Elon Musk habría despedido a ingeniero de X que confirmó que estaba perdiendo popularidad en la red social
“Estás despedido”, dijo el multimillonario a un ingeniero principal de la plataforma, según un nuevo libro sobre la compra de Musk de la red social antes conocida como Twitter

Meses después de que Elon Musk comprara la empresa de redes sociales X, entonces conocida como Twitter, supuestamente despidió a un empleado por decirle que la gente estaba perdiendo interés en sus publicaciones.
El incidente de 2023 se produjo poco después de que el multimillonario de la tecnología comprara la plataforma por 44.000 millones de dólares, y es solo una de las historias que ilustran las caóticas secuelas de la adquisición de Musk, detalladas en un nuevo libro.
Gilded Rage: Elon Musk and the Radicalization of Silicon Valley (en español, Furia dorada: Elon Musk y la radicalización de Silicon Valley), de Jacob Silverman, examina la venta de Twitter y los rápidos cambios en la organización, en la que alrededor de la mitad de la plantilla fue despedida, se reinstauraron cuentas previamente prohibidas, la moderación de contenidos se derrumbó, y Musk supuestamente convirtió el feed “Para ti” en un reflejo de sus propios intereses.
El libro arroja nueva luz sobre cómo el poder al que Musk accedió con la compra de la plataforma reconfiguró rápidamente su enfoque de la política y alimentó su deseo y expectativa de poder moldear el debate público.
Al parecer, la clave para ello fue la desesperada necesidad de Musk de ser considerado popular, según afirma el libro.

Silverman relata un informe publicado por primera vez por el medio de noticias en línea Platformer. En aquel momento, el informe de Platformer afirmaba que Musk, perplejo por la disminución de participación en sus publicaciones a pesar de su elevado número de seguidores, mantuvo una reunión con varios altos cargos de Twitter.
“Esto es ridículo”, dijo el magnate, y añadió: “Tengo más de 100 millones de seguidores, y solo recibo decenas de miles de impresiones (vistas)”.
Los ingenieros trabajaron para entender la menguante influencia de Musk en su propia plataforma, investigando si su alcance se había “restringido artificialmente” de algún modo. Sin embargo, no encontraron pruebas de que el algoritmo estuviera parcializado en su contra.
Al parecer, cuando uno de los dos ingenieros principales de la empresa le informó de esto, Musk no respondió bien.
“Estás despedido”, le dijo al ingeniero.
La noticia, de la que informó Platformer en 2023, se publicó apenas tres días antes de otro incidente que evidenció la preocupación primordial de Musk sobre cómo hacer funcionar Twitter para amplificar su alcance.
Silverman cuenta cómo, durante el Super Bowl de 2023, Musk tuiteó su apoyo a los Philadelphia Eagles. El entonces presidente de EE. UU., Joe Biden, también tuiteó anunciando su apoyo al equipo de fútbol americano.
“El tuit de Biden generó unas tres veces más vistas que el de Musk”, escribe Silverman, según un extracto publicado en la revista Newsweek.
“Eso aparentemente fue inaceptable para Musk, que borró su tuit y voló a California después del partido para exigir cambios en el algoritmo de Twitter”, añade.
Junto a estas rabietas entre bastidores, Musk también se comportaba de forma cada vez más errática en Twitter, según sugiere el libro.
“A la vista de todos, parecía como si Musk estuviera siendo radicalizado por la derecha paranoica de Internet, y siendo bautizado en sus filas”, escribe Silverman.
Cuando los usuarios abandonaron la plataforma en masa y los ingresos por publicidad cayeron en picado, Musk dijo en noviembre de 2023 que las empresas que criticaban sus publicaciones podían “irse a la m****a”.
Esto culminó con la marcha en abril de 2024 de Edward Pérez, director de X para la integridad cívica.
“Musk es un ejemplo de las tendencias racistas, sexistas y plutocráticas que socavan el compromiso de la democracia con la igualdad para todos”, escribió entonces Pérez.
Gilded Rage: Elon Musk and the Radicalization of Silicon Valley será publicado el 7 de octubre en EE. UU. y el 9 de octubre en el Reino Unido.
Traducción de Sara Pignatiello