Cómo los padres de Emmanuel Macron descubrieron que su hijo salía con su profesora de 40 años
El presidente francés y su esposa se enamoraron cuando él aún era un adolescente, y ella su profesora de teatro en el colegio
Una biografía del presidente francés Emmanuel Macron reveló el desconcierto de sus padres cuando descubrieron que su hijo de 16 años tenía una aventura con su profesora casada.
Mucho se ha hablado de que el centrista Macron está casado con Brigitte Trogneux, una mujer 24 años mayor que él a la que conoció cuando era un colegial de 15 años y ella era profesora en La Providence, un colegio privado de Amiens, al norte de Francia.
La escritora Anne Fulda, autora del libro Emmanuel Macron, un jeune homme si parfait (Emmanuel Macron, un joven perfecto), habló con los padres del político sobre el escandaloso romance que comenzó cuando Trogneux era una mujer de 39 años, casada y madre de tres hijos.
Los padres del estudiante habían creído que su hijo salía con Laurence, la hija de su profesora, hasta que la verdad salió a la luz a través de un amigo de la familia.
Escandalizados por el romance ilícito, los Macron sacaron al adolescente, quien tenía un gran potencial, del colegio.
Su madre, Françoise Nogues-Macron, dijo a Fulda: “No lo podíamos creer. Lo que está claro es que cuando Emmanuel conoció a Brigitte, no podíamos simplemente alegrarnos”.
Pero añadió: “Lo que me importaba no era si tenía o no una relación con Brigitte, sino que estuviera vivo y que no hubiera problemas”.
Al darse cuenta de que la aventura no sería una fase pasajera, Françoise dijo a la profesora: “¿No lo ves? Tú has tenido tu vida. Pero él no podrá tener hijos contigo”.
Su padre, Jean-Michel Macron, reveló que “casi [se había caído] de la silla” cuando se enteró de la amante de su hijo: “Cuando Emmanuel conoció a Brigitte, desde luego no dijimos: '¡Qué maravilla!'”.
Los padres, conmocionados, se reunieron con Trogneux y le pidieron que no volviera a ver a su hijo hasta que fuera mayor de edad; pero ella, desafiante, les dijo que no podía “prometer nada”.
En cambio, la abuela materna del futuro presidente, Manette, se mostró sorprendentemente comprensiva.
Recuerda Françoise: “Mi madre, que nunca habría tolerado una situación así para sus propios hijos, se mostró mucho más abierta y tolerante con las relaciones amorosas de sus nietos”.
Ambos progenitores niegan haber amenazado al joven con echarlo de casa, e insisten en que, en cualquier caso, iba a cursar el último año de sus estudios en el prestigioso Liceo Henri IV de París.
El joven Macron no era alumno de las clases de francés de su futura esposa, sino de sus clases de teatro, que ella impartía como segunda asignatura. Brigitte recuerda haber quedado asombrada por su “inteligencia excepcional” y “una forma de pensar que nunca había visto antes” y afirma que, cuando llegó a La Provence, “todos los profesores hablaban maravillas de Emmanuel”.
La improbable pareja se hizo íntima cuando fueron coautores de una obra de teatro. Brigitte se lo contó a un amigo años más tarde: “El día que escribimos juntos la obra, tuve la sensación de estar trabajando con Mozart”.
“La escritura se convirtió en una excusa. Sentí que nos conocíamos desde siempre”, añadió.
La primera dama de Francia confirmó a la revista Paris Match el año pasado que un Macron decididamente romántico había jurado casarse con ella cuando solo tenía 17 años, prometiéndole volver a buscarla tras ser enviado a la capital.
“No puedes librarte de mí. Volveré y me casaré contigo”, habría dicho el joven.
Por su parte, Macron relató que sus padres “se lo [habían tomado] mal”, al enterarse de la relación. Dijo: “Tuve que luchar para poder vivir mi vida privada y profesional como deseo”.
“Tenía que luchar por algo que no era lo más fácil ni lo más obvio, ni lo más automático, y que no se correspondía con las normas establecidas”, agregó.
La pareja acabó casándose en 2007, cuando él tenía 29 años y ella 54. Convertido en un padrastro muy joven para sus tres hijos adultos, les dijo en la recepción de la boda: “Gracias por aceptarnos, por aceptar a esta pareja no muy normal”.
En 2017, Macron se convirtió en el presidente más joven de la historia de Francia con 39 años, la misma edad que tenía su esposa, quien ahora tiene 71, cuando se conocieron.
Muchos comentaristas han afirmado que la obsesión por su diferencia de edad es un ejemplo de misoginia profundamente arraigada, ya que muchos hombres en posiciones de poder han estado casados con mujeres mucho más jóvenes.
Traducción de Sara Pignatiello