Presidente de la Fed insiste en que el mercado laboral estadounidense se enfría
El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, reforzó el miércoles el mensaje de que la Fed pone cada vez más atención a la ralentización del mercado laboral y no solo al control de la inflación, un cambio que indica que, probablemente, pronto se comiencen a reducir las tasas de interés.
“No solo somos un banco central dedicado a abordar la inflación”, dijo Powell ante la Comisión de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes, en el segundo de dos días de testimonio semestral ante el Congreso. “También tenemos un mandato relacionado con el empleo”.
El martes, cuando Powell se dirigió a la Comisión Bancaria del Senado, indicó que la Fed había “avanzado considerablemente” hacia su objetivo de vencer el mayor pico inflacionario en cuatro décadas, y señaló que recortar las tasas “demasiado tarde o demasiado poco podría debilitar indebidamente la actividad económica y el empleo”.
El Congreso le ha dado a la Fed un doble mandato: mantener la estabilidad de los precios y promover el máximo empleo.
“Por largo tiempo”, dijo Powell el miércoles, “hemos tenido que centrarnos en el mandato relacionado con inflación”. Conforme la economía salía de la recesión provocada por la pandemia, la inflación alcanzó su punto máximo en cuatro décadas a mediados de 2022. La Fed respondió aumentando su tasa de referencia 11 veces en 2022 y 2023. Desde entonces, la inflación ha caído a 3,3% desde su máximo de 9,1%.
El crecimiento de la economía y del mercado laboral estadounidenses se han mantenido, desafiando los pronósticos generalizados de que los costos del crédito mucho más altos, derivados de la elevación de tasas por parte de la Fed, provocarían una recesión. Sin embargo, el crecimiento se ha debilitado este año. De abril a junio, los empleadores estadounidenses añadieron un promedio de 177.000 puestos al mes, el ritmo de contratación trimestral más bajo desde enero de 2021.
Powell dijo el miércoles al panel de la Cámara que, para evitar daños a la economía, la Fed probablemente no esperaría hasta que la inflación alcance su objetivo de 2% antes de comenzar a reducir las tasas.