Stay up to date with notifications from The Independent

Notifications can be managed in browser preferences.

“Un día sin miedo”: comunidades de Chicago apoyan a vendedores ambulantes ante redadas migratorias

Christine Fernando
Miércoles, 12 de noviembre de 2025 13:57 EST
CHICAGO-REDADAS MIGRATORIAS-COMERCIANTES
CHICAGO-REDADAS MIGRATORIAS-COMERCIANTES (AP)

Los ciclistas llegan al amanecer, recorriendo los barrios latinos de Chicago y deteniéndose en carritos de tamales, puestos de elotes y de dulces. Compran hasta el último artículo: cada tamal, cada mazorca de maíz, cada paquete de dulces. Luego cargan la comida y la entregan a refugios y familias necesitadas.

Desde el inicio de la ofensiva federal de inmigración, en la que más de 3.200 personas han sido arrestadas en el área metropolitana de Chicago, las calles y tiendas de los barrios latinos de la ciudad se han vaciado. Los vendedores ambulantes no salen de sus casas para trabajar por miedo a ser detenidos. Los restaurantes locales se han visto en problemas, ya que los clientes se quedan en casa.

Pero mientras el miedo se extendía, también lo hacía otra cosa: los vecinos se apoyaban mutuamente y encontraban formas creativas de ayudar a los vendedores y dueños de restaurantes. Entre ellas está el esfuerzo comunitario para organizar eventos llamados “compra total” cuyo objetivo es permitir que los vendedores que temen ser detenidos por agentes de inmigración puedan irse a casa temprano. Algunos habitantes de Chicago han reunido dinero en sus vecindarios o a través de organizaciones locales, mientras que otros simplemente han comprado todos los productos de los puestos de tacos camino al trabajo o de los vendedores de tamales fuera de sus bares locales.

En La Villita, Rick Rosales, organizador comunitario de Cycling x Solidarity, ayuda a organizar dos de estos paseos de “compra total” por semana, en cada uno de los cuales generalmente se apoya a cinco vendedores ambulantes.

Rosales afirma que los vendedores suelen quedarse sin palabras. No creen que él quiera llevarse todos sus productos.

Una vez, después de que el grupo compró todo el carrito de un vendedor de tamales, el hombre los encontró días después para decirles que, apenas unas horas más tarde, varios agentes de inmigración fueron vistos en su cuadra. Rosales dice que el hombre les agradeció por salvarle la vida.

Según Rosales, esto tiene que ver con la comida, la alegría y los paseos en bicicleta, aunque también es muy arriesgado debido al miedo que hay en las comunidades en este momento.

Vendedores ambulantes en la mira de la ofensiva de inmigración

Es difícil decir cuántos vendedores ambulantes han sido objetivo de los agentes federales de inmigración, dijo María Orozco, coordinadora de extensión de la Asociación de Vendedores Ambulantes de Chicago. Agrega que conoce al menos a diez que han sido detenidos.

En septiembre, un vendedor de tamales fue detenido mientras vendía fuera de un Home Depot, según defensores locales. Poco después, agentes federales arrestaron a un vendedor de flores en el barrio suroeste de Archer Heights. Luego fueron por un vendedor de algodón de azúcar en La Villita, un sitio predominantemente mexicoestadounidense. Agentes de inmigración irrumpieron en el mercado de pulgas Swap-O-Rama en octubre y detuvieron a más de una docena de personas. Y la semana pasada, más de 100 residentes del barrio de Brighton Park se manifestaron para exigir la liberación de su tamalero local.

Ni el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos, ni el Departamento de Seguridad Nacional ni la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (ICE, NHS y CBP, respectivamente, por sus siglas en inglés) respondieron a distintas solicitudes de comentarios.

Orozco dijo que la ausencia de estos vendedores es una pérdida tanto cultural como económica, y afirma que son parte del tejido de la ciudad. Dijo que traen vida, color y sabor a las calles de la urbe, preservando tradiciones culinarias y construyendo un sentido de comunidad, además de ser apreciados por los vecinos.

Los vendedores ambulantes que tienen miedo de trabajar o ven caer sus ventas pueden solicitar apoyo financiero a través de la Asociación de Vendedores Ambulantes de Chicago. El grupo lanzó una campaña en GoFundMe con el objetivo de recaudar 300.000 dólares para apoyar a los vendedores ambulantes.

