Dos universitarios estadounidenses estaban entre las 154 personas fallecidas en estampida de Seúl

Dos estudiantes universitarios estadounidenses se encuentran entre las 154 personas que murieron en un desastre multitudinario durante las celebraciones de Halloween en Seúl, la capital surcoreana, el sábado por la noche.

El presidente surcoreano, Yoon Suk Yeol, declaró el domingo un periodo de luto nacional de una semana de duración por las personas que perdieron la vida en la aglomeración que se produjo después de que 100.000 juerguistas se agolparan en el distrito de ocio nocturno de Itaewon.

Entre los fallecidos estaba Anna Gieske, de 20 años, una estudiante de enfermería estadounidense de la Universidad de Kentucky que había estado estudiando en Corea del Sur y que llevaba un registro de sus viajes en Instagram.

“Tengo la increíblemente triste responsabilidad de informarles sobre la pérdida de una de nuestras estudiantes durante el fin de semana”, declaró el presidente de la universidad, Eli Capilouto, en un comunicado dirigido a los estudiantes y profesores el domingo.

“No hay palabras adecuadas o apropiadas para describir el dolor de una hermosa vida truncada. No es justo, ni comprensible. Es una pérdida y duele de un modo imposible de articular”.

Steven Blesi, un estudiante de 20 años de la Universidad Estatal de Kennesaw, en Georgia, también falleció durante el desastre, según su padre Steve Blesi.

“Acabamos de recibir la confirmación de que nuestro hijo ha muerto”, escribió Blesi en Twitter el domingo. “Gracias por la efusión de amor. Necesitamos tiempo para vivir nuestro duelo”.

Declaró para The New York Times: “[Mi hijo] era un espíritu aventurero y un espíritu amoroso. Esa es la única manera en que sé describirlo. Y la pérdida es simplemente insoportable”.

Todavía no está claro cómo o por qué ocurrió el desastre. La policía surcoreana ha asignado un grupo de casi 600 personas para investigar el incidente.

Sin embargo, los primeros informes y las declaraciones de los funcionarios de los servicios de emergencia sugieren que se trató de un aplastamiento por la multitud, en el que las personas quedaron atrapadas tan estrechamente entre sí, o bajo tanto peso de las personas que les habían caído encima, que no pudieron respirar.

Testigos y supervivientes describieron un caos “infernal” de personas que caían unas sobre otras “como fichas de dominó”, además de que toda la zona de Itaewon estaba atiborrada de vehículos y multitudes de los asistentes a la fiesta que impidieron al personal de rescate llegar a las víctimas.

Al parecer, fue la primera celebración pública de Halloween en tres años tras el levantamiento de las restricciones de covid-19, y la mayoría de las personas fallecidas eran adolescentes o adultos de unos 20 años.

A principios de este mes, una aglomeración de personas en un partido de fútbol en Indonesia causó la muerte de 130 personas, mientras que en un evento similar en el festival Astroworld de Texas murieron 10 personas el año pasado.