Especialistas advierten que respuesta de Biden a viruela del mono es similar al inicio de la pandemia
La engorrosa respuesta del gobierno federal de EE.UU. es similar el comienzo de la pandemia de coronavirus, aseguran los expertos
Los funcionarios de salud pública están haciendo sonar la alarma sobre la deficiente respuesta de la administración Biden al creciente brote de viruela del mono.
Mientras la Organización Mundial de la Salud (OMS) evalúa declarar la viruela del mono como una emergencia internacional, los expertos en primera línea de los trabajos para contener el virus en Estados Unidos están comparando la torpe respuesta del gobierno federal con el comienzo de la pandemia de coronavirus.
“Se siente como enero de 2020 otra vez”, dijo a The Washington Post Lauren Sauer, directora de la Red de Investigación de Patógenos Especiales.
Se han detectado más de 170 casos en EE.UU., según cifras de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, y el tiempo para detener la transmisión comunitaria se está terminando, dicen los expertos.
Sin embargo, es probable que solo sea una parte del número real de pacientes infectados, ya que EE.UU. se está quedando atrás con respecto a otros países en la expansión del acceso a pruebas y vacunas, señalan los expertos en salud.
Y la falta de urgencia en explicar el peligro al público ha dejado a las comunidades en riesgo vulnerables, en particular a los hombres homosexuales y bisexuales, explicaron varios funcionarios de salud pública a The Post.
A diferencia del coronavirus, la viruela del mono se ha estudiado durante años y los expertos de la OMS y los CDC cuentan con estrategias para prevenir un brote importante.
Los funcionarios declararon a The Post que los CDC han sido demasiado lentos en identificar casos positivos, y culpan a sus estrechos criterios de prueba.
Los médicos que quieren evaluar a un paciente para detectar el virus primero deben consultar con un epidemiólogo estatal, lo que puede provocar demoras de varios días.
El miércoles, la administración Biden comenzó a enviar pruebas de viruela del mono a laboratorios comerciales, lo que amplía la capacidad a unas 8.000 pruebas por semana.
“Todos los estadounidenses deberían estar preocupados por los casos de viruela del mono”, advirtió el secretario de Salud y Servicios Humanos, Xavier Becerra, en un comunicado emitido el miércoles.
Los expertos con los que habló The Post también mencionaron la falta de familiaridad entre los médicos estadounidenses con los síntomas, que generalmente comienzan con tos y fiebre parecidas a la gripe, antes de progresar a erupciones en la cara y el cuerpo.
David Harvey, director ejecutivo de la Coalición Nacional de Directores de ETS, mencionó que EE.UU. había sido mucho más lento en la distribución de fotos de cómo se ve el virus en la piel clara, en comparación con otros países afectados.
La semana pasada, el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, describió la reciente epidemia de viruela del mono como “inusual y preocupante”.
Se han detectado más de 3.300 casos de viruela del mono en 42 países donde el virus no se ha visto normalmente. Más del 80 por ciento de los casos están en Europa. Mientras tanto, África ya ha registrado más de 1.400 casos este año, incluyendo 62 muertes.
La viruela del mono ha afectado a las personas durante décadas en África central y occidental, donde una versión de la enfermedad mata hasta el 10 por ciento de las personas infectadas.
La versión de la enfermedad que se observa en Europa y en otros lugares suele tener una tasa de mortalidad de menos del 1 por ciento, y hasta ahora no se han informado muertes más allá de África.
El viernes podría tomarse una decisión sobre si la OMS declara el brote de viruela del mono como una emergencia mundial.