Orozco dijo que los negocios locales también han organizado eventos emergentes donde un cierto porcentaje de las ganancias va a los vendedores ambulantes. La organización también ha ayudado a conectar a los vendedores con personas que esperan comprarles todo.

Afirma que todo ha sido muy emotivo y que los propios vendedores no sabían cuánto los aman y apoyan los habitantes de Chicago.

Las comunidades se movilizan para apoyar a los restaurantes ante caída de las ventas

Mientras Alonso Zaragoza, administrador ejecutivo de su grupo de defensa del vecindario, conducía por su comunidad predominantemente latina de Belmont Cragin, notó que los restaurantes estaban mayormente vacíos y oscuros. Los negocios de comida de comunidades mayoritariamente latinas han reportado caídas significativas en las ventas desde que los agentes federales irrumpieron en la ciudad en septiembre.

Así que Zaragoza comenzó a organizar recorridos por restaurantes, atrayendo a cientos de personas a los negocios de propiedad latina que atraviesan dificultades. Su evento anterior comenzó en un restaurante de tacos y tamales y terminó en una heladería mexicana. En el camino, los vendedores ambulantes ofrecían elotes, algodón de azúcar y globos mientras un grupo musical local tocaba música folclórica y bluegrass.

Señala que el apoyo financiero para los negocios es ahora más necesario que nunca, ya que hace una gran diferencia.

“Un día sin miedo”

Delilah Martinez, organizadora comunitaria y propietaria de la Vault Gallerie en Pilsen, no podía soportar más el silencio en su calle. Estaba acostumbrada a ver caras conocidas en la Calle 18: una mujer vendiendo dulces con su bebé atado a su espalda, un paletero que le sonreía cada tarde. Luego, en una semana, todos se fueron.

Se sintió descorazonada, pues las calles lucían vacías. Sentía que la gente ponía en riesgo su libertad solo para poder trabajar.

Comenzó a recaudar dinero en línea y lanzó la “Operación Compra Total”, acercándose a los vendedores uno por uno para comprar todo lo que tenían. La primera mujer se sorprendió cuando Martinez le entregó 500 dólares.

La intención, dijo Martinez, era que la vendedora tuviera un día de descanso, un día sin miedo.

Entre las personas a las que ayudó recientemente estaba un panadero de Ciudad de México que llegó a Chicago hace 24 años.

Cada noche, el hombre trabaja hasta tarde, con las manos cubiertas de harina, amasando hasta que le duelen. En esas pocas horas de silencio, después de que sus cuatro hijos están dormidos, el mundo parece más simple.

Señala que hay magia mientras hornea y que se siente libre. Siente que, cuando está enojado, el pan absorbe ese sentimiento, por lo que trata de mantenerse feliz y en paz, aun cuando la realidad sea distinta.

A las 3 de la mañana, se levanta de nuevo para su turno en la tienda de comestibles, compaginando el trabajo y el traslado de sus hijos a la escuela. Durante años, ha vendido pasteles de cumpleaños y pan dulce de boca en boca desde su pequeña cocina, soñando con abrir su propia tienda algún día.

Pero él también ha escuchado las historias: vendedores ambulantes arrestados en calles residenciales y agentes federales rodeando su barrio históricamente mexicoestadounidense de Pilsen. Dos de sus amigos han sido detenidos. Cuando escucha sirenas y helicópteros, dice sentirse enfermo de miedo.

Su mayor temor es que lo separen de su hija menor, pues no se ve a él mismo sin sus hijos.

Martinez llevó al panadero a una mesa y quitó un paño negro. Una batidora plateada de calidad de restaurante brillaba bajo la luz fluorescente. También le entregó un sobre con 1.500 dólares reunidos entre los vecinos, que esperan que le resulten útiles cuando se sienta inseguro al vender sus productos horneados en la calle.

La mano del hombre voló para cubrir su boca. Sacudió las piernas y comenzó a llorar.

Agradeció efusivamente mientras abrazaba un accesorio de la batidora contra el pecho.

____

Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.

Thank you for registering

Please refresh the page or navigate to another page on the site to be automatically logged inPlease refresh your browser to be logged in