El lado oscuro de Kenneth Mejia, aspirante demócrata a contralor de Los Ángeles
Una investigación de LAMag descubrió que el candidato, de origen filipino, mintió sobre su experiencia como contador público certificado para ser el próximo contralor de Los Ángeles, lo que debería descalificarlo para el cargo, escribe María Luisa Arredondo
En la página digital que creó para promover su candidatura a la contraloría de Los Ángeles, Kenneth Mejía se presenta como el candidato ideal para el cargo por ser el único contador público certificado entre quienes participaron en la primaria demócrata celebrada el pasado 7 de junio, en la que va en primer lugar, seguido del concejal Paul Koretz.
La página destaca que Mejia, de 31 años, cuenta con 11 años de trayectoria en contabilidad y auditorías y, por lo tanto, posee la experiencia técnica para servir a la ciudad de Los Ángeles como contralor. “Él estará listo desde el primer día para hacer sonar la alarma sobre la corrupción y el despilfarro con el fin de que el dinero de nuestros impuestos trabaje para nosotros”.
Y agrega que “Kenneth es un activista comunitario desde hace mucho tiempo con LA Tenant Union, que lucha contra los aumentos de alquiler injustos, los desalojos y los propietarios abusivos. La experiencia organizativa de Kenneth habla sobre sus principios y su compromiso para garantizar que el presupuesto de la Ciudad refleje las prioridades de los angelinos”.
Con tales credenciales, Los Angeles Times, el diario más influyente de la ciudad, no dudó en respaldar a Mejia en un editorial en el que destacó que su carrera como contador público certificado y auditor es impresionante, aunado al hecho de que es un candidato independiente.
“Debido a que no es parte de la estructura política establecida, creemos que es más probable que Mejía tenga el valor de pedir cuentas a otros funcionarios electos de la ciudad. Entiende los desafíos del trabajo y la necesidad de reunir a gente tanto dentro como fuera del Ayuntamiento para el cambio. Participa activamente en causas progresistas y grupos de derechos de los inquilinos, pero también tiene claro que el papel del contralor es brindar transparencia financiera sin considerar la política o la ideología”, señala el editorial.
Estas cualidades, sin embargo, están ahora en entredicho.
Investigación de LAMag
Una investigación llevada a cabo por Jason McGahan de Los Angeles Magazine, descubrió que la licencia de Mejia como contador público certificado, que resultó central para que vaya a la cabeza en las elecciones primarias, estuvo inactiva en varios periodos, entre noviembre de 2016 y enero de 2022.
Más grave aún resulta el hecho de que, al ser interrogado por Los Angeles Magazine acerca de los períodos en los que su licencia expiró, Mejía no lo negó. Simplemente comentó, a través de su cuenta de Twitter, que su oponente Paul Koretz estaba detrás de esta acusación, y que el hecho de que su licencia hubiera expirado no representaba un impedimento para que ejerciera como contador público certificado. “Cualquiera que sea un CPA (contador público certificado) sabe que NO NECESITAS UNA CPA ACTIVA para ser contador”, escribió Mejía.
Pero, como se desprende de la investigación de Los Angeles Magazine, la aseveración de Mejia es inexacta. Al consultar con la California Society of Certified Public Accountants, que es la asociación estatal más grande de contadores públicos certificados, ésta le aseguró a la publicación que nadie puede practicar la contaduría pública si su licencia está inactiva. Y agregó que, si alguien usa el título de contador público certificado o CPA cuando su licencia ha expirado, se debe colocar el término “inactivo”.
Conducta inapropiada en foros y debates
Los problemas de Mejia no se limitan al ámbito de su experiencia profesional. Según Los Angeles Magazine, existen varios reportes en internet que indican que los asistentes de campaña de Mejia han interrumpido de manera inapropiada e insolente una serie de foros y debates de la alcaldía de Los Ángeles.
Como ejemplo, citan el foro celebrado el 21 de marzo en la sinagoga Beth Hillel, en el que un asesor de Mejía, Steven Chun, interrumpió el evento al gritarle a uno de los candidatos, el concejal Kevin de León, que “era un pedazo de mierda” y “un jodido mentiroso’. Debido a la agresión, el rabino del templo tuvo que suspender temporalmente el foro.
Poco después, el 3 de junio, un video en Twitter muestra a Chun en un altercado físico contra De León durante un acto de campaña que el concejal hizo en la Placita Olvera. Acompañado por un grupo de manifestantes agresivos, Chun confrontó a De León diciendo que representaba a los desamparados del área.
Otro asistente de Mejia, Sim-Marel Bilal, insultó a la congresista Karen Bass, durante el debate que se efectuó en la sinagoga Beth Hillel.
“Te importa un carajo la gente pobre”, y “eres una maldita mentirosa”, le gritó Bilal a la congresista de 68 años, representante del Distrito 37 del Congreso de California.
Ante el cuestionamiento que Los Angeles Magazine, le hizo a Mejía sobre la conducta de Bilal y Chun, el candidato, de origen filipino, se negó a responder, lo que a todas luces resulta inadmisible.
El historial de Mejía, por otra parte, revela que por años ha estado enfocado en sus ambiciones políticas, no en el trabajo de contador público certificado. En 2016 se presentó como candidato demócrata al distrito 34 del Congreso de California. En 2017 se postuló para el mismo cargo, pero por el Partido Verde y recaudó $35.682. Al año siguiente volvió a contender por ese mismo puesto con ese partido y recaudó R$145.375. Para su última campaña había recaudado $217.665 y había recibido otros $428.000 en fondos equivalentes por parte de la ciudad. Hasta el 21 de mayo tenía $149.628.
Este cúmulo de revelaciones ha despertado, con razón, el enojo de los detractores de Mejia que se han dedicado ahora a recopilar información que presenta la verdadera cara del candidato a contralor en el sitio web www.mejiaisdangerous.com. El sitio muestra que Mejía ha llamado “violador y racista” al presidente Joe Biden y que varios de sus empleados defienden opiniones políticas extremas como la de que “la policía solo sirve a la agenda de los corruptos y asquerosos”.
Ante la avalancha de críticas contra Mejia, el consejo editorial del LA Times escribió el pasado 29 de mayo:
“A veces, la experiencia de un candidato no es la ideal o algunos de los puestos que ocupan no necesariamente cuentan con el respaldo del consejo editorial. Es raro, si no imposible, encontrar al candidato perfecto… La tarea del consejo, y de los votantes, es sopesar las fortalezas y debilidades de un candidato y contrastarlo con los demás en la carrera para elegir a la mejor persona posible”.
El LA Times tiene razón en este último punto. Es muy difícil encontrar a un candidato ideal, por eso, antes de apoyar a alguien con un editorial, una publicación debe hacer su tarea e investigarlo a fondo para poder hacer una comparación justa entre todos los contendientes. De lo contrario, pueden incurrir en el grave error de respaldar, como en el caso de Mejia, al menos indicado por su deshonestidad e incompetencia.
Es claro que si los votantes de Los Ángeles hubieran tenido acceso a la información divulgada por Los Angeles Magazine, no se hubieran inclinado por Mejia, que por desgracia podría estar a punto de convertirse en el próximo contralor de la ciudad.