Sánchez visita Kiev en el inicio de la presidencia española de la UE

El presidente del gobierno de España, Pedro Sánchez, inició la presencia rotatoria del país en la Unión Europea con una visita relámpago a Kiev el sábado para subrayar el apoyo del bloque a Ucrania ante la invasión de Rusia.

Sánchez llegó a la capital ucraniana en tren desde Polonia. Pronunciará un discurso en el parlamento antes de reunirse con el presidente, Volodymyr Zelenskyy, con quien ofrecerá una conferencia de prensa conjunta más tarde, explicó el gobierno español.

Zelenskyy anunció la visita el jueves en su intervención en la cumbre de líderes comunitarios en Bruselas, donde resaltó el simbolismo del viaje y la importancia de los próximos seis meses para Europa. Según el mandatario ucraniano, es momento de empezar a negociar el ingreso de Kiev en el bloque.

“La guerra en Ucrania será una de las grandes prioridades de nuestra presidencia, con el foco puesto en garantizar la unidad (en este asunto) entre todos los estados miembro”, dijo Sánchez el viernes en Bruselas.

Esta es su tercera visita a Kiev desde el inicio de la invasión rusa en febrero de 2022.

Sánchez regresará a Madrid el domingo para reunirse con el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel. Un día más tarde, llegarán a la capital española la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el colegio de comisarios del bloque.

Además de sobre Ucrania, España espera lograr avances en otras cuestiones importantes para la UE durante su turno en la presidencia, que termina el 31 de diciembre.

Sánchez cree que el bloque finalizará el polémico pacto migratorio a pesar de que las persistentes diferencias entre Polonia y Hungría y el resto de los 27 seguían siendo evidentes el viernes.

A principios de mes, los socios comunitarios avanzaron en la reforma de la ley de asilo al acordar un plan para compartir la responsabilidad por los migrantes que entran a Europa sin autorización. Solo Varsovia y Budapest votaron en contra.

Los legisladores de la UE han advertido que esta podría ser la última oportunidad para resolver el problema antes de las elecciones europeas de dentro de un año, en las que la migración podría volver a ser un asunto destacado.

España asume la presidencia rotatoria del bloque en vísperas de los comicios generales del 23 de julio. Según las encuestas, la coalición de izquierdas comandada por Sánchez podría perder el poder en favor de un gobierno conservador, o de una coalición en la que participe la ultraderecha, siguiendo la tendencia que se ha dado en gran parte de Europa.

Sánchez apuntó que quiere centrarse en reconstruir las cadenas de suministro intraeuropeas para evitar la escasez y en garantizar la soberanía nacional, lo que supondría establecer un dominio europeo en campos como la inteligencia artificial y la seguridad digital.

España espera también que la cumbre UE-América Latina que se celebrará el 17 y 18 de julio en Bruselas, la primera de este tipo en ocho años, suponga un “salto cualitativo” en las relaciones entre las dos regiones y arroje una potente agenda de inversiones con las naciones latinoamericanas y caribeñas.

El gobierno español quiere que el bloque avance además en la transición ecológica y en la reforma del mercado eléctrico, donde Madrid tienen una amplia experiencia en instalaciones de energía solare, eólica y de hidrógeno verde.