Agentes del ICE allanan por error una vivienda en Oklahoma y se llevan las pertenencias de la familia
El Estado acordó a principios de año aumentar la colaboración con los agentes federales de inmigración
Al parecer, una madre de Oklahoma y sus hijas, todas ellas ciudadanas estadounidenses, fueron el blanco de un allanamiento violento y humillante por parte de agentes federales de inmigración la semana pasada, a pesar de que, supuestamente, no eran los objetivos previstos del operativo.
“Fue tan denigrante. Que le hagan todo esto a una familia, a las mujeres, a sus compatriotas”, expresó la madre, que se identifica con el seudónimo de Marisa, al medio local KFOR sobre el hecho.
“Literalmente, nos traumatizaron a mí y a mis hijas de por vida", agregó. Continuó: “Vamos a tener que buscar ayuda o superar esto de alguna manera”.
Según Marisa, el jueves por la mañana temprano, un equipo de agentes de varias agencias irrumpió en la casa que alquilaba en Oklahoma City, donde acababan de instalarse tras mudarse desde Maryland.
Además, detalló que los agentes les exigieron tanto a ella como a sus hijas que salieran de la casa antes de que pudieran vestirse.
“Querían que me cambiara delante de todos ellos, entre todos ellos”, dijo Marisa. Continuó: “Mi marido ni siquiera ha visto a mi hija en ropa interior, su propio padre, por una cuestión de respeto. Y estaba ahí, una menor, en ropa interior”.

Las autoridades le dijeron a la familia que tenían una orden de allanamiento, aunque en el documento figuraba el nombre de un individuo que parecía haber sido un inquilino anterior de la vivienda.
No obstante, registraron la vivienda e incautaron celulares y gran parte de los ahorros de toda la vida de la mujer en efectivo como evidencia. Además, no le dieron ninguna indicación de cuándo recuperaría su propiedad, dijo Marisa.
“Les dije antes de que se fueran. Les dije: ‘Se llevan mi celular’. No tenemos dinero. Acabo de mudarme aquí”, contó durante su entrevista con KFOR. Siguió: “Tengo que alimentar a mis hijas. Necesito dinero para la gasolina. Necesito moverme. ¿Cómo pueden dejarme así? Como un perro abandonado”.
Asimismo, la mujer detalló que los agentes se identificaron como miembros del FBI, del Servicio de Marshals y del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas.
Los Marshals negaron haber participado en la redada, mientras que el FBI declaró al medio que había colaborado en el caso.
“El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas estaba llevando a cabo un allanamiento autorizado por un tribunal en el marco de una investigación de tráfico de personas a gran escala. El caso fue aceptado para su enjuiciamiento federal en el Distrito Norte de Oklahoma”, dijo un alto funcionario del DHS a The Independent. Y agregó: “En las órdenes de allanamiento figuraba una dirección a la que se habían mudado recientemente ciudadanos estadounidenses. Los anteriores inquilinos eran los objetivos del allanamiento. Tras la investigación, se inculpó a ocho ciudadanos guatemaltecos por su participación en el tráfico de personas a Estados Unidos. Dos de los ocho extranjeros acusados tienen condenas penales por posesión de estupefacientes, usurpación de identidad, blanqueo de dinero y reingreso tras deportación”.
En febrero, Oklahoma concluyó múltiples acuerdos con funcionarios federales para aumentar la colaboración en operativos de inmigración como parte de su “Operación Guardián”.
Múltiples ciudadanos estadounidenses han sido detenidos por error como parte de la presión ejercida por Trump y sus aliados para hacer cumplir su ley antiinmigración.
Como parte de las medidas, el Gobierno también ha reanudado las llamadas “detenciones colaterales” de personas que no eran el objetivo previsto de los allanamientos, pero que, no obstante, se encontraban en el lugar y podrían ser detenidas.
Dichas detenciones fueron objeto de un acuerdo de demanda colectiva en 2022, en el que se establecieron limitaciones estrictas a la forma en que los agentes recurrían a este método.