Para Scaloni no hay debate: Álvarez y Lautaro no pueden jugar juntos con Argentina
Igual que hace dos décadas, cuando Marcelo Bielsa decidió que Gabriel Batistuta y Hernán Crespo no podían jugar juntos en Argentina, Lionel Scaloni habría llegado a una determinación similar con sus dos joyas de ataque: Julián Álvarez y Lautaro Martínez.
En el debut argentino, Álvarez abrió el marcador al inicio de la segunda parte ante Canadá y Lautaro Martínez, su reemplazo, firmó el 2-0 definitivo.
Fue la primera vez que los dos delanteros marcaron en un mismo partido con la Albiceleste.
Pero es poco probable verles juntos en los siguientes compromisos de la selección campeona del mundo y que defiende la corona continental.
El técnico de Argentina lo tiene definido: sólo uno de ellos puede estar desde el arranque en la función de delantero centro. El otro siempre tendrá que esperar como cambio desde el banco.
”Julián y Lautaro pudieron convertir. Nosotros necesitamos tener equilibrio, esa es la realidad", argumentó Scaloni tras la victoria ante Canadá. “¿A quién no le gustaría que jueguen los dos? Duele porque son delanteros de primer nivel. Es la realidad y ellos lo entienden. Son los primeros”
Scaloni procedió a implorar a los presentes en la sala de prensa del estadio en Atlanta: "Les invito a que si encuentran una solución para que jueguen los dos, me la den".
Tanto la “Araña” Álvarez como el "Toro" Martínez juegan en clubes campeones en sus ligas de Europa.
Álvarez lo hace en el Manchester City que acaba de conquistar su cuarto título seguido en la Liga Premier de Inglaterra, firmando 11 goles en 36 partidos.
Lautaro brilló en la Serie A de Italia con el Inter de Milán — fue el máximo anotador con 24 conquistas en 33 partidos.
Hace año y medio en el Mundial de Qatar, Lautaro fue el titular en la derrota 2-1 ante Arabia Saudí. Pero Scaloni decidió cambiar el tablero, dándole más minutos a Álvarez y éste respondió con una aportación de cuatro — incluyendo un doblete en la victoria sobre Croacia en las semifinales.
Tras el debut en la Copa América de Estados Unidos, Álvarez, de 24 años, elevó a nueve su cosecha goleadora con la selección. Lautaro Martínez, de 26 años, llegó a los 25 tantos al culminar una acción precedida por 13 pases, incluyendo el servicio de gol del astro Lionel Messi.
Todo ha hecho evocar lo ocurrido con Batistuta y Crespo, algo que alcanzó su punto de ebullición en el Mundial de Corea-Japón 2022, cuando Bielsa se inclinó por el primero.
En cuanto a perfiles, Batistuta y Crespo tenían características muy similares. En este caso, Álvarez es un delantero de mucha entrega física, dispuesto a retroceder para defender. Lautaro, por su parte, también trabaja en la recuperación, pero es un clásico “9” de más potencia.
Ese despliegue de Álvarez es tal vez lo que lo tiene un paso adelante cuando juegan juntos Messi y Ángel Di María, dos atacantes que superan los 36 años y que ya no están para tanto sacrificio.
Lautaro fue tajante al indicar que entiende la situación y que el técnico no tiene que darles explicaciones.
“No nos explica nada en concreto", sostuvo el artillero. "Habla con los dos, nos apoya y nos alienta. Obviamente tiene que tomar decisiones y se respetan. Al que le toque siempre va a dar lo mejor y después, al que le toca ingresar, tratará de dar lo mejor en los minutos que le toquen”.
Álvarez, por su parte, disfrutó romper una sequía goleadora con la selección que se remontaba a las semifinales de Qatar.
“Es importante para el delantero hacer goles, obviamente. Para la confianza personal y siempre sirve para ayudar al equipo”, dijo Álvarez. "Pero estaba tranquilo, si bien hacía mucho tiempo que no convertía, en los partidos que me ha tocado jugar me sentía muy bien, físicamente bien y siempre trato de ayudar al equipo desde donde me toque”.
Scaloni prefiere no tocar nada.
Después de todo, el equipo ha sido casi que indomable desde la consagración de Qatar, sumando 14 victorias y una derrota, con 34 goles a favor y cuatro en contra.
“Este equipo genera situaciones de gol y defiende como leones”, destacó Scaloni. “Ganar refuerza un montón de cosas. Siempre dije que Canadá era un rival complicado, una buena prueba. La prueba fue espectacular, se ganó. Ahora empieza otra Copa América”.