Estos son los países donde está prohibido celebrar el Día del Amor y la Amistad

Para mucha gente, abrazarse o besarse son actos que se enmarcan en la normalidad de una ciudad o país; sin embargo, para otros no lo son, pues se trata de una violación a los usos y costumbres de una región determinada.

Algunas personas regalan chocolates, flores, una tarjeta e, inclusive, los más curiosos, un álbum fotográfico con los recuerdos más importantes que han vivido con su pareja sentimental. Se trata de algunos de los detalles más comunes en el Día de San Valentín, también conocido como el Día del Amor y la Amistad, que se festeja cada año el 14 de febrero en gran parte del mundo.

De acuerdo con la Iglesia Católica, San Valentín era un sacerdote que, pese a la prohibición del matrimonio en la Antigua Roma, se dedicó a casar parejas en secreto. Según la creencia popular, tras ser descubierto fue sometido a intensas torturas y, al final, fue decapitado el 14 de febrero del año 270 d.C. (después de Cristo), de ahí que se atribuya esa fecha al Día de los Enamorados.

En este artículo, lamentamos ser los aguafiestas, pues mientras en gran parte de Occidente, los besos, abrazos, mimos e, inclusive, ligeras caricias en público, sí están permitidas; en otros países eso es algo impensable. En Independent en Español, enlistamos aquellas regiones en las que está prohibido ser afectuoso.

Es, simplemente, una fiesta desagradable en la región. Cabe mencionar que, esta actividad es de riesgo en el sur de Asia, y la prohibición se acrecentó en 2015, cuando los pobladores protestantes radicalizaron sus medidas contra quienes celebraban ese día a pesar de las restricciones impuestas por las autoridades.

El país islámico ha reiterado que no se puede festejar el Día del Amor y la Amistad, debido a que la efeméride no tiene conexión con la religión que profesan. Así que si visitaste ese país o radicas en la zona, no podrás tener una cena romántica ni mucho menos obsequiarle flores en público a tu pareja.

Anticulturales, inmorales y forman parte de la decadencia de Occidente. Así es como el Gobierno de Irán cataloga el festejo del 14 de febrero. Al igual que en Pakistán, las autoridades argumentan que la celebración no está relacionada con las estrictas leyes religiosas vigentes.

Gran parte de la población de este país es musulmana, así que las fiestas relacionadas con este santo cristiano, no concuerdan con la ley islámica que en 2005 lo declaró como su enemigo; asimismo, el Consejo de Fatwa consideró el festejo como ilegal y pagano.