Estadounidense Curzan y Armstrong brillan en el Mundial. Chilena Köbrich , 8va en los 1.500
Con varias de las luminarias de Estados Unidos prefiriendo quedarse en casa, Claire Curzan y Hunter Armstrong acapararon el martes el protagonismo en el Mundial de natación. La veterana chilena Kristel Köbrich hizo historia al disputar otra final.
Curzan conquistó el oro de los 100 metros estilo espalda femeninos en el Aspire Dome, mientras que Armstrong se zambulló poco después para proclamarse campeón de los 100 espalda masculinos.
Estados Unidos lidera la tabla de medallas con cuatro preseas de oro y ocho en total al cabo de las tres primeras jornadas de competición en Doha.
También el martes, la italiana Simona Quadarella arrasó para batir otro récord mundial en los 1.500 libre femeninos; Hwang Sun-woo le dio a Corea del Sur su segundo oro individual del campeonato al ganar los 200 libre masculinos y la china Tang Qianting se consagró en los 100 espalda.
Quadarella empezó a distanciarse de sus rivales alrededor de los 500 metros y finalizó con una ventaja de casi media vuelta al registrar un tiempo de 15:46.99.
“Empecé lenta y luego fui acelerando a gusto", dijo Quadarella.
Katie Ledecky, la estrella estadounidense que ha dominado las carreras de largo aliento de estilo libre durante la última década, había ganado cinco de los últimos seis títulos mundiales en los 1.500. Pero decidió no venir a Doha.
Quadarella también se impuso en los 1.500 en 2019 cuando Ledecky no pudo competir por enfermedad. Pero la italiana de 25 años tendrá que nadar mucho más rápido si pretende tener alguna oportunidad de ganar el oro en los Juegos Olímpicos de París este verano boreal.
Ledecky, la reinante campeona olímpica, se llevó el oro en el Mundial del año pasado en Fukuoka con un registro de 15:26.27 — más de 17 segundos sobre su escolta Quadarella.
La otra nota destacada de los 1.500 fue el octavo puesto de Köbrich con su tiempo de 16:18.90. A sus 38 años, la chilena compitió en su octava final en mundiales de piscina larga.
Doha 2024 también es el 12do campeonato del mundo para Köbrich, un récord absoluto. Tenía 17 años disputó su primer Mundial en Barcelona 2003.
La china Li Bingjie (15:56.62) obtuvo la plata, seguida por la alemana Isabel Gose (15:57.55).
Curzan, de 19 años, obtuvo su primer título mundial, beneficiándose de la australiana y campeona defensora Kaylee McKeown y la destacada estadounidense Regan Smith. Ambas decidieron no viajar a Doha para enfocarse en los Juegos de París.
El tiempo de Curzan fue de 58.29 segundos, significativamente por debajo de los 57.53 con los que McKeown se impuso en Fukouka el año pasado. La plata fue para la australiana Iona Anderson (59.12) y la canadiense Ingrid Wilm (59.18) atrapó el bronce.
Armstrong se recuperó tras una confusión en las semifinales, donde nadó en el carril equivocado, y cantó victoria con 52.68. Después de conformarse con el bronce de los 100 espalda en los últimos dos mundiales, el estadounidense finalmente colgó un oro.
Armstrong superó al español Hugo González, su compañero de entrenamientos en la Universidad de California. González se llevó la plata con 52.70, seguido por el griego Apostolos Christou con 53.36.
El reinante campeón, el estadounidense Ryan Murphy, fue otra las estrellas que optaron por saltarse Doha. Ganó en Fukuoka el pasado verano con 52.22.