Presidente del gobierno español se reúne con rey de Marruecos; hablan de migración y guerra en Gaza
El presidente del gobierno español Pedro Sánchez se reunió el miércoles con el rey marroquí Mohamed VI, elogiando la cooperación entre ambas naciones en el manejo de la migración.
Sánchez también reiteró la postura de España en apoyo al plan de autonomía de Marruecos respecto a la disputada región del Sahara Occidental, e hizo un llamado al cese del fuego en la guerra entre Israel y Hamás, la cual comenzó en octubre.
“Debemos garantizar el acceso a la ayuda humanitaria, para lo cual es fundamental —esta es la defensa que hemos hecho desde el gobierno de España— la labor de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo”, dijo Sánchez en Rabat, refiriéndose a la agencia conocida como UNRWA por sus iniciales en inglés.
Israel aseguró el mes pasado que 12 empleados de la UNRWA participaron en el ataque de Hamás del 7 de octubre, ante lo cual Estados Unidos y otros donantes suspendieron su financiación a la agencia. Israel ha pedido la desaparición de la UNRWA, pero ninguna otra agencia de la ONU o grupo de ayuda es capaz de reemplazarla por el momento.
Sánchez no estuvo acompañado por el rey ni por el primer ministro marroquí, Aziz Ajanuch, en su conferencia de prensa en la capital de Marruecos, luego de su reunión con funcionarios del país.
El jefe de gobierno español hizo sus declaraciones en torno a la migración mientras ambas naciones lidian con un repunte de migrantes hacia las Islas Canarias y hay debates y protestas en toda Europa en torno a las regulaciones e importaciones agrícolas. En los últimos años, Marruecos ha realizado labores para evitar los cruces fronterizos hacia las ciudades españolas de Ceuta y Melilla, que se encuentran en el continente africano, así como los cruces por vía marítima a través del estrecho de Gibraltar.
Pero los arribos en bote a las Islas Canarias —ubicadas a unos 100 kilómetros (60 millas) de las costas marroquíes— han ido en aumento este año. La mayoría de las embarcaciones proceden de Mauritania, país ubicado directamente al sur de Marruecos, que ha intentado interceptar a aquellas que pasan a través de sus aguas. El ministerio del Interior de España informó que han llegado 11.704 migrantes a las Canarias hasta el 15 de febrero, un incremento de más del séxtuple respecto al mismo periodo del año anterior.
España y Marruecos mantienen estrechos lazos comerciales y políticos, y los marroquíes conforman la mayor comunidad extranjera en territorio español. La nación europea es también el mayor inversionista extranjero en Marruecos. Esta es la primera visita de Sánchez al país del norte de África desde febrero de 2023, aunque en esa ocasión no se reunió con el monarca.
En su conferencia de prensa del miércoles, Sánchez reiteró la postura que asumió España hace dos años en torno a los reclamos marroquíes en la disputada región del Sahara Occidental. El respaldo de Madrid al plan de Marruecos significó un acercamiento en las relaciones, y España fue uno de cinco países de los que Marruecos aceptó ayuda después de que un sismo remeció a la nación africana en septiembre pasado.
Sánchez visitó Marruecos en un momento en que ha habido manifestaciones en Madrid para oponerse a políticas que sectores en España consideran una carga financiera, y que hacen que sus productos se vuelvan más costosos que las importaciones desde países que no pertenecen a la Unión Europea, incluidos los tomates marroquíes, el país con mayores importaciones desde Europa. Hace unas semanas, manifestantes vaciaron y pisotearon un camión lleno de tomates marroquíes en el sur de España.