Muere otro bombero en incendios forestales en Canadá
Un bombero pierde la vida cuando combate un enorme incendio en el noreste de Columbia Británica, la segunda muerte este mes en la provincia canadiense durante la temporada de incendios récord de este año
Un bombero perdió la vida cuando combatía un enorme incendio en el noreste de Columbia Británica, la segunda muerte este mes en la provincia canadiense durante la temporada de incendios récord de este año.
Un comunicado de la Real Policía Montada de Canadá dijo el sábado que el hombre de 25 años de Ontario trabajaba el viernes justo antes de las 11:00 de la mañana en un área remota cuando su vehículo todoterreno de servicio pesado volcó sobre un camino de grava.
La policía detalló que la víctima, que no ha sido identificada públicamente, fue transportada en helicóptero a Fort St. John pero murió en el camino.
La Real Policía Montada indicó que en el lugar se realiza una pesquisa sobre el incidente.
Las autoridades provinciales confirmaron que el hombre era un bombero contratado que trabajaba para el servicio de incendios forestales a través de una compañía privada de Columbia Británica y murió cuando combatía el incendio de Donnie Creek de casi 6.000 kilómetros cuadrados (2.316 millas cuadradas)
El 13 de julio, la adolescente Devyn Gale, de 19 años, perdió la vida al combatir las llamas cerca de Revelstoke, Columbia Británica, tras ser impactada por un árbol que se derrumbó.
El primer ministro de Columbia Británica, David Eby, emitió un comunicado el sábado en que señaló que la muerte registrada poco tiempo después de la de Gale “ha afectado a personas en todas partes” de la provincia y devastado a la comunidad de bomberos.
“Esta temporada de incendios forestales ha sido profundamente horrible”, dijo Eby.
Según estadísticas del servicio de incendios forestales de la provincia, actualmente hay 363 incendios activos en Columbia Británica, con 11 nuevos en las últimas 24 horas y 191 clasificados como fuera de control.
En total, ha habido 1.517 incendios forestales en Columbia Británica este año, consumiendo un récord de 15.397 kilómetros cuadrados (5.944 millas cuadradas) de árboles, arbustos y pastizales.