¿Dónde fue visto por última vez Jay Slater y dónde hallaron su cuerpo?
Tras 29 días de búsqueda, la Guardia Civil española encontró restos humanos junto a la ropa y las pertenencias del joven británico, quien se habría extraviado en una zona montañosa de la isla
Cuando el joven británico Jay Slater desapareció en el norte de Tenerife (Canarias, España) hace casi un mes, el caso sacudió al Reino Unido.
Se donaron miles de dólares para financiar la búsqueda, y algunos voluntarios incluso volaron hasta la popular isla turística para ayudar.
Se recurrió al uso de helicópteros y perros rastreadores, y, durante los últimos días de búsqueda, se contrató a expertos de forma privada para encontrar al joven oriundo de la región de Lancashire.
La búsqueda, que se extendió durante cuatro semanas bastante difíciles, siguió los últimos movimientos de Slater a través de valles traicioneros y barrancos peligrosos. Finalmente, se halló un cadáver, que podría pertenecer al joven de 19 años.
Tras registrar la evidencia, la Guardia Civil afirmó que existía una alta probabilidad de que los restos encontrados cerca del pueblo de Masca (noroeste de Tenerife) correspondieran al joven albañil. Los agentes añadieron que se llevarían a cabo pruebas de ADN para determinar de forma oficial la identidad del difunto, así como una autopsia para descubrir la causa de la muerte.
Slater había viajado a la isla para asistir a un festival de música electrónica con sus amigos. Eran las primeras vacaciones que pasaba sin su familia.
El joven se separó de sus amigos el domingo 16 de junio, luego de pasar el día en el festival NRG, cuando decidió dirigirse al lugar en el que se hospedaban para descansar tras pasar un fin de semana agotador.
A continuación, se trasladó a un club nocturno en la zona Las Verónicas de Playa de las Américas, cerca de su alojamiento, y permaneció allí hasta la madrugada. Cerca de las 5:00 a. m., Slater se trasladó a un Airbnb en el remoto pueblo de Masca, ubicado a unos 43 km, donde dos hombres que había conocido se estaban alojando.
Uno de los hombres, identificado como Ayub Qassim, le dijo al periódico MailOnline que Slater se había quedado en su alojamiento porque “no tenía adonde ir”, e insistió en que el joven se encontraba bien cuando dejó el lugar a las 7:30 a. m.
Slater fue visto por la dueña de un café, quien dijo que el joven le había preguntado por los horarios del autobús; sin embargo, como el siguiente pasaría en dos horas, Slater habría decidido no esperar.
La mujer dijo que lo vio “caminar rápido” para salir del pueblo. Su teléfono fue detectado por última vez en el Parque Rural de Teno.
Alrededor de las 8:15 a. m., llamó a su amiga Lucy Law para decirle que estaba perdido, que tenía sed y que a su teléfono le quedaba apenas un 1 % de batería.
“Jay obviamente pensaba que podría llegar a casa desde allí, pero terminó en el medio de la nada”, dijo Law al periódico Manchester Evening News. “En la mañana comenzó a caminar usando los mapas en su teléfono [para orientarse], y terminó extraviado en una región montañosa”, añadió.
Slater también llamó a su amigo Brad Hargreaves, quien lo escuchó “deslizarse” por un terreno de grava, lo cual hizo suponer que se había salido del camino principal del parque nacional.
La policía recibió una alerta poco después de las 9:00 a. m., por lo que los padres de Slater (Debbie Duncan y Warren Slater) y su hermano Zak volaron a la isla al día siguiente e hicieron un llamamiento público.
Entonces, se inició una búsqueda a gran escala en el noroeste de la isla que incluyó helicópteros, perros rastreadores y un grupo de agentes que se dedicó a registrar el valle de Masca.
Los esfuerzos se centraron en el Parque Rural de Teno, con especial énfasis en el camino donde el teléfono de Slater emitió su última señal. Durante las primeras semanas de búsqueda, se vio a las autoridades inspeccionar edificios anexos de granjas y explorar barrancos.
Por otro lado, algunas pistas falsas desviaron la búsqueda por momentos. Un reporte afirmó que Slater había sido visto mirando un partido de la Eurocopa en otro pueblo luego de su desaparición; otro hizo que la investigación se trasladara temporalmente al área Los Cristianos, en el sur de la isla.
A raíz de estos testimonios, la madre de Slater llegó a decir que temía que su hijo hubiera sido “secuestrado”.
Ambos informes fueron descartados, pero se sumaron a la jauría de detectives en línea que ofrecieron sus propias teorías en las redes sociales.
Casi dos semanas después de su desaparición, la Guardia Civil convocó a voluntarios para llevar a cabo una “búsqueda masiva” que tendría lugar el 29 de junio.
Sin embargo, según el padre de Slater, la cantidad de voluntarios que se presentaron en el parque fue “decepcionante”: solo estaban él, su hermano, y unos cuantos voluntarios solitarios.
Las autoridades españolas detuvieron la búsqueda oficial al día siguiente, pero aseguraron que continuarían investigando las pistas recibidas.
La familia de Slater expresó su decepción ante esta decisión, pero se comprometió a seguir explorando el terreno, para lo cual utilizaron parte de los casi USD 65.000 que recibieron a través de una recaudación de fondos destinada a cubrir sus gastos de alojamiento y los suministros de búsqueda.
Su padre, su hermano y su tío fueron vistos varias veces junto con un grupo pequeño de lugareños mientras recorrían un desfiladero cercano al lugar donde se localizó el teléfono de Slater por última vez.
El sábado 13 de julio, la madre de Slater notificó en la página de recaudación de fondos que se habían contratado los servicios de un equipo de expertos de los Países Bajos, quienes continuarían la búsqueda con la ayuda de perros especializados.
Sin embargo, solo dos días después, un equipo de rescate de montaña de la Guardia Civil española halló un cuerpo cerca de Masca el lunes, y se reveló que no habían dejado de registrar el área.
“Este descubrimiento fue posible gracias a la incesante y discreta búsqueda llevada a cabo por la Guardia Civil durante estos 29 días, en la que se preservó el espacio natural para que no se llenase de curiosos”, informó un comunicado de la institución.
El cuerpo de seguridad dijo que Slater pudo haberse precipitado en el área empinada e inaccesible donde fue encontrado, y publicó un video en el que varios rescatistas aparecían escalando paredes rocosas y luchando contra la maleza para continuar con la búsqueda.
La organización benéfica británica LBT Global declaró que, aunque aún no se había procedido a la identificación formal, los restos se habían encontrado junto con la ropa del joven de 19 años.
La organización, que se dedica a ofrecer apoyo a los familiares de las personas británicas desaparecidas en el extranjero, también dijo: “LBT Global lamenta informar que el cuerpo hallado en Tenerife sí parece ser el de Jay Slater. Los restos fueron encontrados cerca de la última ubicación de su teléfono. Aunque la identificación formal no se ha llevado a cabo, junto a los restos se hallaron las posesiones y la ropa de Slater”.
El comunicado añadió que la organización continuaría apoyando a los familiares del joven, quienes aún no han emitido declaraciones sobre la noticia.
Traducción de Sara Pignatiello