Los noruegos se preparan para más consecuencias de los fuertes aguaceros
Los noruegos se preparaban el jueves para más inundaciones y destrucción ante la crecida de los ríos tras días de lluvias torrenciales que arrojaron grandes cantidades de agua sobre las montañas del sureste del país, donde hay amplias zonas anegadas o afectadas por deslaves.
Miles de personas que viven cerca de cursos de agua fueron evacuadas, vaciaron sus viviendas y trasladaron sus autos a terrenos más altos.
Se temía que el puente ferroviario sobre el río Lågen pudiese derrumbarse debido al gran volumen de agua, pero las autoridades ferroviarias dijeron el jueves que ya estaba estable. El tráfico a través del puente se había interrumpido el lunes.
El miércoles, una represa cercana colapsó parcialmente luego de que el mayor río de Noruega se desbordó y rompió la estructura. Las comunidades ubicadas río abajo fueron desalojadas y no se reportaron víctimas. Según la policía, la situación en la represa se estaba evaluando de forma continua.
Los residentes en la ciudad de Hønefossen, por la que pasa el río Begna, fueron evacuados ante la enorme cantidad de agua que anegaba el centro. Las autoridades no ofrecieron la cifra total de desalojados en todo el país, pero la televisora noruega NRK apuntó que habría hasta 4.000.
Había helicópteros preparados para ayudar a sacar a la población de las zonas más remotas. Las autoridades apuntaron que las inundaciones podrían durar hasta el viernes y que las principales carreteras podrían estar cerradas durante días.
“El nivel del agua subirá", dijo el primer ministro, Jonas Gahr Støre, el miércoles en la noche acerca de las inundaciones. “Es una advertencia seria para los próximos días".
La tormenta Hans azotaba el norte de Europa desde el lunes, causando daños y alteraciones en Noruega, Dinamarca, Suecia, Finlandia, Lituania, Estonia y Letonia. Hubo rutas de transbordador canceladas, vuelos demorados, calles y carreteras anegadas, así como heridos por ramas caídas y miles de personas se quedaron sin electricidad. El sureste de Noruega se ha visto especialmente afectado.
“El clima extremo ha tenido graves consecuencias en varias zonas del país, la situación es grave y evoluciona constantemente", apuntó el jefe interino de la policía de Noruega, Håkon Skulstad.
La Dirección Recursos Hídricos y Energía de Noruega elevó el jueves el nivel de alerta por inundaciones y deslaves de naranja a rojo para algunas zonas del sur del país.
“Esta es una situación muy grave que puede provocar greves consecuencias y daños”, indicó en un comunicado.
Los meteorólogos noruegos emitieron una alerta roja por aguaceros extremos.
En la vecina Suecia, parte del puerto de la segunda ciudad más grande del país, Gotemburgo, seguía anegado. Las carreteras y vías de tren de la zona estaba cerradas debido al agua.
El Instituto de Meteorología e Hidrología sueco emitió avisos naranjas — el segundo nivel más alto — por riesgo de inundación para zonas a lo largo de la frontera con Noruega.