Ex secretaria de prensa de Trump inmutada por descubrimiento de documentos secretos en Mar-a-Lago
“Hay que recordar que el expresidente es un hombre muy, muy paranoico. Así que no me sorprendió en absoluto, lo cual es bastante alocado, para ser sinceros.”
La exsecretaria de prensa de la Casa Blanca bajo Trump, Stephanie Grisham, dijo que “no le sorprende” que se hayan encontrado documentos clasificados en la residencia de Florida del expresidente Donald Trump.
The Washington Post reportó el jueves que algunos de los documentos de la Casa Blanca que Trump llevó a Mar-a-Lago estaban marcados a simple vista como clasificados y que los documentos trasladados de forma incorrecta incluían algunos ultra secretos.
“No me sorprendió cuando vi el informe”, dijo Grisham a CNN el viernes. “Creo que lo importante es que este es otro ejemplo de una Casa Blanca y una administración donde solo no teníamos reglas. No seguimos ninguna regla.
“Creo que debería ser investigado, pero va a haber muchas cosas involucradas. Es posible que hayan sido marcados como ultra secretos, pero ¿los desclasificó el presidente? ¿Quién los empacó? ¿Cuál fue la intención allí? ¿De verdad todo fue devuelto?”, añadió.
“Pienso que este también es otro ejemplo de lo que no queremos, nunca más, en nuestro gobierno al más alto nivel en la Casa Blanca”, dijo Grisham.
La ex secretaria de prensa dijo que pensaba que el hábito de Trump de romper documentos era un “tic nervioso”.
“Él siempre los rompía todos”, dijo.
“Recuerdo que en un vuelo nos dirigíamos al Medio Oriente en una de nuestras visitas sorpresa navideñas a las tropas y yo estaba sentada detrás de él mirándolo porque no había ninguna otra cosa que mirar. Y él revisaba sus cajas y guardaba algunas cosas en una carpeta, firmaba algunas cosas”, dijo Grisham al canal de noticias.
“Rompía algunas cosas y las tiraba al suelo, lo cual era normal en su totalidad. Lo hacía en la Casa Blanca. Lo hacía en la residencia. Y luego rompió pedazos de papel y lo vi poner algunos de esos pedazos de papel rotos en el bolsillo interior de su abrigo”, agregó.
“Y recuerdo que en ese momento solo pensé, me pregunto por qué esos tienen que ir en su bolsillo, en lugar de en el suelo. No me preocupé en ese momento porque estaba muy acostumbrada a verlo”, dijo Grisham. “Pero recuerdo de forma clara que me pregunté por qué metió esos pedazos desgarrados a su abrigo. Tal vez los iba a tirar en el baño más tarde. No sé”.
Varios informes han declarado que los asistentes de la Casa Blanca encontraban documentos que tapaban los baños, y supusieron que era obra de Trump.
Grisham dijo que la historia acerca del hallazgo de documentos en los baños era “una novedad para mí”, pero agregó que “no me sorprendió en absoluto”.
“Hay que recordar que el expresidente es un hombre muy, muy paranoico. Así que no me sorprendió en absoluto, lo cual es bastante alocado, para ser sinceros”, agregó.
Grisham le dijo a CNN que Trump “no confiaba en nadie”.
“Él no confiaba en las personas que lo rodeaban... Había momentos en los que quería hacer todas las cosas por sí solo”, agregó.
“Era nada más que un hombre paranoico. Y para mí, él siempre fue así, así que no me preocupé. Pero ahora que ya no estoy en ese contexto y me tomé un descanso de esa atmósfera como de culto, ahora veo lo loco y extraño que de verdad fue todo”, dijo.
La exasistente de la Casa Blanca de Trump, Omarosa Manigault Newman, afirmó que Trump a veces incluso masticaba documentos rotos.
A Trump “le encantaba romper esos documentos”, dijo Manigault Newman a MSNBC después de que el Washington Post reportara que los Archivos Nacionales recuperaron 15 cajas de documentos que Trump había enviado sin autorización a su residencia en Florida.
La exasesora dijo que “claro que hay cosas que estoy segura que no se pueden explicar porque Donald Trump se volvió muy, muy consciente de que muchos de estos documentos confidenciales en algún momento se harían públicos”.
“Después de que [el abogado de Trump] Michael Cohen salió de su oficina y yo entré a la oficina oval, Donald, en mi opinión, masticaba algo que acababa de romper”, dijo a MSNBC. “Lo que fue muy extraño, ya que es germófobico y nunca se lleva papel a la boca”.