial? Si me hubieran visto allí con una mujer, LA PRENSA HUBIERA ENLOQUECIDO. ¡ESTAFA!”.
Las publicaciones de Trump en Truth Social rápido llegaron hasta los procedimientos judiciales.
Según Adam Klasfeld de Law & Crime, el abogado de Carroll argumentó que las publicaciones de Trump violaron dos órdenes judiciales, las que ordenaban a los participantes no hablar sobre los abogados ni el tema de la muestra de ADN.
La primera publicación de Trump sugiere de forma engañosa que los abogados de Carroll no querían presentar como prueba el vestido que llevaba puesto el día de la supuesta violación.
En realidad, el equipo legal de Carroll intentó durante tres años obtener la muestra de ADN de Trump para compararla con las manchas en el vestido.
Después de negarse a proporcionar una muestra, los abogados de Trump hicieron una oferta a principios de este año, pero solo después de que había pasado la fecha límite para litigar las preocupaciones sobre la evidencia. El juez Lewis Kaplan rechazó la oferta porque reabrir el tema del ADN retrasaría el juicio.
El juez Kaplan abordó ese tema al analizar las publicaciones de Truth Social el miércoles y le preguntó al abogado de Trump, Joe Tacopina: “Durante tres años [Trump] se negó a dar una muestra de ADN, y ¿ahora quiere incluirla en el caso?”.
Luego, el juez reprobó los comentarios de Truth Social de Trump como “totalmente inapropiados”.
Tacopina respondió que trataría de “abordar el tema” con su cliente y que le pediría a Trump que “se abstenga de hacer más publicaciones sobre este caso”.
El juez respondió: “Bueno, espero que tenga más éxito” y agregó que Trump “puede o no estar manipulando una nueva causa de responsabilidad potencial. Y creo que sabe a lo que me refiero”.
El juicio civil se deriva de la afirmación de Carroll de que Trump la violó en un vestidor hace casi 30 años.
Identificó el incidente a finales de 1995 o principios de 1996, cuando el futuro presidente estaba casado con Marla Maples.
Carroll, entonces escritora de una revista y presentadora de televisión, se topó con Trump en la lujosa tienda departamental de Nueva York, Bergdorf Goodman.
Como escribió Carroll en sus memorias de 2019 What Do We Need Men For?, él la reconoció como “esa señora de los consejos”. Ella lo conocía como “ese magnate inmobiliario”.
Supuestamente, Trump le dijo que estaba allí para comprar un regalo para “una muchacha” y le pidió ayuda para elegir un artículo apropiado.
Ambos se dirigieron a la sección de lencería, donde Trump le sugirió que se probara un conjunto de encaje.
Ella afirma que respondió en broma que él debía probárselo.
Cuando llegaron a los vestidores, Carroll alega que Trump la empujó contra una pared, le metió las manos debajo del vestido y le bajó las medias.
Luego se desabrochó los pantalones y, “forzando sus dedos alrededor de mi área privada, me metió su pene hasta la mitad, o completamente, no estoy segura”, escribió.
Siguió un “forcejeo colosal”, dijo, y Carroll finalmente lo empujó y salió corriendo del vestidor. El episodio terminó en menos de tres minutos, escribió.
Después de que las acusaciones se hicieran por primera vez en un extracto de un libro en la revista New York Magazine en junio de 2019, Trump lo negó airadamente.
“Nunca he conocido a esta persona en mi vida. Ella está tratando de vender un nuevo libro, eso debería indicar su motivación. Debería venderse en la sección de ficción”, dijo en una declaración oficial de la Casa Blanca ese mes.
Luego, días después, en una entrevista en la Oficina Oval con The Hill, Trump cruzó más líneas.
“Lo diré con mucho respeto: número uno, ella no es mi tipo. Número dos, nunca sucedió. Nunca sucedió, ¿de acuerdo?”.
Carroll entonces presentó una demanda por difamación contra Trump, al alegar que había dañado su reputación, la había perjudicado sustancialmente de manera profesional y le había causado dolor emocional.
Meses después, el Departamento de Justicia intervino y transfirió el caso a un tribunal federal, al argumentar que Trump tenía impunidad para enfrentar cualquier juicio debido a su condición de presidente de la nación en el momento de la difamación inicial.
Pero el tribunal federal no estuvo de acuerdo con la posición del Departamento de Justicia y permitió que continuaran los procesos de apertura del caso.
Y cuando el expresidente no logró que se desestimara el caso en octubre pasado, recurrió a Truth Social para negar nuevamente las acusaciones en su contra y, al mismo tiempo, sin saberlo, facilitó la presentación de una demanda por difamación de parte de Carroll.
En 2022, Nueva York aprobó la Ley de Sobrevivientes Adultos que permitió a los sobrevivientes adultos de agresiones sexuales un año para demandar a sus presuntos abusadores.
Carroll presentó una segunda demanda contra Trump por violación y por supuestas declaraciones difamatorias adicionales que él hizo en octubre de 2022, en las que la calificó a Carroll de “estafadora total”. Es este segundo caso por el que se iniciaron procesos judiciales el pasado 25 de abril.
Traducción de Michelle Padilla