Luis Rubiales envía a la FIFA nuevo vídeo de Jenni Hermoso riéndose del infame beso en el autobús del equipo

Luis Rubiales ha enviado un nuevo vídeo a la FIFA en el que aparece Jenni Hermoso riéndose del infame beso.

Rubiales, el presidente de la Federación Española de Fútbol, fue suspendido de toda actividad relacionada con el Fútbol durante 90 días mientras la FIFA investiga el incidente, en el que agarró a la delantera española Hermoso y la besó en los labios durante la presentación de la final del Mundial en Sídney.

También se le vio manoseando a otras jugadoras y besándoles en la mejilla tras la victoria por 1-0 sobre Inglaterra, y en las imágenes también se le veía agarrándose la entrepierna en una celebración agresiva.

Varias personas del mundo del deporte y la política, incluido el Presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, han condenado a Rubiales, pero éste ha negado haber actuado mal, al insistir en que el beso fue consentido y al negarse a dimitir en una dramática rueda de prensa.

Mientras tanto, su madre se ha declarado en huelga de hambre para protestar contra la “caza de brujas” y está ingresada en un hospital.

En una primera instancia, la Federación Española de Fútbol trató de esgrimir fotos fijas que indicaban que Hermoso había levantado a Rubiales del suelo en señal de celebración, iniciando así el beso. Ahora han aparecido imágenes de la jugadora riéndose con sus compañeras en el autobús del equipo tras la final, mientras muestra un meme en su teléfono en el que se burla del incidente.

El meme comparaba el incidente de Rubiales con una foto del ex portero de la selección española masculina Iker Casillas besando a la reportera y entonces novia Sara Carbonero.

En el vídeo, se ve a Hermoso sonriendo al mostrar la imagen mientras algunas de sus compañeras corean “beso” y “presi”, en referencia al presidente de la Federación, Rubiales.

Un miembro del equipo de Rubiales declaró al DailyMail que creían que el vídeo era “valía oro” para su defensa tanto contra la investigación de la FIFA sobre su conducta como contra cualquier posible acusación penal de agresión sexual que las autoridades policiales españolas están estudiando.

Sin embargo, Hermoso ha insistido en que el beso no fue consentido y que tanto ella como sus amigos y familiares fueron “presionados” para hablar en apoyo de Rubiales. Ha criticado la “cultura manipuladora, hostil y controladora” de la selección española.

“Tengo que manifestar que he estado bajo una continua presión para salir al paso con alguna declaración que pudieran justificar el acto del Sr. Luis Rubiales”, anunció Hermoso en un comunicado en Twitter. “No sólo eso, sino que de diferentes maneras y a través de diferentes personas, la RFEF ha presionado a mi entorno (familia, amigos, compañeras, etc.) para que diera un testimonio que poco o nada tenía que ver con mis sensaciones”.

“No me corresponde a mí evaluar las prácticas de comunicación e integridad, pero estoy segura de que como selección campeona del mundo no nos merecemos una cultura tan manipuladora, hostil y controladora. Este tipo de incidentes se unen a una larga lista de situaciones como jugadoras hemos venido denunciando en los últimos años, por lo que este hecho, en el que me he visto involucrada, no es más que la gota que colmó el vaso y que todo el mundo ha podido comprobar.

Pero actitudes como esta forman parte del día a día de nuestro equipo desde hace años. Por todo ello, quiero reforzar la postura que adopté desde el principio, considerando que no tengo por qué apoyar a quien ha cometido esta acción en contra de mi voluntad, sin respetarme, en un momento histórico para mí y para el deporte femenino”.

Mientras tanto, la UEFA, de la que Rubiales es vicepresidente, ha roto finalmente su silencio sobre el incidente. El Presidente de la UEFA, Aleksander Ceferin, calificó de “inapropiado” el comportamiento de Rubiales, pero pidió que se dejara que la investigación de la FIFA siguiera su curso.