El GP de México se queda mudo tras retiro del piloto local Sergio Pérez

El Gran Premio de México es reconocido por el ruido que hace el público, que en ocasiones llega a ser ensordecedor. Los presentes anhelaban por ver una gran actuación de Sergio Pérez, su consentido.

Sin embargo, el Autódromo Hermanos Rodríguez se sumió en silencio menos de un minuto después del inicio de la carrera cuando el piloto local de Red Bull chocó contra el Ferrari de Charles Leclerc, en la primera curva y se salió de la pista. Momentos después, pasó lo que para muchos fue una pesadilla, “Checo” se retiró de la carrera.

Días antes, Pérez señaló que ésta era la carrera que más esperaba en la temporada. Las imágenes posteriores a su retiro dejaron claro que el mexicano estaba devastado, al igual que su público, el cual espera todo el año ver correr a un ídolo nacional y que empezó a abandonar el recinto tras saber que ya no verían más a “Checo”.

“La oportunidad, el sueño de ganar, de vivir mi carrera con pasión, eso me llevó a arriesgar algo que quizás era muy arriesgado pero que si me hubiera salido, salir de la primera curva en primer lugar”, comentó Pérez tras su retiro.

"En perspectiva no lo debí de haber hecho, pero si volviera a estar en esa situación lo volvería a hacer porque hoy no era suficiente para mí estar en el podio, sólo soñaba con ganar”, añadió el piloto de 33 años.

El mexicano, que tiene 32 podios en su haber, ha logrado meterse entre los primeros tres lugares los últimos dos años en su tierra natal. Por ello, señaló, “hoy un podio iba a ser muy poco”.

“Me olvidé del subcampeonato y simplemente quería ganar”, afirmó.

“Si estoy donde estoy es por la pasión que tengo, por la determinación que tengo”, respondió Pérez cuando se le preguntó si hay espacio para la pasión cuando se juega alto tan importante, en este caso, el segundo lugar en el campeonato de pilotos.

“Yo me voy tranquilo a casa porque di todo mi esfuerzo, di todo de mi y me voy orgulloso tanto de mi equipo como de mí porque al final darlo todo de ti es lo que puedes hacer”, manifestó.

Y al público, que ha estado con él en cada carrera desde que la F1 regresó a México en 2015, año con año esperando verlo ganar en casa, Pérez sólo les pudo dar las gracias.

“Muchísimas gracias por todo su cariño. Siempre me hacen vivir momentos inolvidables que hay que disfrutar mucho de estos momentos porque en unos años sólo serán grandes recuerdos”, dijo Pérez. “Me voy muy agradecido una vez más por todo su cariño. Me voy tranquilo a casa porque lo di absolutamente todo por ellos”.

“Mi afición es la mejor del mundo sin duda, por ello quería darles todo. Yo sólo quería ganar”.