Posible adiós de Rafael Nadal en Roland Garros atrae a aficionados de todo el mundo
Amantes del tenis viajaron de todas partes del mundo al Abierto de Francia para una cita el lunes con Rafael Nadal, y verle jugar en que resultó ser su único partido en el Roland Garros de este año. Y posiblemente el último.
Nadal, que ha ganado 14 de sus 22 trofeos de Grand Slam en París, perdió 6-3, 7-6 (5), 6-3 ante Alexander Zverev en el segundo día del torneo en la cancha Philippe Chatrier.
Los fanáticos del tenis querían estar presentes en lo que parecía una ocasión histórica, incluso después de que Nadal dijo que sigue existiendo la posibilidad de que regrese.
“Es mi tenista favorito. Tal vez cuando se retire, encuentre a alguien nuevo. Pero no sé si le daré tanto amor”, dijo Fiona Li de 35 años, que trabaja en el sector de la moda de lujo en Holanda.
Li ha sido fanática de Nadal desde 2005 y posó junto a sus amigos en la estatua de Nadal que se encuentra entre una de las entradas principales de la sede y la Chatrier.
Nadal había dicho que se retiraría en algún momento de 2024. Cuando un reportero le dijo el sábado que la mayoría de la gente está asumiendo que este será su adiós a Roland Garros, sonrió y dijo: “No lo asumas”.
La gente anhelaba vivir el ambiente, y acercarse lo más posible a Nadal, ya sea visitando el monumento de acero, echando un vistazo a una práctica o comprando mercancía.
Julio Parada, un boliviano de 49 años que trabaja en la banca, quería una foto con la estatua, mientras usaba una gorra con “RF” al frente, por Roger Federer.
"En realidad, prefiero a Roger, pero Rafa fue el rival más difícil al que se enfrentó. Hicimos el esfuerzo porque somos conscientes de que este es quizás su último Roland Garros”, dijo Parada, quien asistió a su primer Grand Slam con su esposa y su hijo.
Barbra Chambati y su hija Crystal también tenían boletos para el encuentro. Había intentado ver una sesión de entrenamiento, pero no pudieron entrar porque estaba demasiado lleno.
Cathy Davis, de 75 años de Toronto, se autoproclamó como “fan suprema de Rafa”.
“En la cancha, su intensidad es un plus. Fuera de ella, es muy humilde”, dijo Davis.
Nadie podía saber con certeza cuánto tiempo permanecería Nadal en el cuadro durante estas dos semanas.
“No importa lo lejos que llegue”, dijo Li antes de ver a Nadal contra Zverev, “yo estaré allí”.