Localizan a agresora del caso ‘Slender Man’ tras intento de fuga con su pareja de 42 años
Morgan Geyser desapareció de Sun Prairie, Wisconsin, junto a un conocido adulto alrededor de las 8 p. m. del sábado
Uno de los dos involucrados en la agresión de 2014 vinculada al caso Slender Man fue localizada y puesta bajo custodia después de desaparecer el fin de semana, según confirmó la policía a The Independent.
Morgan Geyser, quien obtuvo una liberación condicional a inicios de este año, se quitó el brazalete de monitoreo y huyó de un hogar grupal en Sun Prairie, un suburbio de Madison, Wisconsin, informó la policía. Testigos la vieron con un conocido adulto alrededor de las 8 p. m. del sábado.
Más tarde apareció con otra persona en una parada de camiones en Posen, Illinois, un suburbio al sur de Chicago, a más de 274 kilómetros del hogar, según la policía. El Departamento de Policía de Madison informó que recibió aviso a las 10:34 p. m. del domingo de que las autoridades de Illinois habían detenido a Geyser.
Según ABC Chicago, el hombre, de 42 años, estaría en una relación con Geyser, y ambos habrían viajado en autobús a Posen. Sin embargo, él quedó en libertad después de su detención.

Geyser, ahora de 23 años, fue ubicada en el hogar grupal para continuar un tratamiento por un trastorno del espectro psicótico. Junto con su coacusada Anissa Weier, enfrentó cargos por intento de homicidio en el ataque con arma blanca de 2014 contra su amiga Payton Leutner.
En 2014, cuando Geyser y Weier tenían 12 años, atrajeron a Leutner, también de 12, a una zona boscosa en Waukesha, cerca de Milwaukee, y la apuñalaron 19 veces. Las niñas afirmaron que lo hicieron para complacer al personaje ficticio Slender Man.
En Sun Prairie, varios residentes expresaron inquietud por la decisión de ubicar a Geyser en el hogar grupal.
“Sentí que esto ocurrió sin que los residentes lo supieran, aunque, obviamente, Sun Prairie sí recibió la información”, dijo a WKOW una residente que pidió mantener su nombre en reserva.
Otra residente señaló: “Creo que todos merecen una oportunidad para volver a la sociedad y vivir su vida. Pero nosotros también merecemos la información necesaria, como para pensar dos veces, por ejemplo, cuando aseguras tu casa por la noche”.

Los vecinos también señalaron que ella desapareció a las 8 p. m. del sábado, y que la policía de Madison no recibió el aviso sino hasta la mañana del domingo.
“Sobre todo siento enojo porque no nos lo dijeron. Y parece que el vecindario de Meadowood muchas veces recibe una mala fama, aunque es una gran comunidad”, comentó otra residente.
Durante el ataque, Geyser y Weier obligaron a Leutner a recostarse en el suelo. Con un cuchillo de cocina que había llevado desde su casa, Geyser apuñaló repetidas veces a Leutner mientras Weier la animaba a continuar.
Leutner sobrevivió por muy poco, según el personal médico que la atendió en ese momento.
Geyser y Weier fueron detenidas más tarde ese mismo día mientras caminaban por la Interestatal 94, y contaron a los investigadores que atacaron a Leutner para ganarse el derecho a servir a Slender Man y que temían que él lastimara a sus familias si no cumplían.
También dijeron entonces que, después del ataque, planeaban caminar hasta la supuesta mansión de Slender Man en el norte de Wisconsin.

Ambas fueron declaradas no culpables en 2017 por padecer un defecto o enfermedad mental, y recibieron sentencias de internamiento psiquiátrico.
El caso generó amplia atención porque giró alrededor de Slender Man, un personaje creado en línea en 2009 por Eric Knudson como una figura espectral añadida digitalmente a fotos cotidianas de niños jugando.
Slender Man suele representarse como una figura delgada, alargada, con traje negro y un rostro blanco sin rasgos.
Weier recibió una sentencia de 25 años y obtuvo una liberación condicional en 2021 bajo una orden de compromiso del mismo periodo. En 2023 quedó libre de monitoreo electrónico.
Geyser, por su parte, recibió una sentencia de 40 años de internamiento psiquiátrico. Vivió siete años en un hospital psiquiátrico en Oshkosh y este año fue ubicada en un hogar grupal después de que tres especialistas declararon que había mostrado avances en el manejo de su enfermedad mental.
Según las condiciones de su liberación, debía permanecer bajo supervisión estatal con un monitor GPS.
Traducción de Leticia Zampedri






