El genio musical de Cri - Cri permanece a 31 años de su muerte

Francisco José Gabilondo Soler, mejor conocido como Cri - Cri, el Grillito Cantor, fue un músico originario de Orizaba, Veracruz que marcó una era en la composición de temas infantiles. Su legado se conserva hasta hoy y representa un tesoro para la cultura mexicana.

Murió en Texcoco, Estado de México, un 14 de diciembre de hace 31 años, en 1990, después de quedar inmortalizado en temas como ‘Caminito de la escuela’, ‘La muñeca fea’ o ‘La patita’ y más de 225 temas más, que han sido traducidos a diferente idiomas y forman parte del imaginario del habla hispana a nivel mundial.

Desde niño, Gabilondo Soler mostró una gran habilidad para adquirir conocimientos, aunque no en la escuela, que le parecía ruidosa y aburrida. En la soledad del campo y del bosque, aprendió por sí mismo más de lo que enseñaba la educación primaria.

Era aficionado a los idiomas y al origen de las palabras y desde joven demostró tener un oído privilegiado que asimilaba lo mismo voces, sonidos y ritmo que iba transformando en música que se sumaba a las melodías que su abuela tocaba al piano.

Francisco se inspiró después en relatos como las Fábulas de Esopo, las historias de Julio Verne y los cuentos de Emilio Salgari, Hans Christian Andersen, Wilhelm Hauff y los hermanos Grimm para crear un universo de personajes y canciones.

Según la Sociedad de autores y compositores de México, de la que fue fundador, tuvo una afición por la astronomía, y en su juventud practicó boxeo, natación, y tauromaquia. En esta última, fue conocido como “El Estudiante”.

A los 17 años se encontró con el jazz al viajar a Nueva Orleans, en Estados Unidos, para estudiar linotipia. La convivencia con los diferentes géneros musicales que se encontraban en apogeo, lo llevó a formarse como compositor.

Decidió aprender música a los 19 años, en una pianola de unos baños públicos en su natal Orizaba, fijándose en donde bajaban las teclas que marcaban las notas de la manivela. Ya como pianista, inició tocando en bares y casas de citas, al tiempo que compuso temas como ‘Montecarlo’, que fue grabado por una banda estadounidense en Nueva York.

A inicios de 1934, ya como una figura reconocida, Emilio Azcárraga Vidaurreta le sugiere escribir temas infantiles. Al presentarle un número a Otón Vélez, gerente artístico de la XEW, consigue su primer espacio en la radio que se estrenó el 15 de octubre de ese año, con los temas ‘El chorrito’, ‘Bombón I’ y ‘El ropero’. Fueron quince minutos mal pagados sin patrocinio, sin nombre y sin personaje, que representarían el inicio de un programa que duraría casi 27 años.

Fue en ese espacio donde nació Cri - Cri, cuando el gerente artístico de la estación le sugirió que algún animalito narrara las aventuras de sus canciones, por lo que Gabilondo Soler decidió que fuera un grillito cantor. A los 15 días, el personaje contaba con el patrocinio de la Lotería Nacional.