Policía española cree que cadáver baleado hallado en Alicante sería de ruso que desertó a Ucrania
La policía española dijo el martes que sospecha que el cadáver encontrado en una localidad del este del país, que presentaba varias heridas de bala, es el del desertor Maksim Kuzminov, quien huyó en un helicóptero del ejército ruso al otro lado de la línea del frente en Ucrania a finales del año pasado.
Andrii Yusov, representante de la inteligencia militar ucraniana, confirmó a la prensa local que el expiloto ruso había muerto en España, pero no ofreció más detalles.
Por su parte, el jefe del Servicio de Inteligencia Exterior de Rusia, Sergei Naryshkin, dijo a reporteros rusos que Kuzminov era un “traidor y un delincuente" que se convirtió en un “cadáver moral” tan pronto como comenzó a planear “su sucio y terrible crimen”, de acuerdo con la agencia noticiosa estatal rusa Tass.
Tass apuntó también que Alexei Danilov, secretario del Consejo Nacional de Seguridad y Defensa de Ucrania, dijo que Kiev le había sugerido a Kuzminov quedarse en Ucrania, donde estaría protegido.
Preguntado por el caso, el vocero del Kremlin, Dmitri Peskov, indicó que no tenía información al respecto y que Moscú no había recibido ninguna información a través de los canales diplomáticos.
Según la Guardia Civil española, el cuerpo descubierto el 13 de febrero en la entrada de un complejo residencial en La Cala, cerca de la ciudad portuaria de Alicante, tenía documentación falsa que lo identificaba como un hombre ucraniano de 33 años. Pero la policía cree ahora que podría tratarse de Kuzminov.
Kuzminov desertó el año pasado volando a Ucrania a bordo de un helicóptero militar Mi-8 con la ayuda de la inteligencia de Kiev.
El cuerpo recibió media docena de balazos y fue arrollado por el auto que utilizaron sus agresores, de acuerdo con la agencia noticiosa española Efe.
Según los reportes, cerca del lugar se encontró más tarde un auto en llamas — posiblemente el empleado en el ataque — pero la Guardia Civil no confirmó la información de inmediato.
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Las periodistas de The Associated Press Emma Burrows en Londres y Hanna Arhirova en Kiev, Ucrania, contribuyeron a este despacho.