Inicia juicio en demanda contra Donald Trump por violación
Una acusación de violación en contra de Donald Trump de hace casi 30 años va a juicio mientras los miembros del jurado en el caso civil escuchaban las afirmaciones de una excolumnista de cómo fue atacada en el vestidor de una tienda departamental de lujo
Una acusación de violación en contra de Donald Trump de hace casi 30 años fue a juicio el martes, y los miembros del jurado en el caso civil escucharon las afirmaciones de una excolumnista de cómo fue atacada en el vestidor de una tienda departamental de lujo. El expresidente asegura que no pasó nada entre ellos.
E. Jean Carroll testificará sobre cómo lo que sucedió en cuestión de minutos dentro de un vestidor en 1996 “cambiaría su vida para siempre”, dijo uno de sus abogados, Shawn Crowley, en sus argumentos de apertura.
“Llena de miedo y vergüenza, permaneció en silencio durante décadas. Sin embargo, eventualmente, fue imposible mantener el silencio”, afirmó Crowley. Y cuando Carroll rompió ese silencio en una autobiografía publicada en 2019, el entonces presidente “utilizó la plataforma más poderosa del mundo para mentir sobre lo que había hecho, atacar la integridad de la señorita Carroll e insultar su apariencia”.
Trump, quien no estuvo en la corte pero que no ha descartado testificar en el caso, se ha referido a Carroll como una “loca” que fabricó las acusaciones de violación para vender su libro. El abogado defensor Joe Tacopina dijo el martes a los miembros del jurado que su historia era sumamente inverosímil y carente de evidencia.
Tacopina la acusó de presentar la acusación por motivos monetarios, políticos y de estatus, y exhortó a los miembros del jurado, en un estado de inmensa mayoría demócrata como lo es Nueva York, a dejar de lado cualquier animosidad que pudieran tener por el expresidente republicano.
“Pueden odiar a Donald Trump. Está bien. Pero hay un momento y un lugar secreto para eso. Se llama urna de votación. Pero no aquí en una corte”, dijo Tacopina a los seis hombres y tres mujeres que integran el jurado. “Nadie está por encima de la ley, pero nadie está por debajo de ella”.
El juicio pondrá a prueba la habilidad probada de Trump para esquivar los problemas legales graves y sacará a relucir las historias sobre el tipo de comportamiento sexual indebido que sacudieron su campaña presidencial de 2016 en momentos en que busca volver a la Casa Blanca. Trump refuta todas las acusaciones, asegurando que se trata de falsedades con el fin de perjudicarlo.
El juicio se lleva a cabo un mes después de que se declaró inocente en un caso penal no relacionado, el cual gira en torno a los pagos que hizo para silenciar señalamientos de que sostuvo relaciones sexuales extramatrimoniales.
La demanda de Carroll es un caso civil, lo que significa que, sea cual sea el resultado, Trump no corre peligro de ir a la cárcel. Carroll reclama una indemnización por daños y perjuicios y una retractación de las declaraciones de Trump que, según ella, fueron difamatorias.
Entre sus comentarios está el de: “No es mi tipo”, lo que, según sus abogados, equivale a calificarla de poco atractiva para agredirla.
The Associated Press no suele identificar pos su nombre a las personas que aseguran haber sido víctimas de violencia sexual, a menos que lo hagan públicamente, como en el caso de Carroll.