Nick Cannon explica por qué no trató el tumor cerebral de su hijo con quimioterapia: “no quería que sufriera”
El actor dice que quería que su hijo menor, fallecido el 5 de diciembre, fuera “lo más feliz posible”
Nick Cannon se ha sincerado sobre la muerte de su hijo Zen, de cinco meses, a causa de un cáncer cerebral, y sobre las razones por las que él y la madre del bebé, Alyssa Scott, decidieron no tratar al niño con quimioterapia.
El actor, de 41 años, compartió la noticia de que el hijo de la pareja había muerto a principios de este mes en el Nick Cannon Show, donde explicó que su hijo menor había muerto de un tumor cerebral.
Mientras hablaba con People sobre la vida y la enfermedad de Zen, Cannon recordó cómo la respiración del bebé había sugerido que algo andaba mal poco después de su nacimiento en junio.
“Sonaba como si tuviera líquido en los pulmones, como una infección de los senos nasales o algo así”, dijo Cannon, añadiendo que, en ese momento, los médicos no se habían preocupado por el síntoma.
Dos meses después del nacimiento del bebé, Cannon y Scott, de 28 años, recibieron la noticia de que su hijo tenía un glioma de alto grado, una forma rara de cáncer cerebral. Poco después, le colocaron una derivación en el cráneo para drenar el líquido, pero los tumores siguieron creciendo.
Según Cannon, él y Scott preguntaron a los médicos si había alguna manera de prevenir los tumores y, en caso contrario, cuánto tiempo tenían con su hijo.
“Empezamos a preguntarnos: ‘¿Hay alguna forma de prevenir esto? Si no, ¿cuánto tiempo nos queda?’”, señaló Cannon a People. “Las conversaciones se convirtieron rápidamente en: ‘¿Cómo podemos darle la mejor vida durante el tiempo que tiene?’ Podrían ser semanas, podrían ser meses, podrían ser años”.
Tras consultar con los médicos del bebé, la pareja decidió finalmente renunciar a procedimientos o tratamientos invasivos como la quimioterapia, y el cómico explicó que mantuvieron “conversaciones sobre la calidad de vida” y que querían asegurarse de que su hijo fuera “lo más feliz posible”.
“Teníamos conversaciones sobre la calidad de vida”, recordó. “Podríamos haber tenido esa existencia en la que hubiera tenido que vivir en el hospital, conectado a máquinas, durante el resto del tiempo”.
Cannon, que se ha sometido él mismo a quimioterapia para el tratamiento del lupus, una enfermedad inflamatoria causada por el ataque del sistema inmunitario a sus propios tejidos, tampoco quería que su hijo sufriera el mismo dolor que él había experimentado.
“De alguien que ha tenido que lidiar con la quimioterapia antes, conozco ese dolor”, dijo. “Ver que eso le ocurría a un bebé de dos meses, no quería eso. No quería que sufriera”.
A partir de ese momento, Cannon declaró que él y Scott marcaron cada uno de los hitos de Zen como una “victoria”, y la pareja celebró el cumpleaños de su hijo cada mes.
La salud del bebé empeoró en noviembre, durante el Día de Acción de Gracias, y Cannon señaló al medio que Zen comenzó a luchar por respirar y a “jadear por aire”. Además de asustar al bebé, el propio actor encontró los momentos difíciles de presenciar, ya que lo describió como “la cosa más aterradora que he experimentado”.
Según Cannon, él y Scott decidieron llevar al bebé a pasar un día en la playa, donde pudieron ver el amanecer y “simplemente estar allí con él una última vez”.
El bebé murió el 5 de diciembre con su madre y su padre a su lado. De la oportunidad de estar con su hijo, Cannon expresó que era una “bendición” y añadió: “Alyssa dice: ‘Creo que te estaba esperando’”.
Cannon, que también es padre de gemelos de 10 años, Moroccan y Monroe, con Mariah Carey, de su hijo Golden, de cuatro años, y de su hija Powerful Queen, de 11 meses, con Brittany Bell, y de gemelos de cinco meses, Zion y Zillion Heir, con Abby De La Rosa, compartió la noticia del fallecimiento del niño en su programa, donde relató entre lágrimas a la audiencia: “No se puede curar hasta que se siente”.