Tormentas dejan 4 desaparecidos en este de Canadá

Cuatro personas se encuentran desaparecidas tras las intensas tormentas que dejaron cantidades récord de lluvia en los últimos dos días en una amplía zona de la provincia de Nueva Escocia —en la costa canadiense frente al Atlántico— donde causaron inundaciones súbitas, apagones y arrasaron caminos.

Las inundaciones cubrieron varios vehículos y la portavoz de la Real Policía Montada Canadiense, Cindy Bayers, dijo que se desconocía el paradero dos adultos y dos niños el sábado en la mañana tras dos incidentes de ese tipo en West Hants, al norte de Halifax.

Los dos niños desaparecieron cuando el vehículo en que viajaban quedó bajo las aguas, dijo Bayers, quien señaló que otros tres ocupantes escaparon sanos y salvos.

Otras dos personas, un joven y una mujer, según Bayers, continúan desaparecidos después que las aguas cubrieran otro vehículo. Dos personas más de ese vehículo fueron rescatadas y la policía busca intensamente a los desaparecidos, agregó.

Las lluvias torrenciales, que comenzaron el viernes en la tarde en toda la región de Halifax, dejaron hasta 200 milímetros de agua en algunas zonas. Las precipitaciones alcanzan un promedio en julio de entre 90 y 100 milímetros en la ciudad portuaria.

Con base en cálculos por radar y observaciones no oficiales, la agencia Environment Canada dijo el sábado que en algunas zonas las precipitaciones rebasaron los 300 milímetros en 24 horas.

Mapas de radar muestran que los aguaceros más intensos afectaron desde la playa suroeste en la provincia hasta un lugar al norte de Halifax. También se informó de amplias inundaciones en el condado Lunenbeg, al oeste de la región de Halifax.

El viernes en la noche, las aguas subieron tan rápido de nivel en la zona de Bedford que voluntarios con la unidad de Búsqueda y Rescate de Halifax acudían con pequeñas embarcaciones a rescatar a personas de casas inundadas.

En la zona de la planicie de Hammonds, al noroeste de la ciudad, las inundaciones destruyeron accesos a las cocheras y los arcenes de muchas carreteras. La zona es la misma donde 151 casas y negocios fueron destruidos por un incendio forestal que comenzó el 28 de mayo y obligó el desalojo de 16.000 habitantes.