Directora de ‘Una casa de dinamita’ responde a las críticas del Pentágono por supuestas imprecisiones
El Pentágono cuestionó las afirmaciones de la película sobre la fiabilidad de su sistema de defensa antimisiles
Kathryn Bigelow responde a las críticas del Departamento de Defensa de Estados Unidos por su más reciente drama militar, Una casa de dinamita.
Tras el estreno de la película en Netflix la semana pasada, trascendió que el Pentágono había distribuido un memorando interno en el que advertía a sus funcionarios sobre la forma en que el filme retrata el sistema de defensa antimisiles nucleares del país.
La historia se centra en los 18 minutos posteriores al lanzamiento de un misil nuclear contra Estados Unidos. En ese contexto, la película plantea que los sistemas actuales de defensa tendrían apenas un 50% de probabilidad de interceptar el misil, pese a haber costado 50 mil millones de dólares.
En respuesta, la Agencia de Defensa contra Misiles (MDA) aseguró en un comunicado que sus interceptores han demostrado una precisión del 100% en pruebas realizadas durante más de una década.
Bigelow, al referirse al memorando en diálogo con The Hollywood Reporter, comentó:
“Me parece interesante. “En un mundo ideal, el arte impacta las decisiones públicas. Si logramos abrir un debate sobre armas nucleares, eso ya es un logro”.
Por su parte, el guionista Noah Oppenheim agregó: “Desde nuestra perspectiva, no se trata de un debate entre nosotros como cineastas y el Pentágono. Es un debate entre el Pentágono y la comunidad más amplia de expertos en el tema”.

“El senador Edward Markey, el general retirado Douglas Lute, periodistas como Tom Nichols y Fred Kaplan —quienes llevan décadas cubriendo este tema—, y la Sociedad Estadounidense de Física (APS), una organización no partidista, son algunas de las voces que respaldan lo que mostramos en la película: que el sistema actual de defensa antimisiles es profundamente imperfecto”, afirmó el guionista Noah Oppenheim.
En un artículo de opinión publicado en MSNBC, el senador Markey calificó la película como “una llamada de atención”.
“La defensa contra misiles de largo alcance no nos protegerá. La única salida real para evitar una catástrofe nuclear es reducir los arsenales en todo el mundo”, sostuvo.
Mientras tanto, el periodista especializado en temas de defensa, Tom Nichols, escribió en The Atlantic que la cifra del 61 % de precisión que aparece en el filme era “muy generosa”.
En respuesta, el Pentágono declaró a Bloomberg News que no fue consultado durante la producción de la película y que esta “no refleja las opiniones ni prioridades de esta administración”. Además, recalcó que el sistema de defensa antimisiles “sigue siendo un componente clave de nuestra estrategia de seguridad nacional, y garantiza la protección del pueblo estadounidense y de nuestros aliados”.

Bigelow ya había explicado su decisión de no involucrar al Pentágono en la producción de Una casa de dinamita. En una entrevista con el programa Sunday Morning de CBS, señaló: “Sentí que necesitábamos ser más independientes. Pero dicho esto, tuvimos varios asesores técnicos que trabajaron en el Pentágono. Estuvieron conmigo todos los días que rodamos”.
Al reflexionar sobre el impacto de sus películas bélicas galardonadas con el Oscar, como Vivir al límite y La noche más oscura, declaró a The Hollywood Reporter: “Yo simplemente expongo la verdad. En esta obra, todo gira en torno al realismo y la autenticidad. Lo mismo ocurre con La noche más oscura y con Vivir al límite, aunque Hurt Locker obviamente es una ficción, igual que esta. Para mí, son proyectos que apuestan fuerte por el realismo. Invitas al público, digamos, al centro de mando de STRATCOM, un lugar al que no se accede con facilidad, y por eso quieres que se sienta auténtico y honesto. Ese es mi objetivo, y creo que lo logramos”.
Tras un estreno limitado en cines, Una casa de dinamita llegó a Netflix, donde recibió opiniones divididas. Muchos espectadores expresaron su descontento con el desenlace.
Sin embargo, la crítica la recibió con entusiasmo. En una reseña de cuatro estrellas para The Independent, Geoffrey Macnab la calificó como “la película más entretenida sobre destrucción masiva desde Dr. Strangelove”.
Una casa de dinamita ya está disponible en Netflix.
Traducción de Leticia Zampedri






