Buscan respuestas tras ataque fatal a guardería en Brasil
Los padres en Blumenau, una pequeña ciudad del sur de Brasil, buscan la forma de explicarles a sus hijos que un hombre asesinó a cuatro de sus amiguitos, mientras que los brasileños de todo el país se preguntan qué hacer para frenar la violencia en las escuelas
Los padres en Blumenau, una pequeña ciudad del sur de Brasil, buscan la forma de explicarles a sus hijos que un hombre asesinó a cuatro de sus amiguitos, mientras que los brasileños de todo el país se preguntan qué hacer para frenar la violencia en las escuelas.
Decenas de dolientes se reunieron en la guardería de Blumenau para orar, depositar flores para las víctimas, que tenían entre 5 y 7 años, y llorar. Al menos otros cuatro niños resultaron heridos en el ataque, el segundo en una escuela en la última semana que sacude a la nación y presiona al gobierno para encontrar soluciones.
Carlos Kroetz y otros padres llegaron para recoger las mochilas de sus hijos que se quedaron en la guardería debido al caos del miércoles por la mañana.
“Mi hija cree que un ladrón entró y se escapó sin dañar a nadie”, dijo Kroetz a The Associated Press mientras sostenía la bolsa de Minnie Mouse de su hija de 6 años. “Ella conocía a niños que murieron. Todavía tenemos que encontrar la forma de decírselo. Por ahora, tiene miedo de ir sola al baño porque cree que el ladrón estará allí”.
Franciele Chequeto dijo que una de las niñas asesinadas era amiga de su hijo Gabriel, de 7 años.
“Él no está entendiendo”, dijo Chequeto. “Me senté y le dije que ya no podrá ver a algunos de sus amiguitos”.
Una vigilia fuera de la escuela el miércoles por la noche terminó cuando los padres soltaron al aire cuatro globos blancos.
El jueves por la mañana, familiares y seres queridos se reunieron en el centro de la ciudad en el cementerio de Sao Jose para los primeros tres entierros. Los padres se sentaron en silencio la mayor parte del tiempo junto a los pequeños ataúdes. Las cuatro víctimas eran hijos únicos, sin hermanos, dijo el alcalde Mário Hildebrandt a los periodistas.
Las autoridades aún tienen que dar un motivo para el ataque de un hombre con un hacha, pero ocurrió en una ola de asaltos violentos en escuelas cada vez más frecuente en Brasil.
Por su parte, el ministro de Educación, Camilo Santana, anunció la creación de un grupo para abordar la violencia escolar. Él encabezará el grupo, que tenía previsto reunirse por primera vez el jueves.
Desde 2000 hasta 2022, hubo 16 ataques o episodios violentos en escuelas de Brasil, cuatro de ellos en la segunda mitad del año pasado, según un informe de investigadores dirigidos por Daniel Cara, profesor de educación de la Universidad de Sao Paulo. Los 12 investigadores, incluidos psicólogos, científicos sociales, educadores de escuelas públicas, periodistas y activistas, entregaron su informe al gobierno entrante de Luiz Inácio Lula da Silva en diciembre.
La semana pasada, un estudiante en Sao Paulo apuñaló fatalmente a una maestra e hirió a varias personas más. En otro ataque a una guardería, también en el estado de Santa Catarina, en mayo de 2021, el agresor usó una daga para matar a tres niños menores de 2 años y dos adultos.
No existe un factor único que explique el auge de este tipo de ataques, pero un denominador común es lo que Cara llama “una crisis de perspectiva” respecto a los problemas económicos y la probabilidad de que cada agresor sufriera situaciones de frustración y violencia, incluido el bullying y el acoso.