El nuevo hogar de William y Kate es un derroche “vergonzoso”, dice grupo de presión antimonárquico
La pareja se mudará a Adelaide Cottage, la cual pertenece a Crown Estate, en Windsor's Home Park
El grupo de campaña Republic calificó la reubicación del duque y la duquesa de Cambridge en Adelaide Cottage como “vergonzosa” en medio de la crisis del costo de vida.
William y Kate se mudarán a la casa de cuatro habitaciones catalogada como Grado II en el Home Park privado de Windsor para permitirles a sus hijos, el príncipe George, la princesa Charlotte y el príncipe Louis, más libertad cuando entren a Lambrook School cerca de Ascot en Berkshire, Inglaterra, el próximo mes.
El duque y la duquesa conservarán su apartamento de 20 habitaciones en el Palacio de Kensington como su residencia oficial de trabajo, y también tendrán la mansión de campo de 10 habitaciones, Anmer Hall, cerca de Sandringham.
Graham Smith, director ejecutivo del grupo de presión que hace campaña por un jefe de estado electo, dijo: “Mientras los hogares comunes apenas pueden pagar las cuentas de energía y se enfrentan a una inflación paralizante, ¿por qué les damos otro hogar a William y Kate?”.
“Esto es vergonzoso”.
Agregó: “Todas estas casas palaciegas requieren protección, calefacción y personal las 24 horas del día”.
Añadió que Crown Estate era “un imperio de propiedad estatal que se supone que genera dinero para el Tesoro”.
El uso de la propiedad será un regalo de la Reina, quien ha dado permiso para que William y Kate se la alquilen a Crown Estate, y la pareja pagará el alquiler a valor de mercado con sus propios fondos privados.
Joe Little, editor de la revista Majesty, comentó que la mudanza y la nueva escuela de los niños Cambridge tenían muchos beneficios para la familia, incluida la privacidad y la seguridad.
“Reubicarse en Adelaide Cottage en el ultraprivado Home Park en Windsor elimina el aspecto de ‘pecera de colores’ de la vida de la familia Cambridge”, consideró Little.
“El departamento 1A en el Palacio de Kensington es perfecto en muchos sentidos, pero el duque, la duquesa y sus hijos no pueden ir y venir como les guste o aprovechar los parques cercanos de Londres debido a los siempre presentes problemas de privacidad”.
Agregó que tener a los tres niños en la misma escuela tenía sentido y eliminaría el viaje de “pesadilla” del Palacio de Kensington a Battersea dos veces al día.
“También significa que el costo de la seguridad, siempre un tema polémico, es mucho más bajo que si Louis estuviera en una escuela diferente a la de sus hermanos”, puntualizó Little.
Pero el comentarista de la realeza y excorresponsal real de la BBC, Peter Hunt, opinó que la decisión destacaba cómo la familia real no estaba sujeta a las mismas dificultades económicas que el resto de la nación.
Hunt comentó: “Una tercera casa para los Cambridge es un recordatorio de que la realeza no sufre la crisis del costo de vida y una recesión inminente de la misma manera que el resto de nosotros”.
“Cuando el dinero de los contribuyentes se gastó en renovar su apartamento en el Palacio de Kensington, el príncipe William, quien hace campaña por las personas sin hogar, insistió en que su familia planeaba quedarse allí durante muchos años”.
Una fuente real contó que William y Kate estaban “bastante” conscientes de la crisis del costo de vida que enfrentan muchos que no podrían permitirse tales oportunidades.
La fuente aclaró: “Es algo en lo que han pensado mucho y esta es una decisión que no han tomado a la ligera”.
“Hubiera sido muy difícil para ellos continuar como miembros de la realeza de alto nivel si vivieran en Norfolk”.
Durante mucho tiempo se informó que la Reina Madre le había dado a William una cabaña llamada Tam-Na-Ghar en la finca de Balmoral, pero William no alquila ni es dueño de la casa: es propiedad de Crown Estate y está alquilada a un tercero, informó el Palacio de Kensington.
Crown Estate, el cual posee propiedades por un valor de alrededor de US$17 mil millones, está compuesto de tierra y propiedades que pertenecen al soberano pero no en posesión privada de la Reina.
No está administrado por la Reina, pero sus ingresos tienen cierta relación con la cantidad de dinero que recibe cada año.
Bajo la fórmula de financiación de la Sovereign Grant, la cual paga costos como los salarios de la casa real, los viajes oficiales y el mantenimiento de los palacios reales, la Reina recibe un porcentaje de las ganancias de Crown Estate para sus gastos oficiales.
Para ayudar a pagar una remodelación de US$437 millones del Palacio de Buckingham, el porcentaje de las ganancias de Crown Estate pagadas a Sovereign Grant se incrementó del 15 al 25 por ciento durante 10 años a partir de 2017.
El resto de los beneficios van a Hacienda.