Ghislaine Maxwell no es bienvenida en la prisión de Texas: “La trata es un delito violento”
La presencia de la cómplice y exnovia de Jeffrey Epstein enfureció a sus compañeras en el campo de prisioneras de Texas
El traslado de Ghislaine Maxwell a una prisión de mínima seguridad de Texas —conocida comúnmente como “El club de las delincuentes federales“— ha disgustado a sus compañeras, que creen que no debería estar allí dada la naturaleza de sus delitos.
La deshonrada socialité británica y exnovia del difunto delincuente sexual Jeffrey Epstein fue trasladada esta semana discretamente de una prisión de baja seguridad más estricta en Tallahassee, Florida, a un campo penitenciario a 160 kilómetros de Houston, Texas.
La nueva prisión de Maxwell alberga principalmente a reclusas condenadas por delitos de “cuello blanco” y faltas menores, y se dice que están enfadadas por su presencia.
Cumple una condena de 20 años por tráfico sexual de menores para Epstein, el financiero y pedófilo convicto, que fue hallado muerto en su celda de la cárcel de Nueva York mientras esperaba el juicio en 2019.
Un preso de la cárcel federal de Bryan dijo a The Telegraph que estaba “disgustada” por el traslado de Maxwell, un sentimiento compartido por muchos compañeros de prisión.

Julie Howell, de 44 años, que cumple una condena de un año por robo, declaró al citado medio que “todas las reclusas de las que me he enterado están molestas de que esté aquí”.
“Se supone que este centro alberga a delincuentes no violentas”, añadió. “La trata de seres humanos es un delito violento”.
Al parecer, cuando Maxwell llegó al centro, las reclusas estaban encerradas y tenían las persianas cerradas en un aparente intento de ocultarse de que las viera.
Los reclusos de las instituciones de mínima seguridad, también conocidas como Campo de Prisioneros Federales (FPC), disfrutan de una baja proporción de guardias de prisiones por recluso y de un vallado perimetral mínimo o inexistente.
FPC Bryan cuenta con un campo de deportes, gimnasio, actividades de arte y artesanía, un programa de teatro y un programa que permite a los reclusos jugar con cachorros y entrenarlos para que se conviertan en animales de servicio.
Es la misma prisión donde Elizabeth Holmes, fundadora de Theranos, la empresa fraudulenta de análisis de sangre, cumple una condena de 11 años.
En las últimas semanas, el presidente Donald Trump se ha enfrentado a la creciente presión de los demócratas y de sus partidarios MAGA (Hagamos a Estados Unidos grande otra vez) para que haga pública toda la información relacionada con Epstein, como había prometido durante su campaña.
Lo que desató la indignación fue que el Departamento de Justicia (DOJ) de la fiscal general Pam Bondi y el FBI se retractaran y concluyeron que Epstein se suicidó y carecía de una “lista de clientes” de personas influyentes para las que, según los teóricos de conspiración, conseguía chicas.

Desde entonces, la administración de Trump ha intentado calmar la ira al solicitar que los jueces publiquen las transcripciones del gran jurado en los casos Epstein y Maxwell, aunque no ha habido ninguna medida para publicar los archivos en poder del FBI y el DOJ.
El traslado de Maxwell se produjo una semana después de que fuera entrevistada por el fiscal general adjunto Todd Blanche, lo que alimentó intensas especulaciones de que la administración de Trump llegó a un acuerdo con ella.
Durante una entrevista de nueve horas, Maxwell fue supuestamente interrogada sobre docenas de multimillonarios, políticos y otras figuras notables relacionadas con el difunto delincuente sexual.
Sus abogados afirman que está dispuesta a declarar ante el Congreso a cambio de un indulto presidencial o una conmutación de su condena de 20 años, una posibilidad que Trump no ha descartado e incluso ha afirmado en repetidas ocasiones que tiene el poder para hacerlo.
Sus compañeras de prisión en el FPC Bryan están preocupadas por su seguridad, dadas las amenazas generalizadas contra Maxwell y la falta de estrictas medidas de seguridad en el recinto penitenciario.
Dijo Howell: “Hemos oído que hay amenazas contra su vida y muchos de nosotros estamos preocupadas por nuestra propia seguridad porque ella está aquí”.
Maxwell fue trasladada en secreto tras ser “bombardeada” con amenazas de muerte de violadores que la acusaban de ser una “soplona”, informaThe Daily Mail.
Una fuente declaró al periódico: “En cuanto Ghislaine habló con el gobierno, fue considerada una soplona por otras reclusas de Tallahassee. Hubo amenazas muy reales y creíbles contra su vida. Había temores reales dentro de Tallahassee de que no pudieran garantizar su seguridad, y por eso la trasladaron”.

En un correo electrónico enviado desde la prisión al Telegraph sobre el traslado de Maxwell, su compañera de prisión Howell escribió: “Sinceramente, me sorprende que la trasladaran a un campo penitenciario federal con su historial y sus cargos”.
Howell, casada, madre de cuatro hijos y exprofesora, declaró que su hija fue víctima de trata repetidamente desde los 17 años, lo que la llevó a ser “golpeada, asfixiada y finalmente lastimada con armas de fuego”, así como a quedarse embarazada, lo que provocó que su madre adoptara a la niña.
Los traficantes fueron detenidos por el FBI y las fuerzas de seguridad locales con la ayuda de Howell, y ahora cumplen penas de prisión federales de más de 20 años.
Howell, que fue condenada por robar un millón de dólares de su antigua empresa, la Universidad Estatal de Tarleton, para financiar su adicción al juego, declaró: “No culpo a nadie más por las acciones que me llevaron a FPC Bryan, pero definitivamente puedo decir que las circunstancias que en torno al tiroteo a mi hija fueron las que desencadenaron mi ciclo y mi adicción al juego para escapar de mi realidad. Tener a la Sra. Maxwell aquí desencadenó todos esos sentimientos”.
Howell también advirtió que Maxwell podría presentar un riesgo de fuga, dado cómo evadió a las autoridades durante meses antes de su detención: “Este es un campo del que literalmente se puede salir andando. No me importa a cuánta gente delate; eso no quita mérito a sus acciones”.
Y observó: “Como madre de una víctima de trata sexual, me repugna absolutamente que esté en este centro. Independientemente de su razonamiento, no creo que deba estar aquí”.
Traducción de Michelle Padilla