Detienen a mujer por 36 horas luego de perder embarazo por sospechas de que se hizo un “aborto ilegal”
Exclusivo: “Ella todavía tiene TEPT. No por el parto, sino por ser etiquetada como criminal y detenida”, dice el proveedor de servicios de aborto
Una mujer británica estuvo bajo custodia policial durante 36 horas a raíz de tener un mortinato (cuando el feto nace murto) debido a las sospechas de que había tenido un aborto después del punto de corte legal, se informó.
Los proveedores de servicios de aborto del Reino Unido, quienes apoyaron a la mujer, negaron que hubiera incumplido el plazo legal y advirtieron que el trato que sufrió “debería ser impensable en una sociedad civilizada”, sin ningún interés público “concebible” en retenerla.
Agregaron que la mujer está bajo investigación desde hace un año y medio, pero aún no ha sido acusada de ningún delito.
Jonathan Lord, director médico de MSI Reproductive Choices, uno de los principales proveedores de abortos del Reino Unido, le dijo a The Independent que la mujer inesperadamente dio a luz un feto muerto en casa que tenía alrededor de 24 semanas.
La mujer, quien tenía poco más de 40 años cuando se dio la muerte fetal el año pasado después de ponerse en contacto con MSI Reproductive Choices para preguntar sobre un embarazo no deseado y un aborto.
El Dr. Lord, copresidente de la Sociedad Británica de Proveedores de Servicios de Aborto, quien compartió la historia de la mujer con The Independent, comentó: “Se sorprendió al dar a luz porque no sabía cuánto tiempo de embarazo tenía. Ingresó al hospital”.
“Debido a que los colegas de atención médica sospecharon y sabían que ella se había puesto en contacto con nosotros, un proveedor de abortos, como les dijo, sospecharon que se había hecho un aborto ilegal y llamaron a la policía. Pero ella no estaba sobre el límite para un aborto legal”.
“La policía la arrestó en el hospital. Pasó la noche en el hospital y luego fue dada de alta a la mañana siguiente directamente bajo custodia policial. Les tomó 36 horas procesarla”.
El Dr. Lord contó que la experiencia de tener un mortinato “extraordinariamente inesperado” antes de que la detuviera la policía durante el encierro fue “traumática” y “angustiante” para la mujer que no puede ser nombrada para proteger la confidencialidad de la paciente.
Los abortos pueden llevarse a cabo legalmente dentro de las primeras 24 semanas de embarazo en Inglaterra, Escocia y Gales.
El Dr. Lord, ginecólogo consultor del Royal Cornwall Hospitals NHS Trust, informó que a la paciente se le había diagnosticado TEPT (trastorno de estrés postraumático) mientras la investigación policial sigue activa.
“Ella todavía tiene TEPT”, agregó. “No por el hecho del parto, sino por ser etiquetada como criminal y detenida. Ella sabe que está bajo investigación, pero no sabe por qué. La policía confiscó su teléfono y su computadora portátil”.
El Dr. Lord, quien contribuyó a la elaboración de los comités de normas de calidad y directrices para la atención del aborto del Instituto Nacional para la Salud y la Excelencia en la Atención, agregó que tiene acceso al peso al nacer y las medidas del niño nacido muerto y confía en que tiene menos de 24 semanas.
También dio el ejemplo de una joven adolescente a la que mantenían quien fue investigada por la policía después de que dio a luz a un bebé muerto a las 28 semanas de embarazo el año pasado.
Esto se da después de que las solicitudes de libertad de información obtenidas a través de National World la semana pasada revelaran que al menos 17 mujeres han sido investigadas por la policía en Inglaterra y Gales en los últimos ocho años por tener abortos ilegales o intentar interrumpir el embarazo.
El Dr. Lord añadió: “No hay interés público concebible en someter a estas mujeres al inmenso estrés y trauma de saber que podrían enfrentar largas sentencias de prisión por haber perdido su embarazo inesperadamente”.
“En el momento en que más necesitan acceso a sus amigos, profesionales de la salud y defensores, están aisladas mientras sus teléfonos y computadoras son confiscados. Cualquier búsqueda inofensiva en internet o mensaje con amigos, como ‘¿cómo puedo abortar?’, puede utilizarse como prueba en su contra”.
“Que una mujer pueda pasar 36 horas en una celda de la policía mientras se recupera de una cirugía tras la pérdida del embarazo, lo que resulta en TEPT, o que una joven adolescente pueda autolesionarse y se destruya su confidencialidad, debería ser impensable en una sociedad civilizada”.
Los abortos todavía se consideran un acto criminal en Inglaterra, Escocia y Gales bajo la Ley de Aborto de 1967. Si algún profesional médico realiza un aborto fuera de los términos de la ley, corre el riesgo de enfrentar una sanción penal.
La legislación aprobada en 1861 significa que cualquier mujer que interrumpa un embarazo sin obtener el permiso legal de dos médicos, quienes deben estar de acuerdo en que continuar con él sería riesgoso para la salud física o mental de la mujer, puede enfrentar cadena perpetua.
Durante años, los proveedores de servicios de aborto, las organizaciones benéficas, los organismos médicos y los parlamentarios han pedido que se despenalice el aborto en el Reino Unido. Quieren que la ley del aborto se separe de la ley penal y se controle de la misma manera que otras prácticas médicas.
El Dr. Lord expresó: “Esto ocurre porque tenemos una ley, creada 67 años antes de que las mujeres tuvieran derecho a votar, la cual establece al aborto (y, por lo tanto, la pérdida inexplicable del embarazo) como equivalente al asesinato”,
“El personal asume erróneamente que debe informar a la policía para que investigue, aunque violar la confidencialidad puede ir en contra de sus códigos reglamentarios profesionales. La policía y la fiscalía parecen no estar dispuestas a considerar la compasión o una prueba de interés público”.
Sus comentarios se dan después de que la Corte Suprema de EE.UU. anulara Roe vs. Wade, la histórica decisión que legalizó el aborto en todo el país en 1973, el viernes. Millones de mujeres en EE.UU. perdieron su derecho legal a interrumpir un embarazo, y se espera que más de la mitad de los estados del país prohíban el aborto o restrinjan bastante las políticas a raíz del fallo.
El Dr. Lord advirtió que no debemos “sentirnos complacientes porque las fuerzas que llevaron a la derogación de Roe vs. Wade no están también aquí” en el Reino Unido.
El NHS (Servicio Nacional de Salud del Reino Unido) de Inglaterra no quiso comentar sobre el tema.