Biden llama a manifestantes del Capitolio “terroristas domésticos” radicalizados por Trump
El presidente electo Joe Biden calificó a la violenta muchedumbre pro Donald Trump que irrumpió en el Capitolio de Estados Unidos como " terroristas domésticos" que llevaron a cabo la "culminación" del "ataque" de cuatro años del presidente saliente a la democracia .
“Ojalá pudiéramos decir que no lo vimos venir. Pero eso no es cierto. Podíamos verlo venir ”, dijo Biden al comienzo de un evento en Wilmington, Delaware . Los últimos cuatro años hemos tenido un presidente que ha dejado claro su desprecio por nuestra democracia, nuestra Constitución, nuestro estado de derecho en todo lo que ha hecho. Desató un asalto total contra nuestras instituciones democráticas desde el principio ”.
"Ayer", dijo, "no fue más que la culminación de ese implacable ataque".
Biden arremetió contra el actual mandatario por, entre otras cosas, tratar de llenar los tribunales federales con "jueces de Trump" que se doblegarían a todos sus caprichos.
"Somos un gobierno de leyes... no hombres", dijo Biden, y señaló que ningún presidente es un "rey".
"Nadie puede decirme que si ese hubiera sido un grupo de Black Lives Matter que protestaba ayer no los habrían tratado de manera diferente", dijo Biden, golpeando su atril para lograr efecto. "Y eso es inaceptable".
Durante las protestas del verano por la desigualdad racial, los manifestantes negros fueron arrestados y se reunieron con una gran fuerza del orden público y personal de la Guardia Nacional federales y locales. La policía del Capitolio estaba sola cuando la turba enojada pro-Trump llegó el miércoles al Capitolio y fue rápidamente invadida; otros oficiales trataron a la multitud blanca con deferencia y se realizaron pocos arrestos en los terrenos del Capitolio.
Llamó al espectáculo, "no protesta", sino "caos" orquestado por una "turba" que equivalía a "terroristas domésticos".
Biden criticó las palabras a menudo duras del presidente saliente, incluida su descripción falsa de la prensa.
Dijo que Trump ha empleado "un lenguaje que los autócratas de todo el mundo han utilizado durante mucho tiempo: el enemigo del pueblo".