Zelenskyy arriba a un Congreso adusto cuando el plan de Biden para Ucrania está al borde del colapso
El presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy arribó el martes a un Congreso estadounidense dominado por un estado de ánimo muy distinto que el del año pasado, cuando se lo recibió como un héroe. La invasión Rusia está por iniciar su tercer año y están en juego los fondos estadounidenses.
Zelenskyy arribó a Washington en momentos que el pedido del presidente Joe Biden de 110.000 millones de dólares de ayuda a Ucrania, Israel y necesidades de la seguridad nacional está en grave riesgo de colapsar en el Congreso. Los republicanos exigen medidas en la frontera con México que los demócratas rechazan por draconianas a cambio de la ayuda extranjera.
“Es exasperante”, dijo el senador demócrata Chriis Coons, un estrecho aliado de Biden. “Un pésimo mensaje al mundo, al pueblo ucraniano”.
La Casa Blanca dijo que el momento era adecuado para la visita de Zelenskyy a Washington cuando Biden presiona a los legisladores a aprobar el paquete de ayuda antes de las fiestas de fin de año. Un vocero dijo que Estados Unidos no puede permitir la caída de Ucrania, sobre todo cuando la guerra entre Israel y Hamás ha desviado la atención, y que el presidente estaba dispuesto a hacer concesiones a los republicanos.
“Estos fondos adicionales ayudarán a Ucrania a recuperar aún más terreno y echar a los rusos a patadas”, dijo el vocero del Consejo Nacional de Seguridad de la Casa Blanca, John Kirby, a la emisora NBC.
Pero las perspectivas de un acuerdo sobre Ucrania se volvieron sombrías en el Capitolio en la víspera del arribo de Zelenskyy, quien no hizo declaraciones al iniciar una reunión a puertas cerradas con los senadores. Su visita siguiente era al nuevo presidente de la cámara baja, Mike Johnson, y luego a Biden en la Casa Blanca.
Mientras tanto, el otrora robusto apoyo bipartidista a Ucrania sigue disipándose.
El lunes por la noche, la Casa Blanca difundió informes de inteligencia recientes según los cuales Ucrania ha infligido fuertes golpes a Rusia en combates en el eje Avdiivka-Novopavlivka, incluidas 13.000 bajas y la destrucción de 220 vehículos de combate. El centro de resistencia en el este parcialmente ocupado ha visto algunos de los combates más encarnizados de las últimas semanas.
Según la inteligencia estadounidense, los rusos creen que si logra llevar la situación militar a un punto muerto durante el invierno, se agotará el apoyo occidental a Ucrania y en última instancia le dará la ventaja a Rusia, a pesar de que sus fuerzas han sufrido fuertes bajas y se han visto frenadas por la escasez persistente de personal entrenado, municiones y pertrechos.