Condenan a acosador exhibicionista a prisión en Gran Bretaña
El primer acosador exhibicionista digital condenado en Inglaterra recibió el martes una pena de cinco años y medio de prisión por enviar fotos no solicitadas de sus genitales a una adolescente y una mujer adulta.
Nicholas Hawkes, de 39 años, es la primera persona en Inglaterra y Gales condenada por violar la ley de seguridad online, vigente desde el 31 de enero.
Se dijo a la corte que Hawkes pidió prestado el teléfono de su padre con la excusa de que debía llamar a la oficina de libertad condicional y desde otra habitación envió fotos por WhatsApp a una mujer y por iMessage a la niña de 15 años, que se largó a llorar.
Las dos tomaron capturas de pantalla y lo denunciaron a la policía.
La ley contra el acoso sexual por internet penaliza el envío de imágenes sexuales no solicitadas por redes sociales, aplicaciones de citas o mediante tecnologías como Bluetooth o Airdrop.
“El exhibicionismo sexual digital es un crimen grave que causa un fuerte impacto a las víctimas, pero con frecuencia se lo trata como ‘cháchara’ irreflexiva o una broma inofensiva”, dijo la subjefa de la fiscalía, Hannah von Dadelszen. “Así como los que cometen exhibicionismo obsceno en el mundo físico deben saber que habrá consecuencias, lo mismo han de saber quienes cometen sus delitos online: ocultarte detrás de una pantalla no te oculta de la ley”.
Hawkes confesó en una audiencia anterior que envió una foto o película de sus genitales con el intento de provocar alarma, angustia o humillación.
Hawkes está en un registro de delincuentes sexuales desde que el año pasado se lo condenó por exhibicionismo y actividad sexual con una menor de 16 años. Se declaró culpable de violar una orden local y de violar las condiciones de la condena en suspenso que recibió por el primer delito.
El abogado defensor Barry Gilbert dijo que Hawkes no gozó de una gratificación sexual con sus delitos, que atribuyó al estrés postraumático que sufrió al ser secuestrado, apuñalado y mantenido en cautiverio hace ocho años.
La jueza Samantha Leigh rechazó ese argumento y le dijo a Hawkes que “usted evidentemente está muy perturbado y tiene una visión distorsionada de usted mismo y sus deseos sexuales”.