TK Maxx refuta la afirmación del príncipe Harry sobre la rebaja anual del almacén minorista
El duque de Sussex escribe que compraba su ropa de todos los días en los grandes almacenes en sus nuevas memorias
TK Maxx refutó la afirmación del príncipe Harry en sus nuevas memorias, Spare, que compraba su ropa en el almacén minorista durante su rebaja anual.
En su libro, que se publicó el 10 de enero, el duque de Sussex reflexionó sobre comprar en TK Maxx durante su “rebaja anual”. Sin embargo, TK Maxx ahora respondió a la afirmación del miembro de la realeza y aclaró que sus tiendas no tienen rebajas.
“Si bien estamos encantados de que el príncipe Harry sea un gran admirador, pensamos que deberíamos explicar que en realidad no tenemos rebajas”, un portavoz de la marca le aclaró a Express. “En cambio, ofrecemos gran valor, estilo y descuentos durante todo el año”.
TK Maxx, conocido como TJ Maxx en Estados Unidos, respondió después de que Harry relatara lo mucho que le gusta comprar su ropa diaria en los grandes almacenes.
“Para mi ropa casual de todos los días, iba a TK Maxx, la tienda de descuento”, escribió en Spare. “Me gustaban en particular sus rebajas de una vez al año, cuando estaban repletos de artículos de Gap o J Crew, artículos que acababan de salir de temporada o estaban ligeramente dañados”.
También detalló los beneficios del supuesto descuento y por qué comprar en TK Maxx es tan beneficioso como comprar para minoristas de alto nivel.
“Si lo hacías en el momento adecuado, y llegabas el primer día de la oferta, ¡podías comprar la misma ropa por la que otros estaban pagando el precio más alto en otras tiendas!”, Harry escribió. “Con doscientas libras podrías parecer un figurín de moda”.
El duque afirmó que tenía “un sistema” para comprar en la tienda, ya que llegaba aproximadamente “15 minutos” antes de que cerrara.
“Tomaba una cubeta roja. Subía deprisa al último piso”, continuó. “Comenzaba a revisar sistemáticamente un estante y otro. Si encontraba algo prometedor, lo sostenía contra mi pecho o mis piernas, parado frente a un espejo”.
Él señaló que no perdía “el tiempo” en decidir si le gustaba un “color” o “estilo” o no, y que no se molestaba en probarse la ropa. También compartió que su guardaespaldas lo acompañaba a la tienda.
“Si me sentía indeciso, le preguntaba a Billy the Rock”, explicó. “Le encantaba hacer pluriempleo como mi estilista”.
Concluyó explicando lo feliz que se sentía al final del viaje de compras, ya que ya no tenía que preocuparse por comprar ropa durante “otros seis meses”.
“A la hora de cerrar salíamos corriendo con bolsas de compras gigantes, sintiéndonos triunfantes”, Harry escribió. “Así los periódicos no me llamarían vagabundo. Al menos por un rato. Mucho mejor, no tendría que volver a pensar en la ropa durante otros seis meses”.
En otra parte del libro, Harry recordó cómo compraba su ropa más formal, que usaba para los eventos de la realeza.
“Cada año, mi pa me daba una asignación oficial para ropa, pero eso era estrictamente para ropa formal”, narró. “Trajes y corbatas, trajes de ceremonia”.
Traducción de Michelle Padilla