“20.000 especies de abejas” y “La sociedad de la nieve” se enfrenarán en los Goya
Los Premios Goya replicarán el sábado el mítico duelo entre David y Goliat, representados esta vez por “20.000 especies de abejas” y “La sociedad de la nieve”, las principales nominadas en la 38a entrega de los galardones de la Academia de Cine de España.
“20.000 especies de abejas” de la debutante Estibaliz Urresola Solaguren, ya ha inscrito su nombre en la historia del cine español al ser la ópera prima con más nominaciones en los Goya al sumar 15. El filme se desarrolla en un verano en el que Lucía se presenta como una niña trans ante su familia.
Se enfrenta a “La Sociedad de la nieve”, una superproducción épica actualmente nominada al Oscar a mejor largometraje internacional, así como a mejor maquillaje y peluquería, comandada por J. A. Bayona, quien posee filmes aclamados como “Un monstruo viene a verme” y “El orfanato”.
“La sociedad de la nieve” sigue el periplo de los sobrevivientes del accidente aéreo de los Andes de 1972 y ha sido vista por personas de todo el mundo tras su estreno en Netflix. Sus 13 nominaciones podrían ampliar fácilmente los tres Goya con los que ya cuenta Bayona.
Urresola y Bayona no serán los únicos protagonistas de la noche. En la terna, aunque parten algo por detrás en cuanto a opciones de premio, también se encuentran “Cierra los ojos” y “Saben aquell”.
“Cierra los ojos”, cuenta la desaparición de un actor durante un rodaje y supone el regreso de Víctor Erice a la gran pantalla después de 30 años, aspira a 11 premios. “Saben aquell”, donde David Trueba plasma el ascenso al estrellato del popular humorista Eugenio en la España de los años 1970 y 80, tiene el mismo número de nominaciones.
Isabel Coixet, la mujer con el mayor número de Goya a su nombre, con ocho, busca acercarse a los 10 de Pedro Almodóvar llevándose el “cabezón”, como se le conoce a los premios, en alguna de las siete nominaciones que le ha brindado “Un amor”, sobre el particular paso de su protagonista, Nat, por un pueblo español.
Los caminos de Bayona y Urresola tomarán rumbos distintos en algún momento de la ceremonia ya que el primero se medirá con Erice, Trueba, Coixet y Elena Martín Gimeno — quien llevó la batuta de “Creatura” — por el premio a mejor director. Urresola hará lo propio en la categoría novel junto a Álvaro Gago (“Matria”), Itaso Arana (“Las chicas están bien”), Alejandro Marín (“Te estoy amando locamente”), así como la pareja formada por los venezolanos Alejandro Rojas y Juan Sebastián Vásquez (“Upon entry”).
La actriz estadounidense Sigourney Weaver se convertirá en la tercera persona en recibir un Goya Internacional, un premio de reciente creación, otorgado previamente a Cate Blanchett y Juliette Binoche. Weaver tiene una relación de años con el cine español tras su participación en “Un monstruo viene a verme” de Bayona y “Luces rojas” de Rodrigo Cortés.
El Goya de Honor, con el que la Academia reconoce a personalidades clave para el cine español, llegará a las manos de director de fotografía, restaurador fílmico e investigador Juan Mariné.
El premio a la mejor película iberoamericana se disputará entre la película portuguesa “Alma viva”, de Cristèle Alves Meira; la chilena “La memoria infinita”, de Maite Alberdi; la puertorriqueña “La pecera”, de Glorimar Guerrero; la argentina “Puan”, de María Alché y Benjamín Naishtat, y la venezolana “Simón”, de Diego Vicentini.
Valladolid — la ciudad del centro de España donde se entregarán este año los Goya — también dará la bienvenida a Almodóvar, Penélope Cruz, Gael García Bernal, Barbara Lennie y Ana Castillo como presentadores de la gala, que será conducida por la actriz y cantante Ana Belén y por los populares directores Javier Ambrossi y Javier Calvo, responsables de éxitos como la serie “La Mesías”.
La noche tendrá un espacio para la reivindicación. Tras el último escándalo de abusos sexuales que salpicó al cine español hace apenas unas semanas, la Asociación de Mujeres Cineastas y de Medios Audiovisuales mostrará su apoyo a las víctimas con abanicos con la frase “Se acabó”, el lema de la lucha contra este tipo de agresiones popularizado por las futbolistas españolas luego de que su victoria en la Copa Mundial quedara eclipsada por un beso no consentido a la jugadora Jenni Hermoso.