Estrella muerta distante muestra “signos de vida” y emite una serie de llamaradas energéticas
‘Nadie lo supo explicar’
Según un grupo de científicos, una estrella lejana muerta ha dado “señales de vida”, al emitir una serie de llamaradas energéticas.
Nunca se había observado nada parecido, y los investigadores aún desconocen los mecanismos que permitieron a un cadáver estelar emitir breves y brillantes destellos de luz.
Según los investigadores, los destellos continuaron durante varios meses. Cada uno duraba apenas unos minutos, pero eran tan brillantes como la explosión original de la estrella, incluso 100 días después. Si bien al comienzo, los científicos buscaban un tipo particular de explosión estelar, conocida como el transitorio óptico azul rápido luminoso, o el LFBOT por sus siglas en inglés, terminaron encontrando algo distinto.
Ahora los científicos creen que es precisamente la actividad de la estrella después de la muerte que explica esas misteriosas e intensas explosiones. Los investigadores creen las mismas surgen del cadáver de la propia estrella, ya que al morir, se forma un agujero negro o estrella de neutrones.
“No creemos que exista otro fenómeno que pueda producir este tipo de llamaradas”, afirma Anna YQ Ho, profesora adjunta de Astronomía en la Facultad de Artes y Ciencias. “El hallazgo zanja años de debate sobre qué provoca este tipo de explosión, y revela un método insólito y directo de estudiar la actividad de los cadáveres estelares".
La profesora Ho fue la autora del software que detectó el fenómeno en septiembre de 2022, a partir de los datos obtenidos en una instalación de California. En diciembre, algunos científicos, entre los que se encontraba la profesora Ho, estudiaron la estrella y observaron que parecía haber entrado en estado de erupción, con un pico de brillo intenso que se desvaneció rápidamente.
“Nadie lo supo explicar”, afirma Ho. “Nunca habíamos visto algo así antes al observar las supernovas o los LFBOT. Es decir, a pesar de observarse meses después de la explosión original, los destellos seguían igual de veloces y brillantes. En el campo de la astronomía, simplemente nunca se había visto algo así, y punto”.
Los investigadores intentaron entonces comprender mejor la estrella muerta, al reunir a sus colegas en un esfuerzo que acabaría juntando a más de 70 coautores y 15 telescopios. Revisaron los datos para asegurarse de que las observaciones del brillo eran correctas. Al final, descubrieron que la luz procedía de la estrella, y que había pulsado al menos 14 veces en 120 días, y probablemente mucho más que eso.
“Lo que nos sorprendió fue que en lugar de desvanecerse, como cabría esperar, la fuente volvió a brillar brevemente, una y otra vez”, explica Ho. “Los LFBOT ya se han convertido en una especie de fenómeno extraño y algo exótico, así que esto fue aún más raro”.
En efecto, el astro permite a los científicos observar una estrella mientras se transforma en cadáver estelar, por lo cual podría constituir una forma de observar ese proceso que normalmente solo se ve en momentos concretos.
“El tema es que el cadáver estelar no está ahí parado; está activo y hace cosas que podemos detectar”, explicó Ho.
“Creemos que estas llamaradas podrían proceder de uno de estos cadáveres estelares recién formados, lo cual nos podría permitirestudiar sus propiedades cuando acaban de formarse”.
Los científicos aún están intentando averiguar los procesos que harían que la estrella muerta se comportara de ese modo. A raíz del estudio, esperan no solo comprender los misteriosos destellos, sino también hacerse una mejor idea de cómo mueren las estrellas y qué puede ocurrirles después.
La investigación se describe en un nuevo artículo, ‘Minutes-duration Optical Flares with Supernova Luminosities’ (’Llamaradas ópticas intermitentes en el contexto de las luminosidades de supernovas’), publicado en Nature.
Traducción de Anna McDonnell